school bus texts ➳ h.s

tired

Atención: apartir de este capítulo colocaré "***" que significa que habrá lenguaje, referencias y acción sexual, no apto tanto para menores y así que si no les gusta, dejen de leer, están advertidas.

<Capítulo Narrado.>

Savannah.

Perezosamente me levanté de la cama, Harry me había dicho que estaba afuera y que le abriera. Me coloqué mis pantuflas y tomé un abrigo debido al poco frío que hacía. Bajé las escaleras para ir a la puerta. Una vez que ya estaba enfrente de ella la abrí, cuando vi a un Harry parado pegando su cabeza a la pared con los ojos cerrados y con olor a cigarro y alcohol, lo que quería decir que estaba ebrio, ya decía el porque de sus faltas ortográficas.

—¿Harry? —hablé, rápidamente el me miró y una sonrisa de sus labios escapó. —Dios mío, Harry, estas ebrio. —lo tomé de la mano e hice que pasará, él no dijo nada y sólo me miraba, preocupada coloqué su mano sobre mi hombro para que pudiera equilibrarse mejor ya qué el no estaba bien del todo y silenciosamente subimos las escaleras y lo llevé a mi habitación, con mi pie, hice que la puerta se cerrará y la coloqué bajo llave, para luego recostarlo en la cama y sentarme juntó a él.

—Perdóname. —fue lo único que dijo. —No debí venir aquí en este estado, soy un idiota. 

—No Harry, no lo eres. —pausé. —Y está bien, no tienes porque preocuparte. —coloqué mi mano en su cabello y empecé a acariciarlo. —¿Por qué te embriagaste? —pregunté curiosa, necesitaba saber un poco más.

—Me fui con unos amigos a un bar, pero no sabía que iba a terminar así, perdóname ¿Si? —se levantó y se colocó enfrente de mi haciendo que la luz de la luna por la ventana entrará y se posará en los ojos de Harry, haciéndolos brillar frente a mi, miró mis labios y se acercó hacia mi para besarlos.

—Harry... —hablé entre sus labios.

—Shh, bebé. —dijo para de nuevo posar sus labios con los mios, pudé sentir un el sabor al alcohol y cigarrillos en su boca, aunque él olor a cigarrillo me desagradará en sus labios hacia que de una u otra forma me encantará, seguimos así por unos minutos hasta que por falta de respiración nos separamos, él aún seguía mirándome y le sonreí.

—Así que una fiesta, eh. —finalmente rompí el silencio y lo golpeé suavemente.

—No hice nada malo, lo juro. —dijo y se acercó besando alrededor de mi cuello y dejándome llevar por la sensación que sentía, un gemido se escapó de mis labios. Escuché una risita burlona por parte de él y si se propusó que podría hacerme sentir bien, lo estaba logrando.

***

Se separó y se levantó de la cama y colocándose frente a mi una vez más besó mis labios, el sonido de ellos era lo único que se escuchaba por toda la habitación. Jalé de su cabello para acostarme y aún seguir en contacto con sus labios así él me siguiera y se colará en la cama sobre mi. Empezó a bajar y dar besos por todo mi cuello, mordí mi labio para evitar gemir y así sentir el placer en silencio, sentí sus labios sobre mi panza y empezo a dejar pequeños besos sobre él.

—Um, bebé. —susurró y se sentó para poder desabrocharse sus pantalones y hacer notar su erección por medio de su bóxer, cuando sin darme cuenta él ya estaba desnudo frente a mi. Quitó mi short el cual usaba de pijama y luego de que lo hizo empezó a deslizar mis bragas y quitarlas. Agradecía internamente que justo hoy me había depilado si no este momento sería muy vergonzoso. Tomó la sábana para cubrirnos y de una vez colocó su miembro en mi entrada para rápidamente meterse dentro de mí, lo cual me hizo sollozar de dolor, pero a medida de que él iba moviéndose, al sentir sus embestidas el dolor desapareció. Luego de unos minutos finalmente había alcanzado el orgasmo, segundos después sentí un líquido caliente invadir mi zona.

Aún con la respiración agitada Harry salió de mi, y se colocó al otro lado de la cama. Me sentía débil y lo único que quería hacer era dormir, no pensé que sería tan cansado. Sentí unos brazos colocarse sobre mi y de alguna forma me hacían sentir segura.

—Te quiero. —besó mis mejillas y luego suspiró sobre mi hombro, qué fue lo único que necesitaba escuchar para después caer en un profundo sueño.