11

10.7K 871 95
                                    

¡Recuerden seguirme en Instagram! mi usuario es: wuildervargasv

Por ahí estare haciendo encuestas, dando noticias de mis libros y muchas cositas importantes ❤

_.-

—¿Has sentido algún dolor diferente de lo usual? —Cuestiona el doctor Patterson revisando todo mi abdomen. El doctor Patterson, es un señor cincuentón, de alta estatura, cabello castaño poco remplazado por una capa de canas, por su sabiduría y vejez. Sus azules ojos se reflejan como un iceberg. Facciones duras, rusticas. En mi tiempo de niñez ese hombre me daba un temor indescifrable, es más frio que padre.

—No —musito, viendo la pantalla blanca y negra. A través de ella refleja la pequeña figura de mi bebé.

—Eso es buena noticia —sigue paseando el aparato sobre mi abultado vientre mientras observa la pantalla—. ¿No crees?

—Supongo —sonrió cuando visualizo la silueta del bebé.

—Sorprendente —habla para sí mismo, detalla la pantalla animadamente—. Lo encontramos esta vez más rápido que las veces anteriores —expone Patterson quien enfoca más la pantalla dejando observar con más nitidez la imagen que jamás pensé llegar a ver y mucho menos que yo fuese el de la situación—; se nota que está feliz, de saber que lo estás viendo —volteándose a verme.

—Lo sé —comento distraído.

Es algo mágico, ver la pantalla y cuestionarte ¿cómo sucedió esto?, en toda mi vida no creí que esto estuviera pasando, ya que es algo antinatural, además que la ciencia exacta no existe, porque todo se desmorona, hasta el mejor imperio erigido. Mágico idealizar que pronto estaría en mis brazos, desde luego, el miedo siempre atenaza mi garganta. El señor Cavill ha estado presente en todos mis ecos y dice que podría morir en cualquier situación que me ponga en riesgo, tanto el bebé, como el vientre artificial. Es muy extraño que hoy no esté aquí, pero luego llega a mi mente la última conversación con Jules.

—¿Joseph? ¿Estás bien? —Parpadeo varias veces, miro la pantalla donde está mi bebé.

Oh mi bebé, llegaste en un momento no debido.

—Sí... estoy bien... —expreso aún distraído.

—Bueno, muchacho —desvió mi vista para admirar al doctor Patterson—. Ya podremos saber el sexo del bebé —comenta, con una ligera, más bien micro sonrisa.

—¿Enserio? —La conmoción abarca todo mi ser al saber que podre saber el sexo de mi bebé.

Si. Ha pasado mucho tiempo desde que sé que seré padre. ¿Debería sentirme aborrecido al saber que soy un sujeto de prueba de un proyecto antihumano? La respuesta es no.

Definitivamente no.

—Claro que sí... veamos —pasea el aparato por todo mi vientre que está cubierto por una gélida capa de pomada— Mmm... —se detiene más arriba de mi ombligo y lo pasea por esa zona varias veces hasta posar su vista nuevamente en la pantalla en blanco y negro—. Vaya —glosa moviendo aún el aparato—. Es una nenita —ambos miramos sorprendido la pantalla—, el primer proyecto fetpregs es del género femenino.

¿Una nena?

Una sonrisa se muestra en el contorno de mis labios. Dejo escapar una solitaria lágrima de mi ojo derecho, seguida de muchas.

Una nenita... una hermosa nena.

Cierro mis ojos al sentir como mi sistema endocrino reacciona ante mis emociones. Es maravilloso, no estaba decidido en esperar un sexo concreto, pues asumía mis pensamientos en solo cuidarme y cuidar de mi bebé ya que, no me pasó por mi cabeza, qué podría ser. Pero de todas formas es hermoso saber qué será la criaturita que crece en mi vientre. Dios, seré padre de una nenita.

El curioso embarazo de Joseph ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora