Capítulo 15. Ya no soy vírgen.

3.4K 220 15
                                    

Dedicado a CeliaEncinas


Es increíble como puede llegar alguien a tu vida y cambiarlo todo, darle un giro de 360°. Eso es justo lo que me pasó a mí al conocer a un vampiro, un ser que no creí que realmente existiera, tal parece que mi vida y todo lo que me sucede es narrado por un(a) escritor(a) de esas novelas de vampiros.

Primero Alexander y ahora Sebastián. Aún no puedo creer que ahora soy novia de Sebastián, mi jefe-socio, soy novia de un vampiro.

Después de nuestra plática y la sesión de besos, me llevó al club para buscar mi auto y regresar a mi casa. Apenas llegué corrí a mi habitación y me tumbé en la cama, mirando al techo, y pensando en todo y en la nada, en como mi vida había cambiado de manera tan drástica.

Ya era de tarde y me negaba a levantarme, pero recordando que tenía tareas por hacer lo hice.

Antes de eso bajé a la cocina, me serví un vaso con jugo y unas tostadas. Esperaba terminar todas las tareas a tiempo, ya que había quedado con Camille para cenar, al parecer tiene algo muy importante que decirme y por la noche me encontraré con Sebastián en el club.

Se ha tomado muy enserio nuestra relación, ya que hoy mismo me presentará ante el gobernador de su clan o puede ser por el hecho de que el gobernador es su creador, no entendí muy bien, pero creo que hay un lazo que los une; mi cabeza es un caos con tanta información para procesar.

(**********)

Al fin terminé todas las tareas, checo la hora y ya eran las 5:37p.m. no debía tardar en llegar mi amiga. Bajé rápidamente las escaleras y al entrar a la cocina no me había percatado de que Alberto estaba en casa.

-hola -saludé.

-¡hola! ¿cómo que hola? Ven y dale un abrazo a tu padre-. En seguida me lancé a sus brazos, me dio un beso en la frente y luego nos separamos.

-¿cómo has estado mi niña? -preguntó mientras seguía preparando la cena.

-bien -musité- te he extrañado mucho -le dije sentándome en el comedor.

-yo también, tu madre no tarda en llegar -informó.

-huele delicioso, ah por cierto, Cam viene a cenar conmigo.

-no hay problema mi niña, he preparado lo suficiente para ella también -dijo sonriendo- por cierto, ¿cómo va todo en la universidad y el trabajo? -preguntó.

-pues bien, la verdad es realmente cansón, pero sobreviviré -comenté haciendo que mi padre y yo riéramos juntos.

-me alegra saberlo, sólo no quiero entrar a tu habitación y encontrarte aturdida bajo una pila de libros -dijo bromeando- y ¿nada de novio? -preguntó haciendo que pare de reír, entrelace mis manos con nerviosismo para después hablar:

-ehm... pues estamos llevando las cosas... cuando esté lista, se los presentaré -musité tratando de identificar la expresión en su rostro.

-bien, te entiendo, sólo ten cuidado, si necesitas algún consejo ten la confianza de hablar conmigo o con tu madre, espero que todo vaya bien, por ahora me basta que seas feliz.

A pocos minutos de nuestra conversación llegó Cam y luego Nany. Ayudé a Alberto a servir la cena.

Todo estuvo delicioso, adoro tener un padre chef y más si es italiano. Al terminar de cenar hablamos de diversos temas, pero noté que Cami estaba un poco ausente y nerviosa, por lo que le indiqué para ir a mi habitación, mientras mis padres seguían hablando tranquilamente en italiano.

Amor MasoquistaWhere stories live. Discover now