Prólogo

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Kennedy

La castaña mantiene su vista fija en el portátil que mantiene sobre sus piernas cruzadas.

Ver una película de Crepúsculo es el mejor plan que ella y su amiga Ivy podrían hacer un sábado por la noche, mientras que los padres de la castaña están fuera.

Noche de chicas.

De un momento a otro, la pelirroja que está a su lado, pega un grito; no se sabe bien si de euforia, terror u alegría. La cuestión es que gracias a la acción de su alocada amiga, el cuenco de palomitas sale volando, directo hacia el pelo de la castaña.

—Ivy, ya va el segundo cuenco de palomitas en la noche, ¿podrías contarme qué demonios ocurre?—La castaña suspira mientras se levanta, yendo a la cocina, para preparar más palomitas.

La pelirroja de ojos azules, mantiene una sonrisa plasmada en su rostro mientras que teclea sin parar su iPhone.

«Lleva toda la noche manteniendo su vista en esa cosa.» Pensó la castaña, al mismo tiempo que rodaba los ojos.

La pelirroja va a paso torpe hacia su amiga, manteniendo apretado su móvil contra su pecho.

—¡Adivina...!—Incita Ivy, con emoción en su rostro.

La castaña suspira. Sabe que su amiga nunca cambiará, siempre será tan alocada y precipitada como un guepardo.

—Déjame pensar...—La castaña toca con su dedo índice su barbilla—Nathan te ha invitado a cenar.—Apunta a su amiga.

La pelirroja niega, conteniendo la emoción dentro de su cuerpo. La sorpresa que le está a punto de dar de seguro no se la esperará. Será la mejor noticia que le habrán dado en su vida.

—Ojalá...—Ivy suspira-Prueba de nuevo.—Da un pequeño saltito en su sitio, tal cual niña de cinco años.

En ese mismo momento, el microondas avisa a la castaña de que sus nuevas palomitas están listas. Abriendo el aparato, la saca de ahí, para luego abrir la bolsa y echarlas en un cuenco.

—Me rindo.—La castaña se sienta en el sofá, llevándose una palomita a la boca mientras da a la tecla "espacio" para poner play a la película.

Su amiga la mira decepcionada, imitando su acción para bufar, mirándola.

—Kennedy, eres el aburrimiento en persona.—Espeta la pelirroja.

—Perdón por querer contentrarme en el buenísimo actor Taylor Lautner.—Kennedy rueda los ojos, volviendo su vista hacia el ordenador.

La amiga pelirroja se prepara mentalmente para la espectacular noticia que vendrá a continuación. Dará lugar a gritos, saltitos, vueltas bailando alrededor se la sala y más.

—¿Lista?—La castaña asiente, fijando su vista en ella—¡Tengo entradas para el Purpose World Tour!—Chilla la pelirroja, saltando en el sofá de emoción.

La castaña se mantiene inmóvil. No es capaz ni siquiera de comer una sola palomita o centrarse en los bíceps de su queridísimo Taylor Lautner. La noticia de su alocada amiga la ha dejado anonada.

Pasan los segundos, y la castaña sigue sin reaccionar.
Preocupada, su amiga le tambalea un poco el hombro, intentando llamar su atención.

—¿Y bien?—Pregunta la pelirroja, ansiosa.

—Ivy... Ya sabes que odio a ese ídolo tuyo al que llamas Justin Bieber. Su música me da arcadas, por no hablar de que ha estado metido en prisión, ¿a eso le llamas tu un ejemplo a seguir?—Pregunta indiferente la castaña, rodando los ojos.

Su amiga Ivy desde que tiene memoria, ha estado obsesionada desde que tenían 15 años con ese idiota de Justin Bieber, y ahora tienen 19. A Kennedy siempre le pareció inapropiada la actitud de ese chico; haciendo lo que quiere cuando quiere, sin tener ningún tipo de educación. Sin duda la castaña, rápidamente niega a su amiga. Odia la idea de saber que la pelirroja le obligará a ir con ella.

—Es inútil que te niegues. Tus padres me dijeron que no volverán hasta dentro de una semana, y quieren que esté pegada a ti, así que...—La pelirroja extiende una sonrisa maliciosa en su rostro, sabiendo que ha ganado la batalla frente a su testaruda amiga.

Los padres de Kennedy siempre fueron muy sobre protectores con ella. Siempre quieren que tenga algún tipo de seguridad o compañía para ella. Les mataría el hecho de que algún día a su pequeña -aunque no tan pequeña niña de 19 años- le ocurriera algo.

La castaña, sabiendo que no tiene más remedio, frente a la actitud de sus padres, hunde la cabeza en el cojín más cercano se encuentra, para soltar un gruñido de desaprobación, aunque sepa que no sirve de nada.

Lo que hace que la pelirroja, se eche a reír a carcajadas, por la actitud de su amiga, en el sofá.

***

Hola!👋 Espero que os guste esta nueva idea. Me surgió de un día para otro y no me pude resistir a la tentación de escribirla💟

Esperó que os gusten los capítulos, serán algo cortos, aunque no si serán como el prólogo.😕

Buen fin de semana😊😚

Different | JarianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora