Capítulo 17

11 1 0
                                    

"17. Ya no entiendo nada"

Katherine pasa al lado mío junto con Oriana, tomadas de la mano. Lleva puesto un vestido blanco de flores amarillas y unas sandalias con margaritas blancas en las cintas. Tan radiante como siempre. Me saluda agitando una mano y con una gran sonrisa plantada en su rostro.

Sigo mi camino hasta llegar a mi casillero. Me detengo en este y pongo la contraseña en el candado. Lo abro, saco mi libro de historia y de mi bolso saco el de química para sustituirlo por ese. Sin querer, tiro del auricular en mi oreja izquieda con la esquina del libro cuando estoy por guardarlo.

A mi izquierda, en la puerta del baño de mujeres, se detienen Axel y Natalie dándose un beso. Ella intenta ingresar al baño, pero Axel no quiere soltarla. Ambos ríen y yo ruedo los ojos mientras cierro mi casillero de una azotada tan fuerte que ambos paran con sus juegos. Me doy media vuelta en su dirección contraria sin siquiera observarlos.

Can't stop the feeling hace que todas mis ganas de matar a toda persona presente en este establecimiento y verlos agonizar, suplicándome piedad, o que los mate de una vez por todas, se vayan.

Ingreso a la cafetería con una gran sonrisa y mis ganas de bailar a tope. Zack me saluda desde la mesa en la que está sentado junto con sus amigos del equipo de volleyball. Le devuelvo el gesto mientras voy a la fila para mi frappé de dulce de leche matutino. Mientras espero mi turno Hymn for the weekend (seeb remix) empieza y cuando me toca, le doy mi pedido a la señora y de paso pido una rebanada de pastel de chocolate. Le sonrío cuando me los entrega y pago al final de la fila.

Voy a la mesa donde Zack y sus amigos, de mi bolsillo saco los dos rectángulos de papel y dejo uno de ellos sobre ésta mientras paso de largo. Me abro camino entre el gentío para poder cruzar las puertas de vidrio y salir al sector verde. Me ubico en mi mesa favorita y comienzo a comer al ritmo de Faded.

Unas manos me rodean por la cintura con fuerza, haciendo que me eleve de mi asiento. Luego empiezan a sacudirme con fuerza y, de pronto, Zack me besa en los labios, sujetándome de ambos lados de mi cabeza con sus manos.

- ¿Tienes idea de la gran persona que eres?- dice separándome abruptamente de él. El beso no duró más de dos segundos.

- ¿Por qué lo dices? -finjo inocencia.

- ¿Cómo que por qué? Deja de hacerte la tonta. ¿Cuánto te costó esa entrada, Mikayla?

- No pienso decirte el precio de esos boletos.

Sí, puede que el costo de las entradas para ver a Justin Bieber fuese una barbaridad, pero vale la pena si puedo sacar a Zack de su casa por unos días. Además, yo también quiero ir. ¿A quién engaño? Mamá me va a castigar. Un poco más y no robo su tarjeta de crédito para poder pagarlos.

- ¿Cuánto?- lo dice con tono de advertencia.

- Eso no se dice. Es un regalo, tonto.

- Estás demente, ¿lo sabías? -me encojo de hombros.

- Feliz cumpleaños, Zackie.-salto sobre él y lo envuelvo en un abrazo de koala.

- Sí. Feliz cumpleaños, Zackie.-un tono de voz masculino y sarcástico se escucha a mi izquierda.

Rompemos lentamente nuestro abrazo y vemos a las dos figuras altas y vestidas de negro, cruzadas de brazos mientras en sus labios tienen unas sonrisas burlonas. 

Estos tipos están comenzando a caerme verdaderamente mal. 

- Gracias, Zet. Es un lindo gesto el haberte acordado. -una sonrisa falsa se posa en los labios de mi amigo.

- Hola Mikayla. -dice Axel para luego bajar la mirada. No le contesto a lo que él la sube con el ceño fruncido y abre la boca para volver a hablar.

- Sí. Te escuché. Pero no tengo ganas de hablar contigo -digo-. Así que te voy a pedir que dejes de hablarme para que yo no tenga que seguir dirigiéndome a ti.

{***}

- Que me dejes en paz -intento cerrar la puerta pero él sigue poniendo resistencia, dificultándome la labor-. Ya... vete o llamaré a la policía.

- No hasta que me escuches, Mikayla  -de un empujón logra abrir la puerta, pero hace que caiga de culo al suelo-.  Lo siento... No fue mi intención.

- Vete a la mierda -lo miro deseando haber nacido con un super poder que lanzara rayos láser por mis ojos-. ¿Qué demonios estás haciendo aquí?

- Ya te dije. Tengo que hablar contigo.

- Me refiero que qué haces aquí en mi habitación. ¿Cómo entraste? Sólo estoy yo en la casa.

-Por la ventana de la habitación de tu madre, las de abajo estaban cerradas.

-¡Oh! ¿Así que ahora, además de boxeador, también eres mono araña?-enarco una ceja intentando no lanzarle el primer objeto que tenga cerca. ¡Oh! ¡Mira! Una engrapadora.

-Sí, una de mis cualidades que pocos conocen. -si sigue siendo sarcástico no me hago cargo de los actos que pueda llegar a cometer.

-Vete al infierno, Axel.


¡HOLA! Hasta acá dejo el capítulo de hoy.

Tengo pensado escribir tres capítulos cortos por semana. Así no se hace tan largo y tedioso para todos. Y nótese que he subrayado las palabras 'tengo' y 'pensado' para que quede claro que esto no es seguro todavía.

Para los que no lo sabían ayer fue mi cumpleaños (👑🎂🎈🎉💅) así que un lindo, pero muy lindo gesto de su parte sería darle a la estrellita ☆ y si les apetece comentar si les está gustando la novela.

Eso es todo por hoy. Bye♡




Clase Alta |PAUSADA|Where stories live. Discover now