Todo lo que quiero

Capítulo final 41

>>Tuve la oportunidad de salir de nuestra relación, tuve la oportunidad de tomar un camino más fácil, sin complicaciones, pero lo amaba, desde el inicio lo amé, quiero decir, lo vi en la universidad y lo supe, tardó en hacer un movimiento y cuándo lo hizo me lastimó con la verdad, pero estaba enamorada de ese hombre, era más que solo mi novio, es gentil, generoso, talentoso, todo lo que él toca florece y su altruismo no tiene fin, un hombre con principios bien fundamentados, pero lo más importante, es el hombre que después de treinta años aún me ama, ahora te pregunto ¿William te ama, Brooke?

No quiero hablar por él, porque temo equivocarme, sé que él me amaba antes de todo esto, ahora no sé si sus sentimientos puedan ser los mismos, me amó lo suficiente para quitarme de encima a Hector y darle la oportunidad a Elian de lastimarlo. Así que solo hablo por mí.

—Yo sé que lo amo, mamá Ruth.

—Ese es el problema, mi niña, mientras no estés segura de su amor querrás correr lejos en cada problema, porque estás acostumbrada a proteger tu corazón de esa forma y no te puedo juzgar por ello, me costó volver a confiar en Steven, es un trabajo de todos los días, lo que nos mantiene juntos es que estamos seguros del amor que nos tenemos.

—Él no confió en mí, ni con lo de Eva ni con lo del divorcio. Ahora sé que nada lo hizo con una mala intención, pero en su momento ocasionaron grandes cosas, mi accidente, la verdad de Bennet, todo ha sido demasiado.

—Es mi hijo y siempre voy a defenderlo, pero el amor de madre no me ciega, sé al hombre que críe y sé que te querrá aquí, hoy duele, mi niña, pero mañana será un nuevo día—se pone de pie para seguir hablando suavemente—, descansa, aléjate del hospital, no es un buen ambiente para una mujer que está acostumbrándose a ser mamá—siento sus suaves manos desenredando y trenzando mi cabello, me gusta tanto la sensación que dormito un poco en lo que termina—, disfruta de mis preciosos nietos y te prometo que cuidaremos de Will. Lo haremos por ti porque justo ahora la que necesita un descanso eres tú y es completamente válido.

Me fui a la cama sin culpa alguna, sabiendo que mis niños estaban en las manos correctas con su abuela, confíe en mamá Ruth para proteger mis sueños y a mis hijos, estoy segura de que no se mantuvo sola por mucho tiempo porque levemente escuché la voz de Eli mientras me levantaba a amamantar a los bebés, pasé tiempo con ellos en la cama plegable que estaba en su habitación, no me quise separar de ellos ni un segundo para no tener que entrar a la habitación que había compartido con William.

Casi todo lo que siguió de ahí fue un poco borroso, sé que mamá Ruth y Elisa estuvieron conmigo, sé que las dos se preocuparon a pesar de no tener obligación alguna y confieso que se sintió bien tenerlas ahí, tener un respaldo.

Las cosas se han puesto más complicadas y mamá Ruth tiene razón en algo, siguiendo su historia es como si ahora yo estuviera parada frente al altar y debo decidir si corro lejos o a Miller. El sonido de la puerta me hace despertar completamente, si me veo como me siento debo estar horrible.

—Adelante.

El señor Hitman asoma un poco su cabeza hasta que me siento un poco en la cama para prestarle atención.

—Hija ¿Descansaste?

—Papá—me emociono de verlo—, un poco, pero siento que no fue suficiente.

—No me sorprende, estás cuidando de los pequeños pie de foto. Por cierto, nuca dejaré de decir que están tan preciosos como su mamá.

—¿Mamá Ruth?

—Ha ido a ver a Will, yo también entré y tampoco me recuerda. Supongo que no debe saber que trabaja en el periódico. Es duro perder un elemento como él, solo me consuela saber que pronto se va a recuperar, no querrá estar lejos de ti por mucho tiempo.