Chica Mala

CAPÍTULO 18

DRAKE

Dios que asco me dan los pasteles de esa pastelería. Es especialita hasta para eso. Es especial en sí, pienso. ¿Pero de donde estas sacando este lado tuyo tan cursi Drake? Joder. Me llama Sthephen y me dice que vaya a verle al descampado de siempre. Solemos ir allí para fumar algo y relajarnos un poco. Es amigo mío desde los 11 años, vivía en Rusia, y a los 11 años se vino. Desde entonces somos amigos. A los 15 nos metimos los dos en este mundo. Joder qué tiempos aquellos. Voy llegando al descampado y veo el coche de Stephen en donde siempre. Pero veo algo raro, veo a alguien detrás de una tubo grande de metal, va armado y apunta a Stephen. Sin llamar la atención de ninguno de los dos. Aparco en la entrada y salgo del coche. Me cubro en la parte delantera del coche y sacó la pistola. Apunto a quien sea que este apuntado a mi amigo. Disparo y le doy en la mano con la que sostiene el arma. Grita. Reconozco que es voz de mujer. Esta sale de su escondite y sin que pueda reconocer quien es, se monta en un coche, que es ¿Cómo el de Juls? Casualidad, sí. Stephen corre hacía mi al levantarme y sobresaltado me dice:

-¿Pero qué cojones ha pasado tío?

-Te estaban apuntando maricona, joder estate más atento.

-Como pille al cabrón que era lo mato-rio y me mira con el ceño fruncido

-Colega, era una tía.-rio aún más ante su cara de asombro-no la habrás satisfecho en la cama tío.-me pega un puñetazo en el brazo y reímos.

La tarde con Stephen ha estado bien, relajada como siempre, después del incidente de la mujer. ¿Quién habrá podido ser? ¿Y por qué? Miro el reloj y son las diez de la noche, me apetece ver a Juls y a su hermoso cuerpo. Me despido de Stephen y conduzco hasta su apartamento. Tarda en abrirme, me fijó en sus manos, lleva guantes. ¿Qué cojones hace con guantes en pleno mayo? Cierra y sin decir nada pasa adentro de la casa y se tumba en el sofá.

-¿Qué haces con unos guantes?

-Tengo frío en las manos-frunzo el ceño y voy a la cocina a por algo de comer. No me creo que tenga los guantes por eso. Y para comer se los tendrá que quitar, entonces veré que cojones le pasa.

Veo que en la isla de la cocina siguen estando los donuts, ¿habrá estado todo el día fuera? Ignoro la pregunta y agarro la bolsa con los donuts. Tengo hambre pero por nada me comería esos jodidos donuts, abro un armario encima de la vitroceramica y visualizo al fondo un paquete de galletas. Listo. Voy hasta el salón y suelto la bolsa y el paquete sobre la mesa.

-Come-Joder he sonado demasiado posesivo. Para relajar el tono de vez tuerzo una pequeña sonrisa.

-No tengo hambre Drake. ¿Qué haces aquí?

-¿No querías verme?-me acerco y me tumbo sobre ella apoyado en el sofá para no dejar caer mi peso en ella. Aparta su mano derecha y la deja caer sobre el sofá.

-¿Qué te pasa?-No entiendo que le pasa, pero estoy preocupado por ella. Ahora mismo me estaría mandando a la mierda o algo pero ni se inmuta. Este silencio me mata. Me levanto de encima de ella y la agarro de las manos.- ¿Por qué cojones tienes puesto los putos guantes Juls?-Me mira y piensa como mentirme. Sé que me va a mentir.

-Te lo he dicho Drake, tengo frío joder.-se sienta y me mira.

-Aver, quítatelos.-si no le pasa nada le dara igual.

-¿Pero que cojones te pasa Drake? Dios, estas haciendo un mundo de todo esto. – se está alterado, bien. Esa es la Juls que a mi me gusta.

-El mundo lo estás haciendo tú de todo esto. No me creo que tengas frío y menos en las manos. Estamos en mayo-digo con toda la tranquilidad del mundo. Se levanta de un salto del sofá y anda hacía la cocina. Se ha cabreado. Pero antes de perder el total contacto con ella agarro su mano derecha y le quito el guante.

-Ains- Juls se queja y llevo mi vista hasta su mano. Tiene una herida en la mano derecha. Se me viene a la mente lo ocurrido esta mañana... disparé a una mujer en la mano... el coche se parecía al de Juls...

-¿Qué te ha pasado?-mi paciencia se está agotando. No ha podido ser Juls, no. Me repito una y otra vez en mi cabeza.

-Nada Drake.-veo en su mirada culpa, pero de qué. Si no me ha hecho nada. Me estoy cabreando demasiado.

-¿Fuiste tú?-debo ir al grano si quiero saber de una vez por todas la verdad.

-Drake, joder yo...-agacha la cabeza y en ese momento sé que ha sido ella. Ha abandonado su lado duro y salvaje para dejar lado a el miedo. ¿De qué? Me cabreo aún más. ¿Quién es ella realmente?

-Dios Juls, ¿pero que cojones haces?-me llevo las manos a la cabeza-¿Quién cojones eres realmente eh?- Alargó mis brazos para agarrarla de los hombros y en un movimiento se tapa la cara con los brazos ¿Piensa que la iba a pegar? –Juls joder ¿Quién eres?

-Drake te lo dije, no puedo, yo... yo...-Le doy un golpe a la pared y ella se sobresalta. Me mira piensa piensa y vuelve esa mirada. Ha vuelto.-¿Y tu? ¿Quién cojones eres tú? ¿Qué hacías con un puto mafioso? ¿Eres uno de ellos?-Grita, y grita. Mi paciencia se ha agotado. ¿Quién cojones es ella para saber que Stephen es mafioso? ¿Pero qué cojones sabe ella?

-¿Y tú? ¿Quién cojones eres tú? Dios Juls pensaba que... que valias la pena. A pesar de lo capulla que llegas a ser algunas veces joder.-Su paciencia se ha agotado, lo veo cuando va hacia la puerta y la abre.

-¡No, no valgo la pena! No lo ves, te dije que era complicado ¡joder! Te lo dije. Vete Drake... Vete.

-¿Pero quién eres realmente Juls?-necesito saberlo.

-¡Qué te vayas joder!-Le echó una última mirada en la que le estoy dando a entender lo cabreado que estoy. Y me marchó.