07. Ese Es El Punto

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Bonnie había pasado tiempo con Luke, y de vez en cuando la llevaba a casa y uno de esos días le ofreció llevarla pero ella dijo que iría a la casa de una de sus amigas, posiblemente había rechazado su propuesta porque Rayden estaba dentro del auto...

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Bonnie había pasado tiempo con Luke, y de vez en cuando la llevaba a casa y uno de esos días le ofreció llevarla pero ella dijo que iría a la casa de una de sus amigas, posiblemente había rechazado su propuesta porque Rayden estaba dentro del auto hablando con Michael pero Luke no lo creyó posible, Bonnie no parecía ser de esa forma.

Aquel día Rayden no había sido parte de los planes que tenían porque ellos solo irían a la casa de Luke a hacer absolutamente nada pero no la salvo de la visita nocturna de Luke.

―Hola. ―Le dijo cuando lo vio, parecía sorprendida.

―¿Estás ocupada?

―Algo así.

―No importa. Michael me pidió que te diera esto. ―Le extendió una manta doblada y ella asintió tomándola.

―¿No ira a la escuela mañana? ―Luke levantó los hombros.

―Solo la aventó por la ventana del auto y dijo "De camino a casa pasa a dejarla con Rayden". ―Rayden se rio.

―Le dije que la quería de regreso pero no tenía que molestarte con esto, lo siento.

―No hay problema. Oye, también quería agradecer, creo que la información que has dejado sobre la mesa de vez en cuando está siendo de ayuda con Bonnie ―Rayden pasó el peso de su cuerpo de una pierna a la otra.

―Bueno, realmente no es nada pero si te sirve entonces está bien.

―¿Rayden? ―La voz venía del interior de la casa.

―Oh, es mi papá. ―Miró atrás y luego a Luke de nuevo ―Debería entrar. Gracias Luke, descansa.

―Nos vemos mañana ―Le dijo comenzando a caminar a su auto.


Al siguiente día Luke caminaba en los pasillos y Rayden con pasos largos lo logró alcanzar.

―Tú no tienes clase ahora ―Lo miró.

―Tú tampoco.

―Pero Bonnie sí y deberían estar entrenando, aunque no está aquí.

―¿Cómo lo sabes?

―Katie me lo dijo, es una buena fuente de información, sé su amigo. ―Giraron en un pasillo y Luke tenía a Rayden a su lado por un segundo y al otro la vio en el piso.

―Lo lamento, en serio lo lamento, no los vi y... ―Rayden se sentó siseando. Luke se inclinó rápido para ayudarle a levantarse, más rápido de lo que el chico lo hizo y entonces sintiéndose un tanto inútil solo mirando, recogió el libro de Rayden.

―Lo tengo, Zac.―Luke le dijo al chico extendiendo la mano para sujetar el libro mientras que Rayden terminaba de incorporarse.

―No fue mi intención, lo juro.

―Ya lo sé, está bien. ―Se sacudió y miró al chico solo un momento―. Está bien ―repitió antes de seguir con su camino, Luke la siguió hasta que llegaron a las gradas y se sentaron es silencio.

―¿Estás bien?

―Sí. Bien, ¿recuerdas que te dije qué tenías que hacer algo espectacular y que llamara la atención? Supongo que hacerlo en algún partido no estaría mal, imagino que puedes organizar algo. Michael dijo que el entrenador era algo flexible con ustedes de vez en cuando.

―¿No te parece demasiado?

―Bueno, ese es el punto.

―¿Cómo comenzaste a salir con Michael? ―Rayden frunció el ceño sin apartar la mirada de él, parecía profundamente confundida y Luke se mordisqueó la mejilla pensando en que quizás había metido en problemas a Michael o algo así, pensó que Rayden se sentiría mal porque su novio no le hablaba de ella a su mejor amigo―. Yo nunca se lo he preguntado ―confesó y entonces Rayden asintió despacio y soltó una risa ligera.

―Estaba en el salón de Filosofía esperando al profesor, había bastantes lugares libres pero él se sentó conmigo y comenzó a hablar. Yo no soy tan buena para hablar con personas que recién conozco, a veces no sé que preguntar o eso pero él llevaba las riendas de la conversación, siempre sabia que decir para que yo siguiera hablando. Unas clases después nos encontrábamos en la cafetería, luego pasaba por mí para venir y me llevaba de regreso a casa, después salíamos a tontear por ahí y...―Lo miró y pareció reflexionar sobre algo para finalmente reír de nuevo y levantar los hombros―. Así fue todo, muy fácil.

―Un poco, sí ―Asintió dándole la razón―. Ahora que lo veo así, fue muy tonto pedirles consejos cuando no tuvieron que hacer nada escandaloso entre ustedes.

―Lo fue, pero ve películas ochenteras, debo admitir que algunas son bastante buenas.

―De acuerdo.

―Hasta luego.

―¿Te vas?

―Buscaré a Arantxa. ―Se detuvo a mitad de las escaleras― ¿Quieres venir?

 ―Se detuvo a mitad de las escaleras― ¿Quieres venir?

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