Flawless World

Tres Noches

"He is the sweetest thing that I know
You should see the way he holds me when the lights go low
Shakes my soul like a pot hole, every time".

Peter no sólo tenía el poder de correr a una velocidad impresionante, también tenía el poder de dormir como si se propusiera invernar. Cerraba los ojos y una vez que se dormía no volvía a abrirlos ni porque hubiera música a todo volumen en la misma habitación... y aún así, en ese momento se había despertado al instante, sus ojos se habían abierto demasiado y parpadeaba varias veces para acostumbrar su vista a la oscuridad.

Un leve movimiento y un apenas perceptible quejido lo habían despertado y puesto en guardia. Esperó a que se repitieran para estar seguro y así ocurrió, Logan volvía a quejarse entre sueños. Esos quejidos para nada se comparaban a los anteriores, no habían gimoteos ni movimientos bruscos, sólo leves espasmos en sus brazos y de vez en cuando un rápido movimiento de ojos.

Subió lentamente y con cuidado, esta vez no deseaba volver a gritar o estaba seguro de que esta vez sí llamaría la atención de alguien más en la mansión, además de que no quería despertarlo. Subió hasta su rostro y comenzó a acariciarlo, un ceño fruncido apareció ante el tacto pero al instante se relajó cuando Peter comenzó a susurrar –Shhh... tranquilo... tranquilo... yo estoy aquí– hubieron un par de quejidos más antes de que todo rastro de molestia o miedo desaparecieran del rostro de Wolverine.

–Tranquilo... todo está bien... yo estoy aquí– Peter repetía las palabras que Charles antes le decía e intentaba sonar igual que él, seguro, cariñoso y protector. Un último quejido se escuchó y ahora Logan volvía a dormir plácidamente como lo había estado haciendo hacía unos minutos. Peter sonrió victorioso y regresó contento al torso de Logan donde nuevamente se acurrucó, incluso había cerrado sus ojos con fuerza y su sonrisa se había ensanchado cuando sintió más fuerza en el abrazo de Logan.

... * ...

Estaba siendo un pésimo día, una verdadera pesadilla en verdad. El sólo pensar que otro par de sus alumnos había salido por las puertas de la mansión Xavier, por el hecho de ser reclutados para el ejército, le partía el alma. Charles deseaba con todas sus fuerzas despertar y volver a aquellos días en que se sentía inmensamente feliz, con la escuela recién abierta, poco a poco llenándose de alumnos y maestros mutantes.

Continuó su camino hacia su habitación, ignorando completamente a Hank que lo miraba fijamente y compartía su tristeza. Abrió la puerta y en ese momento todo lo que había estado pasando no importó, fue superado por lo que podía ver y que le llenaba de pánico. Se odiaba por haber sido tan estúpido y sentimental, se odiaba por haber guardado aquella maleta en lo más profundo de su armario como si de un tesoro se tratara, pero es que simplemente eso era... uno de sus tesoros más valiosos.

Aquella maleta que un día había pertenecido a Erik Lehnsherr y había permanecido oculta por 14 años ahora se encontraba en su cama, abierta y con su contenido distribuido por toda la cama mientras Peter miraba todo con profundo dolor y tristeza. Peter ya había visto todas y cada una de las pocas pertenecías que aquella maleta guardaba y ahora simplemente permanecía sentado leyendo un viejo y ya maltratado libro, "The Ones and Future King".

Apenas parpadeaba, había tocado y estrujado con cierto cariño cada prenda que había en la maleta y después las había vuelto a doblar de la misma forma pulcra en que las había encontrado. Había también un arma pero ni siquiera se había impresionado o asustado, la había admirado y después colocado con cuidado sobre la almohada del hombre que por años le había negado la existencia de esos objetos.