Como si nunca nos hubiésemos conocido

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Las clases comenzaban en el instituto Howl High luego de una de las vacaciones de verano más ajetreadas en años. Entre el grupo de estudiantes de primer curso que ingresaban nerviosos y expectantes por aquellas puertas dobles, se encontraba un aproximado de veinte jóvenes lobos que acababan de despertar. Como no se veía en años producto del mestizaje en la ciudad, los lobos jóvenes habían comenzado a tomarse las calles de forma alarmante aquellos meses, tanto que grupos de fanáticos del misterio habían pasado sus vacaciones rondando por el lugar a la espera de ver a una de las criaturas que se decía rondaban por el lugar. Por ello los padres habían tomado sus precauciones y los jóvenes habían pasado sus primeros meses como lobos en la manada Red Tusk. Ahora, con el inicio de clases, se les había dado permiso para formar sus propios grupos, lo que no hacia muy feliz al joven de rojizos cabellos alborotados que esperaba de pie junto a la puerta. Su trabajo allí era identificar a los jóvenes lobos para dar luego la información a los alfas de su nueva manada; incluso pensarlo hacia que se le diera vuelta el estomago. 

El cuerpo de Matt se relajo un poco cuando los estudiantes ingresaron al instituto por fin. Este ultimo tiempo había sido horrible para el, ya que, al perder a su manada tras la muerte de un amigo, ser obligado a alejarse del que consideraba su alfa desde antes de su primera trasformación y pasar dos meses en cama por el ataque del hombre lobo, se había visto a sí mismo obligado a obedecer a quienes nunca pensó. Si bien el lobo tenia muchos más años de experiencia que los gemelos Halley, era cierto que el no era un alfa y por lo tanto, no tenia la facultad de formar su propia manada pero por sobre todo, Matt Herbst no habría sobrevivido más de una semana como un rogue, no, el no tenia la fuerza de voluntad de Jean ni la valentía de Vanessa, por lo que se había visto arrastrado por las decisiones de Violeta de quedarse en la ciudad para estudiar, uniéndose ambos a la manada Storm, dirigida por los Halley. Para el era como vivir con el enemigo. 

Matt suspiro por ultima vez antes de encaminarse dentro del edificio. Había contado un total de veinticinco lobeznos entre chicos y chicas de quince a dieciséis años. Dos de ellos eran nómadas de la anterior manada de Violeta que estudiaban aquí bajo la protección de Red Tusk. En total, veintitrés jóvenes listos para empezar una vida lejos del manto de sus padres. Decirle o no a los Halley no parecía una opción, tarde o temprano se darían cuenta de todo. Dentro del edificio los estudiantes nuevos iban de un lado a otro con sus guías asignados mientras Matt intentaba llegar hasta el salón de Lenguaje de tercero atravesando el tumulto evitando en contacto con los miembros de su actual manada.

-Pensé que nunca lo lograría, pero no sem hakót -dijo Violeta desde su asiento mientras jugueteaba con la falda de blanca floreada que llevaba puesta. En su negro cabello hasta los hombros había varias trenzas amarradas con metal delgado y pequeñas piedras de colores, el estilo único de los nómadas la hacia ver bastante singular, pero era por sobretodo su forma de hablar la que preocupaba aun a la chica de ojos lilas.  

-Yo diría que aun te cuesta bastante, sem es ser, y hakót, es difícil -modulo Matt para la joven junto a el. La chica gruño despacio a modo de broma, anotando las palabras dichas por su pareja en su libreta de notas.

-Pa inuha(Tu Sabes)... -Violeta suspiro, mirando a los estudiantes a su alrededor para luego hablar- ¿Pa inuha kal jarák(Tu sabes que ocurre)?

-Haa, Na inuha(Si, lo sé) -en el ambiente se sentía la pesada presencia del beta de los Halley, Robert, quien actuaba como el lacayo de Thomas y su hermana; su contextura era gruesa como buen jugador de fútbol americano y su expresión era facial era de enfado constante, lo que le hacia ver más como un matón que como un beta.

-¿Kal sem(Qué es)? -la sonrisa inocente pero curiosa de Violeta logro que el mismo Matt sonriera en medio de su estresante situación, negando mientras continuaba escribiendo lo que decía el profesor.

Lazos Eternos [Terminada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora