Broken (Jainico).

22.-

POV Omnisciente

Después de eso, no hubieron mayores problemas o ataques de pánico, simplemente porque el moreno hacía lo que su esposo le había dicho. Ahora estaban en el living sentados, bueno, en realidad Nicolás estaba sentado en las piernas de su novio mientras este lo abrazaba por la cintura. Mientras sus amigos hablaban, el enojón le murmuraba cosas en el oído a su pareja.

-Estás bien amor?.-Preguntó Jaime, mientras acariciaba sus manos. El enojón ya se había asegurado de que nadie estaba escuchando.

-Sí, estoy bien.-Respondió Nicolás, recostando su cabeza en el hombro de su novio mientras sonreía un poco.

Nicolás hace rato se había dado cuenta que Jaime estaba muy sobreprotector con él, pero ya sabía porque era. Era el instinto lobo de su novio que solo lo quería proteger y hacerlo sentir seguro de todo, cosa que lo enternecía bastante.

-Si te sientes incómodo o algo, sabes que me puedes decir.-Dijo el híbrido, quien todavía tenía sus ojos rojos.

-Si lo sé Jaime.-Dijo el moreno con una sonrisa verdadera mientras sentía como su novio lo volvía a abrazar por la cintura.

-Te amo.-Dijo el enojón en un murmuro, mientras veía como su esposo tenía un leve sonrojo.

-Yo también te amo.-Dijo el pequeño moreno, mirándolo unos segundos.

-Eh, necesitan una habitación o algo?.-Preguntó Naiko, interrumpiendo el momento que tenían sus amigos, con una sonrisa.

El moreno se sonrojó aún más y el híbrido le gruñó a su amigo, haciendo que este le tuviera un poco de miedo.

-Jaime sé que es luna llena y que tus emociones se multiplican por mil pero ni yo estoy así.-Dijo Oscar con sus ojos celestes brillantes, no gustándole para nada que Jaime le gruñera a su novio.

El híbrido frunció el ceño y lo miró fijamente con sus ojos de alfa. Bestia agachó la cabeza en forma de respeto a Jaime. Tampoco es que lo hubiera querido, pero su lobo respetaba a los alfas, más aún al híbrido así que no tenía muchas opciones. Además la última vez que se había confrontado con Jaime, Nicolás había muerto por su culpa.

-Jaime tranquilo.-Murmuró su pequeño solo para que él escuchara.-No esta diciendo nada malo.

El recién nombrado miró a su novio, se tranquilizó y sus ojos volvieron a ser los normales. Ese era el poder que tenía solo Nicolás sobre él, ni siquiera Cristián lo podía calmar así.

-Estoy bien.-Dijo el hombre que tenía los ojos rojos con una leve sonrisa, sintiendo como su novio se acomodaba más sobre él.

-Quieres dar una vuelta, Jaime?.-Preguntó el pequeño travieso, mirándolo.

El enojón asintió y sintió como su pareja se salía de encima suyo. Luego se levantó y tomó la mano de su esposo para luego salir de la mansión.

-Alguien más los encuentra algo raros?.-Preguntó Manuel cuando se aseguró que sus amigos se fueron.

-Definitivamente sí. Algo pasó ese día en que Jaime fue a buscar al Nico.-Respondió Edgar, mirando al resto de sus amigos.

-Deberíamos hablarles al respecto?.-Preguntó Naiko, también queriendo saber que pasaba con sus amigos.

-No lo sé. Si se dan cuenta Jaime se molestó solo por lo que dijo Naiko, no sé si sea buena idea hablarles sobre eso.-Respondió Bestia, todavía con sus ojos celestes.

-Pero eso será por hoy no más, cierto? Solo por la luna llena?.-Preguntó Yelo, no teniendo ni idea de lo que pasaba.

-La luna llena no te cambia tanto, si te das cuenta Bestia esta igual que siempre, solo que con sus ojos de beta.-Dijo el ex-beta con una pausa.-Entonces sus emociones deben ser muy fuertes para que este así.

Se quedaron en silencio un par de minutos, sin saber que pensar y que no.

-Qué chucha pasó ese día?.-Se preguntó Manuel en voz alta, sabiendo que eso era lo que el resto también estaba pensando.

-De qué día hablan?.-Preguntó Jaime, quien ya había llegado con Nicolás, haciendo que todos se sobresaltaran.

-No es importante.-Dijo Edgar rápidamente, viendo como los ojos de su amigo se volvían rojos otra vez.

-Bueno, si no es importante entonces por qué hablan de eso?.-Preguntó el enojón, sospechando que algo pasaba.

Todos se quedaron callados haciendo que las sospechas de Jaime aumentaran. Segundos después tomó a Manuel por la ropa y lo obligó a que lo mirara.

-De qué estaban hablando?.-Preguntó el híbrido mirándolo fijamente, usando la compulsión en su mejor amigo.

-Queríamos saber que había pasado ese día cuando fuiste a buscar a Nicolás ya que ahora los dos están actuando extraño.-Respondió Manu robóticamente, sin poder controlar lo que decía. Manuel sintió como Jaime lo soltaba bruscamente y se quedaba congelado en su lugar.

Los ojos del híbrido siguieron rojos y notaron que algo raro pasaba. Segundos después, la mayoría se espantó cuando vieron que Jaime se había transformado en un lobo con el pelaje negro y todavía con sus ojos rojos.

El lobo alfa miró a sus amigos y les gruñó. Al parecer los quería atacar hasta que el moreno habló.

-Jaime, mírame.-Dijo Nicolás casi demandándolo, haciendo que el lobo lo mirara.-No han hecho ni dicho nada malo si? No hay necesidad de atacarlos.

La forma lobo de Jaime se acercó al moreno, siempre mirándolo a los ojos.

-Te amo Jaime, aunque sé que tu instinto te esta ganando, intenta recordarlo, esta bien?.-Preguntó el moreno, viendo como su esposo estaba demasiado cerca de él, pero no se colocó nervioso, sabía que su pareja no le haría daño.

Cuando el lobo alfa estuvo lo suficientemente cerca, este lamió la mejilla de su esposo para luego irse de ahí, a tal velocidad que parecía que hubiera desaparecido.

El moreno cuando comprobó que su novio se había ido, murmuró algo que hizo que todos se quedaran en estado de shock.

-Ese día que Jaime me fue a buscar, me violaron.-Dijo el pequeño moreno en un murmuro, dándole la espalda a sus amigos.-Esteban sabía y fue parte de eso. Michael fue el de la idea y otro weón lo hizo. Es por eso que Jaime y yo no veníamos, porque me dan ataques de pánico cuando alguien simplemente me toca por sorpresa o menciona el tema. Y también es por eso que Jaime esta así, siempre queriendo protegerme o evitando que me hagan preguntas que me podrían poner incómodo.

No hace falta decir que Jaime no volvió por el resto de la tarde a aquella mansión.