Capitulo 46 - Tres de Julio

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¿Que había dicho? No estaba segura, solamente sabía que había dicho algo que no debí.

Pero yo no tenía la culpa, solamente dije la verdad.

Bueno... le agregé un poco de "intensidad" a las palabras referentes a Gale.

Es que, ¿él para que saca esos temas a relucir? El asunto de Gale no tenía espacio ni coherencia en esa situación; la habíamos estado pasando tan bien ese día, y Justin lo tuvo que arruinar con su curiosidad sin explicación.

No, no era mi culpa; no podía atormentarme con eso.

- ¿Qué es lo mas loco que haz hecho, Ely? - preguntó de repente, justo en el instante en que el semáforo cambió de rojo a verde. ¿Bipolaridad? Ese termino era casi "ofensivo" para Justin Bieber... Bipolares eran tan solo sus uñas; todo el debía de tener un termino diferente y mucho mas elevado.

- Inhalar helio. - bromeé, recargando el codo en el bracero de la puerta. El hizo un pequeño mohin, y sonrió de oreja a oreja.

- ¿Confías en mi?

- No. - contesté inmediatamente, tanto que el me volteó a ver extrañado. - ¿Qué? ¿Te tengo que recordar todo lo que he pasado por tu culpa?

- No han sido tantas cosas Ely, no exageres... - dijo disminuyendo su culpa. Yo lo miré asombrada; ¡Que cínico!

- ¿Que? - mascullé, - ¿Se te hace poco que tenga que fingir ser tu novia? ¿Quedarme en tu casa? ¿Asistir a la boda de tu hermana? - el hizo una mueca - ¡Ja! ¡Y eso es solo lo de hace dos días! ¿Que tal cuando gracias a ti nos quedamos a media carretera y tuvimos que dormir en un insípido motel? - el sonrió de oreja a oreja, recordando. - ¿O cuando me obligaste a subir a un estúpido juego en la feria de Nove que provocó que revolviera el guisado de mi tía Dinn con el espagueti de tía Guinna? - Justin soltó una carcajada sin quitarle la vista a la carretera.

- ¡Eso no fue mi culpa! - se excusó, riendo. - Tu me habías prometido que no me dejarías solo.

- Le tenías miedo a Pauly, eso era ridículo.

- No importa, una promesa es una promesa. - objetó el.

- Si, claro. ¿Recuerdas también cuando caí del muelle por ti culpa? - Justin explotó en risas, y yo tan solo estaba conteniendo una sonrisa. Se suponía que estaba enojada recordando todo eso; no podía sonreír. - ¡Ah Claro! Y antes de eso me habías aventado una malteada de platano sobre mi. ¡Que bello día! - exclamé con sarcasmo.

- Terminaste oliendo a atún con plátano.

- Claro... O también la desvelada esa noche que te enfermaste de catarro.

- Fuiste la mejor enfermera. - sonrió.

- Por supuesto que lo fui. - hablé resaltando lo obvio. - te quité la fiebre.

El auto se detuvo en otro semáforo en rojo; esperaba verdaderamente que estuviéramos yendo hacia su casa, y no a algún otro lado loco que fuera la segunda parte de la pista de hielo. No estaba de muchos ánimos como para aguantar otro reto ese día.

Nos quedamos en silencio otros minutos, minutos enteros en los que empecé a recordar todo lo que había ocurrido en ese ultimo mes. Un mes, de tres.

Tenía dos meses mas.

Suspiré, queriendo evitar el pensamiento del tiempo.

- ¿Sabes una cosa? Siempre recuerdo esa noche. - Habló Justin de repente. Giré la cabeza, y lo miré intrigada.

Una Escritora Sin Amor | JBМесто, где живут истории. Откройте их для себя