34.- Maravilloso Desastre.

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- Nos cuentas todo mas tarde - sonríe Mariana.

- Y con lujo de detalles - le sigue Gaby.

- A lo mejor - río agarrando mi mochila - adiós mundanaaas.

Salgo del salón y Bryan pasa un brazo por mis hombros atrayéndome mas a el, me quita la mochila y la cuelga en su hombro.

- ¿Haz hablado hoy con Carlos? - pregunta Bryan caminando hacia la cafetería.

Al escuchar su nombre me estremezco, se que hice lo correcto al cortar esas ilusiones pero aun así me siento mal porque el estuvo para mi en mis días oscuros, el fue el único que se esforzó a pesar de que mandaba a todos a la mierda, me hizo sonreír y reír cuando lo único que quería era llorar y gritar y aunque cuando el se iba me volvía a sentir así el era esa pequeña luz que no me dejaba caer al precipicio.

- No, no he hablado con el.

- ¿Hace cuanto que no se ven?

Quiero decirle que desde que nos peleamos, pero eso es mentirle y yo no quiero hacer eso, no quiero empezar una relación a base de mentiras, prefiero que se entere ahora que después pero de alguien mas.

- Bueno pues...cuando pasó nuestro incidente el me hablaba todos los días para saber como estaba, siempre lo mandaba a la mierda pero el seguía insistiendo - sonrío al recordar - a veces iba a mi casa para sacarme o otras veces solo nos quedábamos en el parque hablando horas y horas - su cara al decirle que no sentía nada por el vuelve a mi mente - se comporto muy lindo.

Y yo rompí sus sentimientos, vaya amiga que soy.

- ¿Porque, se pelearon? - pregunto quitando esos pensamientos.

- No - responde enseguida - no lo se, a estado distante últimamente.

- A lo mejor esta nervioso por el partido, digo yo también lo estaría si jugara la semifinal.

Entramos a la cafetería y a pesar de que faltan como 10 minutos para que toque el timbre ya hay gente haciendo fila.

- Eso lo entendería si fuera otro jugador pero...¿de el? .

Me encojo de hombros - Es humano Bryan, todos sentimos nervios al hacer algo - voltea hacia mi - aunque lo hagamos bien.

Suspira - Si puede que sea eso - voltea hacia las vandejas - ¿que vas a querer?

- Yo puedo pagar mi comida Bryan....

- Eso ya lo se pero yo quiero hacerlo vale - sonríe.

- Conmigo se te va a vaciar la cuenta en comida - bromeo, el suelta una carcajada - si de por si tu comes mucho.

- No como tanto - se queja con una sonrisa.

- Y esta panza de que es - río picando su estomago.

El se retuerce ya que es bien sensible de él estomago, tiene muchas cosquillas.

- Es puro músculo - "sume" el estomago.

Pongo los ojos en blanco - Clarooo y yo soy rubia de ojo azul.

Niega con la cabeza aun con su sonrisa y pide la comida, nos vamos a sentar a una mesa o como Bryan dice "nuestra mesa", según el los chicos y las chicas siempre se sientan ahí desde que iniciaron preparatoria pero por mas que intente recordar jamas los había visto.

- ¿Como es posible que jamas nos hayas visto? - ríe Bryan.

- No lo se, a lo mejor antes no me importaba un grupo de homonados - sonrío con la mirada en la comida - aunque si es un poco raro que no nos hayamos topado en ningún lado, porque aunque estemos en diferentes salones mínimo nos tendríamos que haber visto una vez.

Bad Boy Good Lips💋Where stories live. Discover now