Hidden (HunHan)

Capítulo III

_Cállate_ me ordenó.

Sabía porqué me había hecho callar. Eran los pasos que se sentían a través del corredor. Los pasos que había sentido desde mi habitación una y otra vez. Aquellos pasos provenientes de "algo". Nadie sabía  quién era el dueño, pero si era cierto, muchos conocían su existencia, y vivían sumidos en el miedo durante la noche, y ese miedo los invadía a tal punto de no querer preguntar. Yo, al igual que JongIn, y al igual que Luhan, había preguntado una y mil veces. Las autoridades del instituto sabían, pero nos mentían...Los estudiantes en cambio, lo desconocían y preferían seguir así. Se decía que solo un chico  había logrado ver a  aquella cosa, pero luego, el castigo fue severo. El Internado era genial y todos eran parcialmente felices aquí, siempre y cuando obedecieran las reglas. Solo debíamos hacer eso, fingir que no oíamos nada. Aquel chico, había sido amenazado y jamás hablaba de eso. Muchos desconocíamos si su existencia era real...de hecho, era como una especie de leyenda en este lugar.

Luhan los escuchaba con total concentración. Luego de un rato, quité su mano de mi boca.

_Solo ignóralos, Luhan_ le dije hablando en voz baja.

_¿Cómo esperas que los ignore?

_Solo son los cuidadores, debe ser la vieja Anh_ le mentí. Quizás con eso se tranquilizaría.

_ ¿A sí? _ Me preguntó_ entonces llámala. Grita su nombre.

_Claro que no..._ le dije. En aquel momento Luhan estaba dispuesto a gritar, entonces yo cubrí su boca_ ¿estás loco? Quédate tranquilo.

_Entonces dime, dime qué diablos sucede._ dijo quitando mi mano de su boca.

_Luhan, no puedo decirte nada, porque ni siquiera yo sé que es lo que sucede_ le respondí sincero. Este solo se me quedo viendo, como analizando cuan de cierto era lo que había dicho.

_Entiendo. No insistiré más..._ dijo por fin. Me tranquilicé un poco_ pero...lo averiguaré por mi cuenta.

_Luhan...por tu bien, deja de..._ antes de que pudiera decir algo, volvió a su cama y se acomodó en ella.

_Ten..._ dijo tendiéndome una almohada, me sorprendí por aquel gesto_ no suelo dormir con dos, solo uso una.

_¿Estas siendo considerado conmigo?_ lo molesté. Este solo me miró feo tras golpearme con la almohada en la cara. Idiota...

Sin más remedio, debía  dormir esa noche ahí. Los pasos ya no se oían, pero de seguro volverían a oírse luego. No era que se escuchasen todas las noches, había veces en que ni se oían. Muchas veces intenté ver de qué se trataba, pero cuando lo intentaba mi puerta ya estaba cerrada.

 Mi deber como monitor era vigilar que todos los estudiantes estuviesen en sus dormitorios antes de las diez, y coincidía con la hora en que comenzaban a escucharse aquellos pasos. De seguro era la razón por la cual  cerraban las puertas a esa hora. Querían evitar que viéramos aquello. Ya habían pasado dos años...estas medidas comenzaron a tomarlas luego de que un chico desapareció durante la noche. En el internado se rumoreaba que los pasos y sollozos que rara vez se oían provenían de alma en pena de aquel chico, cuyo nombre era Lee TaeMin. 

Una ventaja que teníamos los monitores, era que nuestras llaves podían abrir las puertas aunque que estas estuviesen cerradas con el extraño mecanismo que usaban, claro, solo por fuera, ya que así podríamos entrar a nuestras habitaciones si nos demorábamos en la vigilancia... pero no salir...de otro modo, me hubiese largado de la habitación de Luhan.

Esto, no debía decírselo a Luhan, ni a nadie, porque solo se meterían en problemas... Yo mismo lo había comprobado el año pasado, ya que fui castigado al inmiscuirme más de la cuenta. El castigo fue bastante medieval para mi gusto, pues me encerraron durante todo un día en un armario cerca de la oficina del director. Ahí entendí que realmente no debíamos inmiscuirnos más de la cuenta. JongIn, también fue castigado en reiteradas ocasiones, pero él era más terco. La señora Anh, y el profesor Choi eran quienes impartían los castigos, y este último, era el más peligroso de los dos. El castigo que yo recibí, en realidad no era nada en comparación con los que habían recibido algunos compañeros a manos de Choi Siwon. De eso, prefería no hablar.