Primera parte: Por los amigos

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                                                                                                                 Even if you're miles away

I'm by your side

So don't you ever be lonely

Love will make it alright

Anytime You Need A Friend. Mariah Carey

Shion

—¿Y estas cajas?—preguntó Jessica mientras las inspeccionaba.

—Son mías—dije acercándome a ellas—Son libros—mi amiga suspiró decepcionada y se alejó de ellas. Era de aquellas personas a las que coger un libro les producía urticaria. Cogí una y la llevé a mi habitación, una vez allí la dejé encima del escritorio y volví a por otra encontrándome con una agradable sorpresa—¡Ari!— exclamé al ver a mi amigo en la puerta, corrí a abrazarle y él me correspondió—¿Qué haces aquí? ¿Ha pasado algo?— pregunté alarmado. Él negó con la cabeza.

—Vengo a hacerte una visita—dijo mientras despeinaba mi pelo. Jessica salió de su cuarto preguntando quién era el que armaba tanto escándalo y que quería dormir, se calló al ver a Ari— Hola, hermanita.

—¿Qué haces aquí?—preguntó furiosa.

—¿Es tu hermana?—cuestioné desconcertado.

Sabía que Ari tenía una hermana con la que no se llevaba demasiado bien. Mejor dicho llevaban sin hablarse, por lo que decían en el Cielo, unos trescientos años más o menos.

—He venido a veros—respondió cohibido ante el tono de Jessica.

—Ya nos has visto, ahora vete—ordenó mi amiga cruzándose de brazos. En aquel momento supe que algo iba mal entre ellos. No sabía qué era pero me lo iban a contar.

—Jessica, al sofá—ordené, ella estuvo a punto de darse media vuelta pero se lo pensó mejor y me hizo caso. No sé si porque al ser yo su superior debía hacerlo o porque quiso. Nunca me lo dijo—Ari, al sillón—mi amigo dejó de abrazarme y se sentó en el sillón—Y ahora me vais a contar de qué va todo esto.

Jessica bufó y mi amigo se pasó la mano por el pelo, durante cinco minutos se formó un silencio incómodo en el que estuve a punto de mandarles a que cogiesen las cajas que faltaban y las llevasen a mi cuarto pero Jessica habló.

—Es mi hermano y un completo imbécil—Ari estuvo a punto de contestarla pero yo la pregunté por qué decía eso—Porque me robó a mi pareja.

—Oh venga, Mike era gay—protestó él ante la atenta mirada de su hermana— perdía más aceite que Shion—ese fue mi turno de mirarle mal a él. Se enzarzaron en una discusión sobre quién había visto primero al chico y yo no pude más que reírme, aquella situación era absurda. Los dos me miraron—¿Qué es tan gracioso?

—Que os peléis por alguien que acabó en mi cama—dije alegremente pues gracias a la descripción que habían hecho de él, supe perfectamente quién era. Era uno de los muchos ángeles que habían pasado por mi cama y se habían quedado a pasar una temporada en ella. Fue bastante corta la verdad, duró un mes o dos hasta que le mataron en una misión. Una pena—Además lleva años muerto. No entiendo la discusión—me levanté del sofá y fui a por un vaso de agua.

Sin saber lo que somos (Homoerótica)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora