Capitulo 2

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Niall saca su libro y lo pone encima de la mesa.

El profesor empezó a explicar.

Profesor: Tal vez no se os haya ocurrido, chicos, que el sexo es más que un viaje de quince minutos al asiento trasero de un coche. Es ciencia. ¿Y qué es la ciencia?

- Aburrida. - Gritó un chico del fondo de la clase.

- La única clase que suspendo. - Dijo otro.

Los ojos del profesor rastrearon la primera fila, deteniéndose sobre mí.

Profesor: ¿Jane?

- El estudio de algo. - Dije.

Se acercó y golpeó el dedo índice sobre la mesa delante de mí.

Profesor: ¿Qué más?

 Jane: Conocimiento adquirido a través de la experimentación y la observación.  

Profesor: Con tus propias palabras.

Toqué mi labio superior con la punta de la lengua y busqué un sinónimo.

 Jane: La ciencia es una investigación. -Sonaba como una pregunta-

Profesor:La ciencia es una investigación. -Dijo el Entrenador, frotándose las manos-  La ciencia requiere que nos transformemos en espías.

Dicho así, la ciencia casi sonaba divertida. Pero había estado en clase del Entrenador lo suficiente como para no albergar esperanzas.

Profesor: Ser buenos sabuesos requiere practica. - Prosiguió.

- También el sexo. - Vino otro comentario del fondo de la sala.

Todos ahogamos la risa mientras el Entrenador apuntaba al ofensor con un dedo acusatorio.

Profesor: Eso no va a ser parte de los deberes de hoy.

Profesor: La reproducción humana puedes ser un asunto pegajoso...

-¡Agh! - Gruñó un coro de alumnos.

Profesor: Requiere manejarla con madurez. Y como toda ciencia, la mejor aproximación es aprender siendo sabuesos. Durante el resto de la clase, practicad esta técnica a base de averiguar tanto como podáis sobre vuestro nuevo compañero. Mañana, traed por escrito vuestros descubrimientos, y creedme, voy a revisar su autenticidad. Esto es Biología, no lengua, así que ni se os ocurra trabajar con la ficción en vuestras respuestas. Quiero ver intención de verdad y trabajo en equipo. - Había un "o si no" implícito-

Encontré el reloj en la pared y di golpecitos con mi lápiz a tiempo con el segundero. Plante mi codo en la mesa y apoye la barbilla sobre el puño. Solté un suspiro. Genial. A este ritmo iba a suspender.

Niall tenía los ojos clavados delante, pero oí el suave deslizamiento de su bolígrafo. Estaba escribiendo, y quería saber qué. Diez minutos de sentarnos juntos no lo cualificaba para asumir nada sobre mí. Lanzando una mirada de reojo, vi que en su papel había varias líneas, y creciendo.

- Que estas escribiendo? -Pregunte-

-Y habla. - Dijo mientras lo garabateaba, cada movimiento de su mano al mismo tiempo suave y descuidado.

Me incliné tan cerca de él como pude, intentando leer lo que había escrito, pero dobló el papel por la mitad ocultando la lista.

-¿Qué has escrito? - Exigí.

Estiró la mano hacia mi papel sin usar, deslizándolo a través de la mesa hacia él. Lo arrugó formando una bola. Antes de que pudiera protestar, lo lanzó a la papelera al lado del escritorio del profesor. El tiro entró de lleno. Me quedé mirando a la papelera un momento, dividida entre la incredulidad y el enfado. Después abrí mi libreta en una página en blanco.

El beso del angelWhere stories live. Discover now