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Lauren Pov.

Me arroje al vacío intentando matarme, pero no sucedió... No puedo morir... Maldita sea.

Subí mi mirada y todas ellas me veían desde arriba, no podía creer que las atacara, estuve por matar a Troy.

Tenemos cosas que hacer querida Lauren...

Aparte mi vista de ellas y gruñi, comenze a escalar por las piedras, podía oír en mi mente las voces de ellas llamándome, pero ya no podía obedecerlas, la sed de venganza invadía mi cuerpo.

Llegue a la cima y comenze a correr en dirección al pequeño pueblo, no sabia a donde iba pero mis piernas se movían solas.

Al estar a unos centímetros del pequeño bosque me de tuve, podía ver a unos cuantos niños jugando a las atrapadas, otros estaban platicando y una camioneta se estacionó.

Ahí están dos de los cuales te han echó sufrir... ¿Dejaras que sigan vivos y lastimen a más niñas como a tu hermana?

Gruñi viendo como los dos hombres bajaban de la camioneta a una chica, se veía demacrada, podía ver que era de la misma edad que Sofia o Taylor.

Vamos Lauren... Sabes lo que quieres, todo tu cuerpo te lo pide...

Lo siguiente que supe es estar de nuevo en mi cuerpo, humana y completamente desnuda, podía escuchar la voz en mi cabeza que me incitaba a matar a querer venganza y por más que quería ignorarlo no podía.

Camine por aquella calle ganandome la mirada de mucha gente, ni siquiera me importaba que me miraran, sabia a donde tenia que ir. Entre en aquella casa y camine escuchando las voces de esos hombres y los pequeños grititos de la niña.

-Hola chicos-. Dije y mi voz era más gruesa.

-¡Wow!¿Que tenemos aquí nena?-. Dijo uno de ellos.

-Solo busco diversión-. Dije dándole una sonrisa de lado.

-Pues aquí encontrarás mucha diversión nena-. Dijo el hombre acercándose a mi.

Sus manos tocaron mi hombro desnudo, beso mi cuello y gruñi por dejar que me tocara, mirando por encima de su hombro vi al otro hombre bajándose el pantalón mostrando su miseria.

Mis ojos miraron a la chica que estaba escondida en una esquina, seguía sintiendo como me tocaba el cuerpo, mi mirada se dirigió al cuchillo que estaba en el suelo a lado de aquel sillón.

-¿Podemos ir al sillón cariño?-. Susurré con todo dulce.

El hombre asintió y lo dirigí al sillón junto al otro hombre, le hice una seña a la chica para que desapareciera y salió corriendo.

-¡¿Oye adonde vas?!-. Grito uno de ellos pero lo empuje.

-No hables cariño... Hay que divertirnos los tres-. Dije y ellos sonrieron.

Hazlos sufrir como ellos hicieron que tu sufrieras..

Lentamente baje mi mano para tome aquel cuchillo mientras esos cerdos me tocaban.

-¿Les gusta abusar de niñas cierto?-. Pregunte y ellos me miraron asustados.

-Es muy fácil abusar de una niña... ¿Quieren saber lo que se siente?-. Gruñi agarrando a uno por el cuello y al otro apuntándole con el cuchillo.

-Son unos asquerosos pero a ustedes no les importa... Jugemos a un juego... Yo les pregunto acerca de donde esta Brad y sus amigos y yo pensare en dejarlos vivos-. Dije sonriente.

-¡No te diremos nada maldita perra!-. Dijo uno de ellos.

-Esa no es una respuesta que quería oír-. Dije golpeándolo.

-¿En que estaba?... Así... ¿Donde esta Brad?-. Dije sonriendo.

-Esta... Esta en Londres... Por favor no me mates-. Dijo el otro llorando, que patético.

-¡Maldita perra!-. Me escupió el otro al cual había golpeado.

-¿Perra?... Si yo creo que si-. Dije pasando el cuchillo en mi otra mano.

-¡Ya te dijo lo que querías dejanos ir!-. Gruño de vuelta y negué con la cabeza.

-No... Hay que divertirnos-. Dije enterrando el cuchillo en su muslo.

El hombre grito y Sonreí, el otro intento correr pero lo tome del cuello golpeándolo.

El otro resto de atacarme pero fue muy lento, lo tome por el cuello y lo arroje hacia la pared haciendo que chocara su cabeza.

-¿Muy divertido no crees?-. Le dije al otro que me vía con terror.

Me acerque a el mientras enterraba el cuchillo en su pierna, sus gritos eran como de una nena. Después pose el cuchillo enterrándolo en su corazón.

***

Terminé de ponerme la ropa que les había quitado, tome el cuchillo y lo puse detrás de mi espalda.

Tome las llaves que había en el suelo, mire por última vez los cuerpos sin vida de esos hombres.

Sali de aquella casa con una sonrisa en mi rostro, subí al auto y lo prendi.

Me mire por el retrovisor y tenia un poco de sangre en mi labio, lo quite y vi mis ojos... Eran de color blanco con un pequeño punto blanco, tome los lentes que estaban en el asiento y sonrei a alejándome de ahí.

Noche Oscura (Camren Gip)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora