Amnesia《 Libro 01 》H.S

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Es viernes por la mañana, es un día más en mi rutinaria vida para nada interesante o espectacular. Despierto abriendo los ojos abruptamente gracias al sonido de la alarma que suena justamente a mi lado derecho sobre la mesita de noche. Observo la hora con los ojos entrecerrados a causa del sueño embriagador que aún está latente en mi cuerpo, el aparato marca las siete de la mañana en punto, con una pequeña sonrisa somnolienta en el rostro me permito soltar un gran bostezo y realizar el primer estiramiento del día. Empujo mis extremidades superiores hacia arriba disfrutando el exquisito tirón que mis músculos realizan y del sonido de algunos huesos tronando con naturalidad. Pero hay algo que mi cuerpo entero no pasa desapercibido, en cuanto bajo mis brazos y mis piernas vuelven a recogerse siento el frío latente del otro lado de la cama.

Él no está aquí, no está a mi lado con los risos pegándosele al rostro, ni con la boca entre abierta dejando salir pequeños sonidos adorables. No están sus manos sobre mi cuerpo, ni su respiración en mi cuello. Ha sido así desde hace muchísimo. He dormido completamente sola sin el calor de su cuerpo a mi lado desde hace más de tres meses, desde que la gira comenzó.

Recojo mi cuerpo llevándome a mi lado de la cama, aquel que aún conserva el calor, me quedo mirando el lado izquierdo donde Harry normalmente duerme y me lo imagino ahí, casi puedo sentirlo, casi...Cierro los ojos un momento disfrutando de la sensación y cuando los vuelvo a abrir me topo con la soledad de su presencia. Sin querer pensar más en absolutamente nada que no sean las actividades de mi día, quito las mantas de mi cuerpo lanzándolas hacia los pies antes de ponerme de pie sintiendo el frio del ambiente en mis extremidades desnudas y en las plantas de mis pies. Mientras me levanto de la cama repaso con la mirada nuestra habitación, la cual está plagada de fotografías nuestras, casi quince cuadros con momentos capturados abarcan las cuatro paredes de nuestro rincón de amor. Pero entre todas ellas hay una que siempre será mi favorita, la cual reposa justamente arriba de nuestra cama; Es una fotografía que nos tomó Danny mi hermano mayor un día cualquiera, en la foto solo se nos ve dándonos un beso, Harry desde arriba y yo tendida sobre sus rodillas con la cabeza lanzada hacia atrás, ambos con sonrisas en medio de nuestro beso, ambos viéndonos a los ojos. Suelto un suspiro melancólico y me encamino rápidamente al cuarto de baño.

Hace más de tres meses que Harry partió en un nuevo Tour con su banda. El último disco que One Direction lanzó hace unos meses atrás fue todo un éxito, uno que era claramente evidente y que también ayudo el tan ansiado "1DDAY" que organizaron un día aquí en casa a eso de las dos de la madrugada mientras veíamos una película. Midnight Memories fue un éxito desde el principio incluso cuando el disco ni siquiera estaba acabado y lanzaron una canción de aceptación/ prueba. Yo misma había escuchado todas y cada una de las canciones antes de que el disco saliera a la luz y estaba completamente enamorada de todas ellas. Cada una de las letras demostraba un sentimiento, un amor fallido, una aventura. A pesar de que estaba feliz por los chicos sabía claramente cual era la consecuencia de lanzar un nuevo disco; Una nueva gira, una que claramente sería la más grande de su carrera. Está vez la gira los llevaría por toda Latinoamérica alejándome mucho más de Harry. Pero yo lo entendía, claro que lo hacía. Es la carrera que él eligió, es lo que el ama y lo que quiere seguir haciendo por muchos años más, es su trabajo y su más grande felicidad. Y como su novia debía apoyarlo y estar siempre para él cuando más me necesite.

Mientras el agua prácticamente fría de la ducha cae sobre mi cuerpo jabonoso pienso en la última vez que estuvimos Harry y yo sin interrupciones, sin molestas llamadas telefónicas, sin fans ensordecedoras, cuando fue la última vez que salimos a la calle sin que un paparazi nos siguiera y tomara fotos que luego se venderían a alguna revista de chismes barata. Porque para nadie era un secreto que las fotos de Harry eran las fotos mejores pagadas por las revistas locales e internacionales. Pienso, mientras quito el shampoo de mi cabello que ha pasado tanto tiempo desde eso, desde que fuimos solamente los dos. Aunque desde el día que acepté ser su novia yo sabía a lo que me enfrentaría si él se hacía famoso, no, más famoso de lo que ya era en ese momento. Y eso fue exactamente lo que pasó. Lo que estamos viviendo.