Girasoles

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Desde que era pequeño, siempre me han encantado las flores. Sus texturas, los colores y la esencia que producía.

Con mi madre, íbamos todos los domingos a la florería de la esquina de mi barrio. Incluso aun recuerdo las sensaciones encontradas en aquel lugar y desde entonces, deseé tener mi propia florería.

Dónde podría expresar el bello y cálido sentimiento al ver crecer esas florecitas.

Pero debieron pasar un par de años para cumplir mi sueño, fue un arduo trabajo, entre reunir una buena suma de dinero para comprar o arrendar un lugar lo suficientemente cercano de la tienda de mi infancia. Pero lo que no me esperaba, fue que al regresar a mi ciudad de origen, ésta se hallaba cerrada y con un cartel colgado, del cual se leía un "Se vende" Por un lado, la melancolía se quería apoderar de mis planes, pero busque el lado positivo y sin preámbulo alguno, me contacté con el dueño, para llevar acabo los trámites de propiedad.

fue así como realicé unos de mis más grandes anhelos.

Se suponía que la tienda abriría la semana siguiente, pero como el pago de impuestos se había adelantado, no me quedó otra que comenzar lo antes posible, lo que me conllevó a pasar mi único día de descanso, ordenando junto TaeHyung. Él era mi socio y mejor amigo, nos teníamos el uno para el otro y aunque fui yo el que nos arrastro a cumplir éste sueño, el jamás se molestó, incluso se puso muy feliz y me agradeció por incluirlo en mis planes.

Ahora, a solo unas horas para la dichosa inauguración nos encontramos limpiando el recinto, y acomodando algunas flores por el lugar, también acomodando ya lo último que faltaba.

-Hyung, ¿Dónde guardó los productos?.- Llevaba un par de cajas montadas entre sus brazos, por lo mismo corrí abrirle la puerta del estante de los productos de jardinería, recibiendo un leve gracias musitado con voz cansada, debido al esfuerzo que estaba ejerciendo.

La florería no era demasiado grande, si tenía un invernadero bastante amplio en la parte de atrás, pero su sencillez en la parte frontal la hacía ver más acogedora y agradable. Habían momentos donde me bajaba la nostalgia, pero de inmediato pensaba que todo parecía demasiado irreal. ¿Quién diría que lograría cumplir mi sueño? incluso, oír decir a mi padre un par de veces que era infantil seguir con esto, razón por la que dejé de trabajar en su escuela y me dedique de lleno a cumplirlo.

-Tae, ¿Podrías limpiar el ventanal principal? Estoy escribiendo los últimos nombres de las flores, y luego las organizaré por categorías.

-Si Hyung, no te preocupes.- Sonrío, volteándose para realizar su labor.

Pasaron unas cuantas horas entre organizar las estanterías y limpiar. Ya al cabo de unas horas, nuestras piernas y brazos no daban más del cansancio, pero la florería había quedado hermosa, con todos los toques que la hacían única. Entre largas hileras de plantas atravesadas unas entre otras colgadas en las paredes, hasta pequeñas flores expuestas en los ventanales para que les llegará la luz del sol.

-Aún ni abrimos y ya necesito un masaje en todo mi cuerpo.-mencionó Taehyung rotando suavemente su cuello mientras que con su mano izquierda se apretaba sin ejercer fuerza en el lugar adolorido.

- Estoy de acuerdo contigo Tae, siento que mies pies me están matando.- Ambos nos hallábamos sentados en un pequeño sofá que haría de salón de espera, para los futuros clientes.

-No puedo creer que ya mañana es la inauguración solo espero que "Un Coin de soleil" sea un éxito.-continuó Jimin quitándose los guantes.

-¡Si! será todo un éxito, hyung. Ah, espero que no te enojes conmigo, pero he olvidado lo que significa... O creo que nunca me lo haz dicho. Taehyung se mordió los labios esperando lo peor, pero nada llegó, no hasta recibir una risa cansada y un leve golpe en sus hombros.

Give me Love ➳ ʸᵒᵒᶰᵐᶤᶰDonde viven las historias. Descúbrelo ahora