Give me Love ➳ ʸᵒᵒᶰᵐᶤᶰ

Poenia Blanca

El gritó de Yuuhyuk, nos saco de aquél momento, el pequeño estaba tirado en el suelo sujetándose la pierna y sin pensarlo dos veces corrimos preocupados por su bienestar.

Yoongi al momento que lo sostuvo entre sus brazos, su piel bajo unos tonos más pálidos y él ya era lo suficientemente blanco.

Yuu no dejaba de llorar por el dolor y su pierna se encontraba doblada. Yoongi no reaccionaba, estaba sumergido en sus pensamientos o pasmado en alguna especie de pánico.

—Yoongi, ¡Vamos! Debemos llevar a Yuu al hospital.- Lo había tomado de los hombros para agitarlo e intentar sacarlo de su trance.

Yuu, con el dolor latente se había desmayado y aun que deseaba que Yoongi se mantuviera tranquilo, fue demasiado difícil.

—¿P-Por qué, Yuu no está llorando?, ¡Yuu bebé! ¡No, mi niño! Yoongi intentaba reanimar al pequeño, pero este no tenía pinta de despertar.

—Yoongi ¿Dónde esta tú auto? dame las llaves, debemos ir al hospital.

—¿H-Hospital?, ¿Q-Qué? Mi bebé no esta mal ¿cierto? -soltó un sollozo.

—Debes calmarte, vamos, sube. Ahora escúchame bien.-Tome su mano para trasmitirle seguridad.- Tu hijo solo esta desmayado por el dolor de su pierna, nada malo le pasará... Además, tu pequeño es un chico fuerte, así que, mantén la calma.

Yoongi asintió y sorbió su nariz mientras se refregaba los ojitos.— A simple vista, se veía demasiado adorable. Fue entonces que en la parte trasera de su vehículo, se posicionó al lado de su hijo haciéndole mimos y susurrándole que lo amaba mucho.

Estacione el auto lo más cercano posible de las salas de urgencias, tome la manilla, para ayudar a bajar a yoongi con su hijo en sus brazos.

Una vez dentro del recinto, una enfermera rápidamente se acerco a nosotros preocupada.

—P-Puede ayudarme, mi pequeño se ha lastimado el pie.-Murmuró, pero de un momento a otro sus piernas flaquearon y la enfermera gritó que la ayudarán de inmediato. Se habían llevado tanto a Yoongi como Yuuhyuk dentro de una sala y a mi solo me toco esperar.

No pasaron ni diez minutos, cuando Yoongi, había aparecido nuevamente, pero esta vez con más color en su rostro y un vaso de agua.

— ¿Como te sientes? - Pregunté una vez que se sentó a mi lado, buscando mis manos para entrelazarlas y apoyarse en el hombro derecho.

— Mejor...- apenas musitó.— F-Fue una crisis de pánico - Observe nuestras manos y suspiré aún preocupado.

— ¿Quieres ir al baño? podrías refrescarte el rostro.

Yoongi asintió aun con la mirada perdida, él solo me seguía por la unión de nuestras manos. Pero a penas entramos al baño y estuvimos solos, se abalanzó contra mi cuerpo, rodeándome con sus brazos y dejando salir nuevamente un sollozo. Me sentía tan mal, así no debía haber comenzado lo que sea que tenemos, pero no se podía evitar... Solo me lastimaba verlo tan perdido. El mismo qué me había mencionado que no contuviera una sonrisa, el mismo que a pesar de estar muy cansado, le hablaba con ternura y amor a su hijo.

Fue entonces que me percaté que tendríamos que hablar demasiadas cosas, sanar otras y así.

Soltó el aire que creo que estuvo conteniendo un buen rato; dejo su rostro a la altura de mi cuello, no sin antes besar mi mejilla y abrazarme de vuelta.

Se sentía bien, abrazados sin decirnos nada, pero de alguna manera sintiendo tanto.

— Tenía mucho miedo.— Comenzó diciendo, sin soltarme siquiera un poco. Su aliento contra mis oídos provocó escalofríos. —No supe reaccionar, soy un mal padre, solo me quede ahí asustado.

— No, no. Yoongi, eres un excelente padre, haz cuidado a Yuuhyuk por tanto tiempo. Solo hay días que nos pillan volando bajo y caen, pero no te culpes, son cosas que deben suceder.

Le sonreí enternecido, ayudándolo a refregarse la cara sin dejar de acariciar levemente su espalda, sonó su nariz, mientras le quitaba unas cuantas lagrimas pequeñas que deseaban salir de sus bonitos ojos.

Yoongi me observaba en silencio mientras hacia aquel gesto, el se acercó cortando la poca distancia que nos separaba y me besó. No fue uno de esos largos y empalagosos, solo fue un roce muy corto.

Nuestras miradas se volvieron a encontrar, pero no le tomamos un mayor peso a esa acción, solo nos encaminamos a la salida del baño y seguimos esperando en la sala.

Las horas pasaron y Yuu ya estaba enyesado con una paletita en la boca, por que "Es un niño muy valiente, y ha sido como un superhéroe" decía el doctor quién le revolvía los cabellos al pequeñín, el cual, no parecía tomar mucha atención por estar disfrutando de su paletita.

—YuuHyuk, necesitará reposo durante 1 semana, luego de eso podrá regresar a clases con el yeso y con la ayuda de muletas. Eso si, no podrá participar en la clases de educación física o actividades que requieran demasiado movimiento. Al menos, no por este mes.

Yoongi asintió y buscó en la mochilita de Yuu una libreta y comenzaba a anotar las indicaciones del doctor.  

—Los anti-inflamatorios debe consumirlos cada ocho horas, durante 1 semana y luego del mes, si los resultados de sus exámenes se ven bien, entonces comenzaremos los ejercicios con el kinesiólogo .

—¿Algo más doctor? Yoongi se había acomodado para anotar mejor en la libreta cada paso de la recuperación de Yuuhyuk. 

—No, nada más que acotar sobre el paciente, solo debe pasar dónde la enfermera y retirar los medicamentos prescritos e indicarle a la secretaria su correo para enviarles los gastos que se efectuaron en el procedimiento.

— Está bien, muchas gracias por todo. Yuu, despídete del Doctor.

— ¡Gracias Doctor, ahora mi pierna no duele! — Todo gracias a los analgésicos que corrían por su sangre, esperaba que posteriormente no fuera una recuperación dolorosa para su hijo.

Luego de todo el papeleo con la secretaria y dejar concretado que el pago se financiaría con su aseguradora de salud. El cual, se gestionó de forma inmediata y el procentaje que debía pagar era bastante inferior.

Ya fuera de las instalaciones medicas todos nos subimos al auto, Yuu en los brazos de su padre el cual, no dejaba de besarle la mejilla, provocándole cosquillas.

— Jiminie, ahora tengo un escudo —Grito el pequeño emocionado tocando el yeso blanco, mientras Yoongi intentaba escribir en el.

"Soy afortunado de tenerte, mi pequeño."

Fue lo que alcance a mirar antes poner en marcha el auto. Habían vivimos muchas emociones en un día, por lo que solo los lleve a casa para que descansarán.

Habrían más oportunidades para hablar de ellos, de Yuu, el futuro de ellos tres que comenzaba poco a poco a fusionarse.

Jimin sabía que todas esas emociones y acciones debían tener una respuesta.

Significado:

Poenia Blanca: "Soy afortunado de tenerte a mi lado."