La Hija del Diablo

Capítulo 4

Capítulo 4

ANA SKY

Las grandes puertas de madera se cerraron tras ellas. Tres meses atrás, habían visto ese pasillo y habían caminado por él, pero, si no hubieran prestado atención al hecho de que la gran puerta de entrada al Instituto se encontraba al inicio de este, en ese instante no hubieran reconocido el lugar.

Sobre el Instituto Ascendants & Descendants habían muchas leyendas. Cada pared, pasillo, habitación, salón, jardín e incluso puerta, ocultaba un secreto o traía consigo una nueva historia. Una historia muy conocida, hacía referencia a la remodelación que sufría el Instituto cada año, antes del comienzo de las clases. Un mes antes, varios ángeles —y rara vez demonios— voluntarios, asistían al Instituto y ayudaban en la remodelación. Y, gracias a los poderes de cada uno, conseguían dejarlo completamente nuevo antes de que terminara el mes. Y, como ellas pudieron ver, ese año no había sido la excepción.

Avanzaron unos pasos admirando el pasillo. Las paredes, hechas de bloques gigantes y blancos, no habían cambiado. Más, las pinturas de distintos paisajes habían sido reemplazadas por grandes fotografías enmarcadas de lo que, supusieron, eran otros Institutos de aprendizaje para ángeles y demonios. Todas estaban ubicadas en fila en la pared izquierda, mientras que en la pared derecha habían ventanales de estilo gótico, con cristales pulidos, que permitían el paso de la luz y que durante el día alcanzaba para alumbrar el pasillo.

Del techo blanco y pulcro colgaban candelabros pequeños, de cuatro patas, de color negro, con cristales en forma de gotas que brillaban en cuanto un rayo de luz los atravesaba. En ese momento, permanecían apagados, pero Luci supuso que sería porque era de día, al anochecer, seguramente los prendían.

Unas largas columnas corintias, hechas posiblemente de mármol blanco, comenzaban en el suelo de mármol a cuadros, blancos y negros y se elevaban hasta terminar el techo, donde un lindo diseño, característico de aquellas columnas, abarcaba toda la parte del capitel. Las columnas estaban ubicada en ambos lados del pasillo y en total eran seis: dos al inicio del pasillo, dos en la mitad y dos al final.

Dieron algunos pasos más, caminando con cuidado, como si temieran quebrar algo.

—Me gusta —comentó Izzy, admirando su reflejo en el suelo—. En especial las columnas, me alegra que las hayan cambiado. Las anteriores daban miedo. —sus amigas la miraron. De repente Izzy se estremeció. Su cuerpo tembló, se irguió momentáneamente e hizo una mueca de asco.

Dalia soltó una pequeña risa y se volvió hacia Izzy.

—¿Miedo? ¿enserio? ¿cuántos años tienes? ¿cinco? —se burló.

Izzy se cruzó de brazos.

—¡No estoy exagerando! —exclamó—. Esas columnas no medían más de treinta centímetros y, sobre ellas, habían extrañas figuras que parecían modeladas por niños de tres añ... —se calló un momento—. Aunque, pensándolo bien, un niño de tres años no podría modelar escenas de muerte.

Dalia bufó, molesta.

—Oh, ya cállate. Esas "escenas de muerte" no eran mas que figuras abstractas que representaban distintos personajes importantes del Instituto Ascendant & Descendants.

Izzy rió.

—¿Arte abstracto o papilla barata?, yo le apuesto más a la segunda.

Luci no pudo evitar reír. Dalia se volteó hacia ella y al instante se calló. Dalia se volvió hacia Izzy otra vez, preparada para decirle algo. Luci simplemente se alejó un poco y fingió interés por las fotografías.