capitulo 11

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Ha pasado un mes desde el día que Camila me dijo que sentía celos, celos de otras chicas que trataban de coquetear conmigo, en pocas palabras desde la escena de celos que me hizo sin que yo me diera cuenta pero no hay nada que no la calme con un beso.

En todo este tiempo mi relación con Camila creció mucho, todos los días debía de recibir un mensaje mío al despertar y antes de dormir, no importaba si la había visto todo el día.

Siempre pasaba por ella para ir a la universidad y para ir a dejarla a su casa, en ocasiones iba a la mía pero por lo regular yo estaba en la de ella. En este tiempo he logrado quince besos de mi castaña favorita, solo eso. Cada que yo iniciaba el beso colocaba mis manos en su cintura, cada que la bajaba o trataba de tocar otras partes, ella se tensaba y se alejaba sin mirarme y se concentraba en otra cosa, después de esos tres intentos decidí mantener mis manos firmes en su cintura sin moverlas para prolongar mas el beso y disfrutar de su sabor y calidez.

Desde mi primer beso con Camila no había estado con alguien más ni mucho menos un beso, aunque mi apetito sexual en ocasiones me absorbe y tengo que buscar la manera de calmarlo sin tener a alguien más. Sabía que si de verdad quería a Camila, debía de serle fiel y eso es lo que estoy logrando aunque me cueste.

Los rumores de mi relación con Alexa se esparcieron como polvo y todos hablaban de eso, ahora se puede decir que recibo tres veces más de mensajes que cuando estaba con Alexa, en los pasillos me hablaban, aunque les contestaba con amabilidad me ponía nerviosa ya que no quería que Camila me viera con alguien mas.

* * * * *

Estaba encerrada en mi habitación acostada en mi cama con la lap-top en las piernas mientras aparecían páginas con "como pedirle a una chica que sea tu novia" ya que en eso no tenía conocimiento, no le prestaba atención ya que para mí no era importante la forma en la cual pedirlo, si estábamos comiendo, en mi auto e incluso después de acostarnos o no era necesario decir esas palabras ya que ellas lo proponían.

Pero con Camila todo era diferente, ella si me importaba y mucho,  no quería que fuera algo sencillo, si no grande y que nunca olvidara.

Sigo buscando y me parecen opciones como "dale chocolates" "Regálale rosas rojas" una cartulina con las letras ahí o escrito en una tapa de helado. Todas esas propuestas se me hacen muy comunes y absurdas, quería algo que le gustara y recordara, así que tenía que ser el día de mañana y creo que no dormiré por los nervios.

* * * * *


Estaba con Camila en clase mientras todos se ponían a entregar sus trabajos, yo era la única que permanecía sentada en su lugar y sin intención de ponerme de pie, sentí la mirada de Camila y al verme ella negó, sinceramente no hice el trabajo por pensar en ella así que prácticamente Camila es la culpable de todo.

- Puedo darme cuenta de nuevo que usted es la única que no realizo el trabajo ¿O me equivoco señorita Jauregui? - no quite mi mirada del profesor, retándolo como siempre. - vaya a dirección por un reporte, no pienso tener inútiles como alumnos.


Lo que dijo hizo que me enojara, me puse de pie para enfrentarlo y callarle la boca pero unas manos en mi brazo hizo que detuviera mi camino hacia el frente y una voz cerca de mi oído "No, por favor Lauren". Sabía que a Camila no le gustaba que me metiera en problemas así que no la iba a defraudar.

Salí del salón y me dirigí a la dirección y ahí estaba Nicole, la secretaria del director, aproximadamente de unos veintiséis años y muy guapa pero no tanto que Camila.

- Hola Lauren, tiempo sin verte - ríe por su comentario - Que será ¿Dos días? - reí con ella ya que constantemente hemos platicado cada que vez que tengo que esperar al director, termino con su novio hace dos semanas pero dice que la está llevando bien.

Decisión Incorrecta - CamrenWhere stories live. Discover now