CAPÍTULO LXVI

26.1K 1.3K 796
                                    


Habían transcurrido varios días desde que Ariana regresó a su viejo Apartamento.

Podría decirse que el primer día fue el más duro de todos porque recordó la ilusión con la que Camila y ella lo habían comprado, el día que les entregaron los muebles, incluso el día que Liz le había confesado su amor en ese mismo living.

En un principio, cuando la verdad salió a la luz y Elizabeth la trató peor que si se tratara de una basura, tuvo como primer impulso correr y romperle la nariz a Camila.

Si alguien era culpable de todo ese maldito infierno que ahora podía sentir cómo la consumía en cada llama y torturaba de forma despiadada a su cuerpo, esa era su wifey.

Pero al menos para la Heredera de la Dinastía Textilera Grande&Co era imposible enfadarse con Camila. La amaba demasiado y en el fondo sabía que todo lo que hizo carecía de una sola pizca de malas intenciones.

Lo analizó una y otra vez y después de todo...Ella habría hecho lo mismo. No en vano mandó a Lauren a estamparse contra un muro.

Todo para que ese par fueran felices.

Y había valido la pena porque ahora lo eran.

Camila solamente había intentado devolverle el favor...Y debe reconocer que casi le resulta.

Excepto que olvidó un pequeño detalle, ese de incluirla dentro de los planes, de haberlo sabido...Ella no la habría cagado.

Claro que ella siempre supo que detrás de ese repentino cambio amoroso de Elizabeth hacia ella estaba la mano de Camila y Mamá Dinah, pero nunca se detuvo a preguntar por los detalles, quizás por simple comodidad, quizás porque prefería desconocerlos y así eximirse de cualquier acusación por ser cómplice.

Pero daba igual, Elizabeth era una idiota.

Una idiota y una arrogante a la que no pensaba rogarle ni gastar su valiosa saliva en explicarle una y otra vez que ella no había tenido nada que ver.

-Que se joda- Fue su respuesta mientras sostenía una copa de su tinto favorito, tendida en el sofá.

-¿Estás segura que podrás arreglártelas tú sola con la Empresa?- Preguntaba Camila algo preocupada, no solamente por dejar sola a Ariana con tanta responsabilidad sobre sus hombros, también le preocupaba verla así, tan decaída y bebiendo todas las noches.

-Completamente segura- Respondió sin titubear -Sabes que no me quedo sola, están Kellen y Chris, y cualquier cosa telefoneo a tu padre, además, estoy segura de que tu suegro andará rondando por ahí para cerciorarse que todo marche bien con sus intereses-

-¿Y tú?- Preguntó Camila con voz suave -¿Tú estarás bien?-

-Yo estaré bien, tener tanto trabajo me ayudará a despejar mi mente...Ahora deja de culparte por lo mismo, llevamos más de una semana discutiendo sobre esto. Incluso ayer Mamá Dinah se pasó por aquí y casi me rogó para que le permitiera prepararme la cena- Ariana sonrió de medio lado -Amo que cocine para mí, pero detesto que lo haga porque se siente culpable de que lo mío con Gillies no haya funcionado-

-¿Sabías que Liz se mudó con ella?-

La joven de ascendencia Italiana asintió. -El otro día le envié mensaje para avisarle que iría a recoger el resto de mis cosas al apartamento y me respondió que no era necesario que lo hiciera porque ella había decidido mudarse con Mamá Dinah. Esa misma noche el productor nos informó que la muy cobarde abandonó la obra. ¿Puedes creerlo? Renunció a tan sólo dos semanas de terminar la temporada-

-Quizás esté pasándola tan mal como tú...No la juzgues, mejor búscala e intenta obligarla a que sea menos obstinada y sólo sean felices-

-Mejor vete a tu casa, termina de empacar tus cosas y disfruta de la luna de miel junto a tu mujer, ambas se lo merecen- Le guiñó un ojo.

MISIÓN, VISIÓN, VALORES Y OBJETIVOS DE UNA EMPRESA NO CUMPLIDOS. (CAMREN)Where stories live. Discover now