Noche Oscura (Camren Gip)

-7-

Lauren Pov.

No podía seguir soportando que Camila me tratara así, sabia que iba a tomar mal las cosas pero nunca pensé que llegara a odiarme.

Yo no había sido feliz cuando los hombres tomaban mi cuerpo, ella no sabe lo que se sentía. ¿Pero llegar a odiarme por eso? Ya bastante tengo con odiarme a mi misma como para que ella también me odie.

Seguía mirando por la ventana, Camila hablaba con Ally acerca de algo, después Ally me apunto y ella me vio, antes sentía amor y cariño por Camila ahora solo sentía miedo.

Sus ojos me daban miedo, no se que es lo que estoy haciendo mal, tal vez no fue la manera de decirlo pero no sabia como.

Nadie te querra mi querida Lauren..

Eso me había dicho Brad la primera vez que abuso de mi, cerré los ojos aguantando las lágrimas que querían salir.

Él tenia razón, nadie me querrá, nadie lo hará nunca, quería irme y desaparecer. No podía ir en busca de mi familia sabiendo lo que me habían echo, mi madre no me aceptaría al saber que mi cuerpo fue tocado por varios hombres.

Su religión no se lo permitía y mucho menos decirle que un lobo se imprimió de mi, primero me diría que estaba loca, que los lobos no existen y en segunda no aceptaría a Camila.

Mirara a donde mirara estaba completamente sola, Dinah y las demás me trataban cómo si fuera un bebé al cual se tenia que proteger y no quería su lastima, no quería que me trataran como si fuera de cristal.

Pero el mayor dolor que sentía era ver como Camila me odiaba, sus ojos ya no me miraban con amor, ya no me miraban con ternura, esa ternura que me había echó enamorarme de ella.

Amaba a Camila más de lo que imaginaba, pero no podíamos estar juntas por dos razones, la primera era porque ella me odiaba y la segunda... La segunda era porque me habían dicho que no podía enamorarme de una mujer que eso estaba mal.

-Hola Lauren-. Dijo Dinah poniéndose a lado mio.

-Hola-. Dije sin mirarla.

-¿Quieres bajar a comer?-. Preguntó y solo asenti.

En la cocina estaban todos, hablando y riendo pero se callaron en cuanto me vieron, según Demi no saben como tratarme al saber lo que había pasado.

-¿Vas a comer aquí?-. Preguntó Camila con voz fría.

-Camila-. Dijo Ally golpeando su hombro.

-Si-. Dije tragando el nudo que se formo en mi garganta.

-Entonces me marcho-. Dijo pero hable antes de que se levantara.

-Me marcho yo, no tengo hambre-. Dije y me levante subiendo las escaleras.

Al llegar a la recamara me solté a llorar como una bebe, me acurruque en la esquina de esa habitación, ya no lo aguantaba, estaba tan cansada.

Esto no es vida Lauren, ya no lo soporto más... Te quiero..

Las ultimas palabras de Daniela volvieron a mi mente, después de ese día no la volví a ver, no sabia si estaba muerta o viva, pero siendo sincera esperó que no este viva y sufriendo con esos Malnacidos.

La noche llego demasiado pronto, Normani había venido a traerme comida, la cual no he tocado. Saque una pequeña mochila que había en esa habitación y metí la botella de agua que me había traído junto a una cobija.

Espere a que todos se durmieran, salí silenciosamente de la habitación y mirando para todos lados me aleje de ahí, estaba segura que nadie me escucho ya que duermen como troncos.

Al salir de la casa suspire, lágrimas brotaron de mis ojos pero las borre rápidamente, comenze a caminar por aquel bosque.

Tenia pensado llegar al pequeño pueblo y salir de aquí. ¿Adonde? La verdad no lose, pero ya estaba demasiado lastimada como para que Camila terminara matandome.

Después de una hora de caminata llegue al pequeño pueblo, con mochila en mano camine hasta donde estaba una mujer subiendo cosas a una camioneta.

Hable con la mujer y ella me dijo que se dirigía a la ciudad, le pregunte si podía llevarme y le enseñe el anillo que tenia, mi padre me lo había dado cuando había cumplido ocho años y era algo especial.

-¿Cree que con esto sea suficiente para que me lleve a la ciudad?-. Pregunte y solo di.

-Claro-. Dijo la mujer.

Me subí a la parte trasera de la camioneta, después la mujer y sus compañeros subieron, mire hacia el bosque donde quedaba la casa de aquellos lobos, me gustaba decirles lobos en vez de licántropos.

-Gracias por todo, fue lindo mientras duro-. Dije derramando lágrimas.

Me gire evitando mirar de nuevo, deje que mis lágrimas corrían por mis mejillas, no volvería a molestar a nadie. Yo no era nadie y jamás podría ser esa Lauren de antes.

Yo estaba muerta para todos desde este momento.