Capítulo XIX.

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   Ha pasado un mes desde que envié ese mensaje. La tentación de volverle a escribir es muy fuerte, pero mi orgullo siempre me gana. Incluso, varias veces he escrito un "hola" pero nunca lo envio.


Una que otra vez, desbloqueaba el número y buscaba su foto de perfil, su estado, su última conexión. Y como era lógico, no lo fue cuando mande ese mensaje. Aveces desbloqueaba el número por varias horas, así él se daba cuenta que podríamos seguir hablando. Pero dudo que revisara cada cinco minutos si había actividad reciente sobre mi (como yo hacía con él.)

Los días pasan, y un que intenta regalarme una sonrisa en el colegio o en el club, nunca logro hacer que yo le devolviera esa sonrisa. Simplemente prefiero apartar la mirada.

No me hace falta sentir ese cosquilleo adentro de mi cuando hablábamos, me hace falta su amistad. Sus mensajes innecesarios de "Buenos días", sus malos chistes, sus audios de música vieja. Me hacía falta él. Y me duele admitirlo, me duele admitir que lo necesito, y él ni si quiera se acuerda mí.

¿También extrañara nuestras conversaciones a altas horas de la noche? ¿También extrañara nuestras bromas y conversaciones bobas que solo nosotros entendíamos? ¿También extrañara mis llamadas a las cuales el nunca respondía? ¿O solo yo...?

Lo extraño, y eso duele.

—Vicky, quita esa cara de "pocos amigos" y diviértete un poco. Ya supéralo" Dijo Brenda mientras jalaba de mi brazo para llevarme donde estuvieran los demás.

En ese momento, lo único que quería era tomar mi celular y escribirle a Evelio lo mucho que lo extrañaba. Brenda solo me dedicó una mirada de consolación.

Continuamos caminado hacia la piscina. Ese día era el cumpleaños de Jimena y todos estaban en la piscina, menos Brenda y yo.

Me mira con cara de picardía y con la cabeza señala la piscina donde se encontraban los demás. Solo sonreí, y me tire de un brinco.

Mis habilidades de nadar no son las mejores, pero al menos son aceptables. Por alguna razón, me paralicé ante la situación. Solo oía a personas hablar debajo de el agua. No podía moverme. Segundos después, note la falta de oxígeno en mi cuerpo. Agua había entrado en mis pulmones. No sabía qué hacer. Estaba en la parte más profunda de la piscina, no llevaba traje de baño, así que la ropa se volvía más pesada con el tiempo. Por más que intentaba llegar a la superficie, algo me detenía.

Pude oír como alguien gritó "¡Ayuda! ¡Vicky se ahoga!". No sé quién fue, pero se lo agradezco eternamente.

Luego de eso solo oía gritos. Intentaba moverme, cuando sentí que algo me agarró. Entré  en pánico e intente moverme, pero fue nulo. Sentí mi cuerpo moverme, y a lo lejos aún bajo el agua, podía ver la luz cada vez más cerca. Mi rostro al ya no sentir el agua, empezó a inhalar desesperada mente usando la boca, para poder respirar. Giro desesperadamente mi cabeza intentando comprender la situación. Rápidamente me fijo en unos ojos negros oscuros. Bajo la mirada, y encuentro a un cuerpo cargándome, hacia el otro lado dela piscina. El agua aun esta dentro de mis pulmones, y no dejo de toser intentando sacarla de mí. Mi cuerpo está temblando de miedo. Los brazos de quien me abrazaba, me sujetaron con una más fuerza para no dejarme caer. Podía sentir la mirada de todos sobre mí. Natalia y Branda quien estaban en la orilla de la piscina estaban pálidas del miedo.

Nos acercábamos a la orilla. Jake se acerca rápido, y extiende sus manos para recibirme. La persona que me llevaba entre brazos, con delicadeza me dejo entre los brazos de Jake. Este último, me sujeto, con todas las fuerzas posibles, y dejo con delicadeza en la orilla de la piscina. Branda y Natalia se acercaron rápidamente. Yo aún no dejaba de escupir agua.

—Gracias, primo— dijo Jake, mientras miraba a quien me llevó entre brazos. El otro sujeto solo asintió.

Branda me cubrió con una toalla. Jake no dejaba de darme suaves palmadas en la espalda. Todas las miradas dejaron de poner la mirada en mí ensena, y volvieron a lo que estaban haciendo.

— ¿Estás bien? Casi me matas de un susto— dijo Jake luego de que me tranquilizara un rato. Yo solo logre asentir. El joven que me llevaba entre brazos, se acercó con más toallas y se las entregó a Jake.

— ¿Está bien?— le preguntó a Jake, mientras se inclinaba cerca de mí.

—Sí, gracias. Si le pasa algo me muero— dijo Jake... ¿Preocupado?

—Te entiendo— dijo el joven. No sabía quién era, y estaba confundida ante la situación.

—Vicky, te presento a Ben, mi primo— dijo Jake mientras se paraba. Yo solo asentí. Ben era de buen parecer, y no lo niego. Alto, guapo, musculoso y ¡Me salvo la vida!

—Un gusto. Tu novio se asustó mucho— dijo con cara de picardía.

— ¿Mi novio?— dije en voz baja.

—Si, sí Jake supiera nadar, el mismo se hubiera tirado— dijo con un guiño, mientras miraba a Jake.

—Pero Jake no es mi...— fui interrumpida por Jake:

—Mejor dejemos de habar de si se andar o no, y vamos a un lugar donde te pegue más el sol— dijo algo nervioso.

Con ayuda de Jake, me pare y nos fuimos a sentar a una mesa de jardín. Aun cargaba la toalla en mis hombros, pero esta ya estaba muy mojada, así que Jake coloco una de las que trajo Ben.

Este se sentó enfrente de mí. No dejaba de verme. Intentaba descifrar su mirada pero no lo conseguía.

—Si no le tuviera miedo a el agua, te juro que yo hubiera ido— dijo mientras se rascaba la nuca.

—No hay problema—dije sin importancia.

—Vicky, me gustas— soltó con una mirada de ternura. 


¡Últimos ¿3? ¿4? Capítulos! 

Gracias a todos los que hicieron posible casi llegar a los 10K :) 

Eh estado revisando lecturas/votos. Y los votos no llegan ni a la mitad de las lecturas :( 

¿Acaso no saben que eso motiva? Así que... Si la lees, y la agregas a tu lista de lectura (que son varias) ¿Que te cuesta darme una estrellita?

>w< Hasta la próxima! 

Chan chan chan chan, fiiiuuu

Amor no correspondidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora