©Eres Mi Salvación.

Capítulo 9

—Buen tiro Mellark —dijo el entrenador luego de que Peeta metiera el balón en la porteria. Los Martes y los Jueves, eran día de entrenamiento para el equipo de futbol y futbol americano del instituto.

Peeta asintio ante el comentario del entrenador y continuo con los ejercicios de rutina del entrenamiento. Se detuvo y se quito el sudor de la frente, causado por el calor, no muy lejos el chico logro escuchar cuchicheos y risillas nerviosas, volteo y se percato de que el grupo oficial de animadoras de la escuela llegaba, para hacer sus rutinas de siempre, la capitana del grupo era nada más y nada menos que la voluptuosa de Delly, que le sonreía y lo evaluaba con la mirada.

Eso era una de las cosas que Peeta tenia que soportar en cada sesión de entrenamiento, a Delly y su grupo de animadoras alborotadas. Incluso llegaba a creer que la rubía solo se había ofrecido a estar en el grupo de animadoras, para observarlo mientras él entrenaba.

Delly le sonrio y el le devolvio la sonrisa.

Finnick llego y le dio un empujon.

—No te quedes quieto, sigue con la rutina del entrenamiento o el entrenador te llamara la atención.

Peeta hizo caso y volvio a los ejercicios, luego de un rato el entrenador dio por finalizado la jornada deportiva y mando al equipo de futbol a las regaderas.

Peeta se ducho y se quito el sudado uniforme deportivo y se puso una playera blanca, un pantalón y unos tenis comodos, su cabello lo dejo alborotado y humedo. Al salir de las regaderas se topo con Finnick.

—¿Nos vamos? —le pregunto, Peeta afirmo con la cabeza y ambos chicos fuerón charlando sobre futbol, una cosa llevo a otra hasta que Delly salio a relucir en la conversación.

—¿Has pensado en darle una oportunidad a Delly?

Peeta no se había detenido ha pensar mucho en ello, incluso creía que Delly tarde o temprano se olvidaria de él, sin embargo eso aun no sucedia y ella parecia no querer darse por vencida.

—No lo se —dijo. —No es mi tipo.

—Llevas diciendo eso desde la secundaria, a cada chica. No has tenido ninguna relación formal en tu vida.

—¿Solo por eso debo salir con Delly, por apariencias?

—Tomalo como quieras, pero no hablo de que le pidas matrimonio, solo que se den una oportunidad, y si funciona, pues bien y si no... pues hay muchas otras.

Peeta lo medito, quiza su amigo tuviese razón, Delly podria ser un buen partido. Una buena novia, a pesar de que le causase escalofrios cada vez que ella lo tocaba ¿Sera esa atracción? O ¿Solo miedo a Delly?  Se cuestino a si mismo.

—Lo pensare —fue lo unico que dijo. Finnick le dio una palmada en la espalda y se separo de Peeta.

Por más que quería, no podia visualizarse con Delly, simplemente no podía, en cambio cuando se imagino a Katniss, todo lo visualizo perfectamente.

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Los Martes era el unico día en el que Katniss no tenía Literatura, asi que por ende, no tuvo que toparse con Peeta.

A Annie, se la topo un par de veces con su grupo de rebeldes amigas.

Su madre no estaba en casa, algo que era ya algo muy normal y sin importancia. Katniss se había acostumbrado a la soledad.

El día anterior cuando había encendido su movil, en su bandeja de mensajes había 11 mensajes no leeídos y 32 llamadas perdidas, que no había revisado, pero como no tenía nada que realizar, se dispuso a verlo.