Capítulo 15 "Final"

Comenzar desde el principio
                                    

—No me comporte como idiota.

—Oh, por supuesto que no—su tono sarcástico sonó similar al de su hermano cuando lo escuchó discutir con Eren por una tontería. —Solamente decidiste tratar a mi hermano con la punta del pie dándole preocupaciones sin sentido por caprichos estúpidos, ¿ni siquiera una manzana pudiste tomar del fruto de la mesa? ¿En serio? Eres una inútil, ahora entiendo porque Eren se negó a que te incorporaran a la empresa como a Armin, te han tratado como si fueras de cristal por la estúpida creencia de que por ser mi alfa destinada ibas a tener la vida resuelta, ¿no?

Sasha apretó los puños y se puso de pie realmente fastidiada.

—No me vengas con eso, la princesa eres tú, omega.

— ¿Yo? Déjame contarte que tengo una hija y que no me he sentado a llorar en mi cama día y noche mientras me dan todo en la mano como seguramente tú has estado haciendo, he tenido que cuidarme bastante para que ella esté bien, estuve a nada de morir en el parto pero aun así a los quince días me levanté para verla a ella que también estaba enferma y no sabes el apoyo inmenso que ha sido mi hermano en este tiempo—Mikasa también estaba de pie, jamás había estado tan enfadada...bueno, tal vez cuando le había contado a Sasha la verdad sobre Levi.

— ¿Mi hija estuvo enferma y no me lo dijiste?

—MI hija ya está bien y no veo porque habría de contarte nada más.

Brauss intentó calmarse, tenía que convencer a su pareja y así todo volvería a la normalidad.

—Por favor...no vengo a pelear contigo, solo quiero hablar.

—Creo que ya hablaste suficiente—dijo tomando su bolso dispuesta a salir del lugar.

—Espera, espera—le suplicó deteniendo sus acciones. —Solo un poco más, creí que me extrañabas.

—En su momento lo hice—dijo intentando zafarse de su agarre.

—Vamos Mikasa, por favor...estamos destinadas, nos necesitamos.

—Separarnos fue doloroso...muy doloroso...pero ya no te necesito Sasha—dijo firme sorprendiendo a la castaña e incluso a sí misma. —Así que si me citaste aquí para decirme algo, dilo ya que tengo que irme.

Alfa y omega intercambiaron una mirada, la mayor jamás había visto la mirada de su pareja tan determinada, sintió sus piernas flaquear y el rencor en su pecho crecer.

— ¿Quieres saber quien denunció a Levi? Bien, fui yo—dijo molesta apretando más los puños. —Y si quieres que viva sin problemas hasta su cumpleaños entonces regresa conmigo, nos iremos lejos a donde ningún otro beta pueda interferir con nosotras.

Jaeger tragó saliva sintiendo su garganta seca, apretó la mandíbula y se mordió el labio.

— ¿Cómo pudiste?

—Fácil, les escuche hablando a él y a tu hermano sobre lo mucho que deseaban estar juntos...pues bien, que se mueran ambos y estarán felices, ¿o no? Porque supongo que ya hicieron el lazo.

—Eres una...estás loca si crees que voy a volver contigo después de lo que le hiciste a mi hermano.

—Entonces dame a mi hija, me iré con ella y te devuelvo a tu hermano.

—No—gritó llamando la atención de todos los presentes. — ¡Si alguna vez considere dejarte verla acabas de perder toda oportunidad! Encontraré otra manera de ayudar a mi familia—se colgó el bolso y dejo dinero sobre la mesa. —Si vuelves a buscarme o te acercas a mi hija...juro que te mataré—dijo firme dando media vuelta y salir con pasos enfurecidos.

Beta's testingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora