Capítulo 18

21 2 2
                                    


"18. Deja de decir mentiras"




- Vete al infierno, Axel.

- No. Debes escucharme, Mikayla. -me tiende una mano para ayudarme a ponerme de pie.

-¿Qué me vas a decir? -me pongo de pie ignorando la ayuda que me brinda. Limpio mis pantalones, por más que no estén sucios, mientras continúo hablando- ¿Que no fue tu intención golpearlo? ¿O me vas a golpear a mi también?

Luego de la escena en el almuerzo, cada quién ingresó a su salón. Pero lo que yo no me enteré fue que Zack, Zet y Axel no lo hicieron. Los desgraciados disfrazados de dementor en cuero decidieron "jugarle una broma" en el baño de hombres. Ninguno me ha dicho la razón hasta ahora y tengo la intuición de que ninguno va a decírmela. Retomando el tema; cuando me crucé con Axel en la hora de educación física, varios de mis chismosos compañeros ya me habían notificado sobre la ciruela que había ocupado el lugar del ojo de mi amigo.

-No, no vengo a eso -se encoje de hombros antes de seguir hablando y suelta una risa-. No me arrepiento de lo que hice.

-Ugh. Eres un idiota.

-Ah, y tú no ¿cierto? -el tonito, Scott. El tonito.

-Puede que sí. Pero al menos sí uso mi cerebro.

-¡Ah! ¿Tienes uno? -suelta entre risas y va dando pasos largos y un poco lentos en mi dirección- Pero mira que notición. No lo habías dado a notar.

- ¡Agh! ¡Cómo te odio! -levanto los brazos, lanzando puñetazos al aire cuando estuvo lo suficientemente cerca como para darle alguno. Pero, para mi habitual mala suerte, me tomó de ambas muñecas y las colocó detrás de mi espalda aún sujetándolas. Por lo tanto, estábamos tan cerca que si colocaban una sola y fina hoja de papel entre nosotros, ésta no caería al suelo.

- ¿Estás segura de lo que dices? -su aliento choca con mi rostro y un ligero toque de fresa se distingue de la menta.

Okay, Mikayla. Este es tu momento de mostrarte fuerte ante sus encantos. Este es tu maldito momento. No la cagues.

- Muy segura -no sé cómo diablos hice para que mi voz no flaqueara y poder sonar neutral. Pero, mierda, que salió hermoso. Eso es, Mikayla. Sigue así. Eres una puta genio. Mi ídola. Mi ejemplo a seguir. -. ¿Ya puedes soltarme? Tu olor a perro muerto está acabando con mi sentido del olfato.

Cada segundo que pasa te estoy amando más, estúpida.

-Mmm, no. -dice por lo bajo con la voz ronca. Baja la cabeza para después comenzar a repartir besos por todo mi cuello y clavícula.

Un suspiro sale por mis labios y él ríe, mientras pega más mi cuerpo al suyo. Si es que eso es posible. Comienza a caminar y me pega contra la pared, dejando a mis manos aún más inmóviles.

Lo arruinaste, imbécil. Íbamos bien.

Pasan los minutos y yo decido que es tiempo de parar con todo esto.

- Suéltame, Axel. -mi voz sale ahogada gracias a que muerde mi cuello con gran suavidad. Luego besa sobre el mismo lugar y se aparta.

Me mira con ojos de total desesperación. Como si intentara contener un impulso o como si dudara en decirme algo. A veces no lo entiendo. Logra irritarme y frustrarme. Así como también logra confundirme con sus actitudes. Por un lado hay días en los que no me dirige siquiera la mirada, otros en los que me mira con recelo, y otros, en los que hay momentos como este, saca su lado tierno, cariñoso y sensual que me provoca sensaciones que dificultan el intento de poder olvidarlo.

- Micky, por favor aléjate de él -implora en un susurro juntando nuestras frentes-. Sé de lo que hablo. Él sólo te está mintiendo.

-¿De qué hablas?-intento alejarme pero la tranquilidad tan contradictoria al tema que hablamos me impide hacerlo.

-Cuando Zack consiga su propósito, lo único que hará será alejarte de su mundo, burlarse de ti y si es lo que pienso, destruir tu vida -  deposita un casto beso sobre mis labios. Es muy rápido y suave, pero produce que miles de elefantes, rinocerontes y todo un zoológico baile salsa en mi estómago. -

-Axel, no entiendo de lo que hablas.

Nunca lo haces, estúpida. Te vuelves toda idiota cuando él está cerca. No sé como no babeas a veces.

- No puedo decírtelo aún. No estoy seguro. Pero de lo que sí tengo certeza es de que te quiero demasiado como para saber que lo que pretende aquel patán te lastime y yo no poder hacer nada al respecto. Por eso es que voy a prevenirlo a toda costa -vuelve a darme un besito sobre mis labios y sonríe con ternura-. Tengo que irme y por favor, esta noche no ignores mis mensajes.

Me sonrojo al instante y dejo que se aparte. Sale por la puerta de mi habitación y medio minuto más tarde puedo escuchar la puerta principal cerrarse.

¿A qué se refiere Axel con que Zack me miente? Zack nunca ha hecho nada de lo que pueda sospechar. Nunca se ha comportado de manera rara o sacado temas que no tengan nada que ver. Salvo estupideces, pero de las que yo digo a menudo.

Suelto un suspiro. Me dirijo al baño más confundida que nunca. Abro el grifo del lavamanos y con agua fría mojo mi rostro, intententando despejar mis ideas y teorías absurdas que comienzan a dar vueltas por toda mi cabeza. Miro mi reflejo en el espejo y puedo notar que comienzan a aparecer sombras debajo de mis ojos, causadas por el insomnio de varias semanas.

Suelto otro suspiro más y decido bajar a la cocina a prepararme un té y beberlo junto con mis galletas de canela, manzana y avena.

Un mensaje hace vibrar a mi teléfono justo cuando estoy vertiendo el agua caliente dentro de la taza. Lo abro con mi mano libre y veo que es de Axel.

"Por favor, nena. Hazme caso, aléjate de él."

Suelto el tercer suspiro de varios que tendré esta noche si este tema sigue dándome vueltas por toda la cabeza.



Hola criaturas perfectas, cada uno a su manera, por supuesto.

Espero que este capítulo les haya gustado, lo hayan gozado y se hayan deleitado con cada palabra. No digo que es una obra maestra que supera a Benedetti o a John Green, pero si la leen es porque les gusta.

Me despido con un beso en la cola y mucha suerte en todo lo que hagan estos días.

Nos leemos la próxima ♡

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Oct 18, 2016 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Clase Alta |PAUSADA|Where stories live. Discover now