09. "Nuestro hijo"

3.4K 290 52
                                    


Mis tardes no solían ser muy interesantes, Hanna había salido hace un rato igual que mis padres, por lo tanto: Estaba completamente sola.

Me aburría demasiado como para quedarme en casa, era un día muy bonito y tuve la brillante idea de sacar a pasear a Oreo por el parque.

- ¿En que estábamos pensando cuando le pusimos ese nombre?

¡La comida, Blair!

Camine junto con Oreo, el pequeño cachorro iba saltando y intentando casar moscas ¿Era un perro o un sapo? Reí ante mi pensamiento.

-Lindo día, eh

Sonreí.

-Hola, Cam.

Salude animadamente a pesar de que ya nos habíamos visto hoy en la mañana, después del momento de Cameron y su canción ambos volvimos a nuestras clases y por el resto de la mañana hicimos como si no hubiera pasado nada.

- ¿Puedo acompañarte? -Asentí y le hice una seña con mi cabeza para que se sumara. -Hey pequeño. -Cameron se agacho para saludar a Oreo pero este comenzó a gruñirle.

Reí nerviosa y aparte a Oreo con cuidado.

-Creo que no le caigo bien...

-Es porque no te conoce, pero te amara.

Cam me sonrío dulcemente, metió sus manos en los bolsillos de su pantalón y siguió caminado a mi lado.

- ¿Estás segura de que nadie te regaño por mi culpa? -Sacudí mi cabeza aún con una sonrisa.

-Nop. -Remarque la p. - Nadie se dio cuenta.

En realidad Jess se había dado cuenta de que yo me había escapado y tuve que contarle las razones, ella dijo que Cameron no le agradaba.

¡Pero él es tan dulce!

-Bueno, quiero recompensarte. -Lo mire confundida.

- ¿A mí? ¿Por qué?

-Te arriesgaste por este tonto. -Se apunto con ambos pulgares. - Y créeme que no lo dejare pasar.

-Cam no fue nada...En serio no es como si lo hubiera hecho para pedirte algo a cambio después o...-Vi como el tomaba mi mano y sentí algo eléctrico invadir mi cuerpo de pies a cabeza.

-Lo sé, se que lo hiciste porque eres buena amiga.

Auch.

Que horrible se siente la friend-zone.

-De todas maneras, tengo que agradecerte por escuchar mis ladridos y no salir corriendo.

Ladridos...

Mire hacia abajo, la correa estaba vacía.

- ¡No! -Chille haciendo que Cam también mirara.

Me había distraído unos segundos y esos segundos habían sido lo suficiente como para perder a mi perro.

- ¡No, no, no! -Estaba desesperada, mire a mi alrededor como cincuenta veces, estaba a punto de llorar ¿Por qué tenía que ser tan irresponsable? Esto era culpa mía y de mi gran torpeza.

-Tranquila preciosa, lo encontraremos.

Ignore esas mariposas en el estomago cuando me dijo preciosa y asentí eufórica.

-Yo voy por ahí, y tu por allí ¿Okey? -Cam comenzó a caminar relajadamente hacia el lado opuesto de donde me había indicado que yo tenía que ir, al principio corrí como una loca gritando el nombre de oreo por todo el bendito parque y muchos perros se me acercaban pero ninguno era mi perro.

Prohibido besar a Cameron OlsenWhere stories live. Discover now