El Director

Capitulo 12

Sasuke tomó la fotografía, después se rió cuando la observó.

—Oh, pero que tío más guapo es el que está ahí.—le dijo divertido. Entonces cualquier rastro de humor que había en su rostro desapareció cuando notó lo entristecido que estaba.—hey, ¿Qué pasa?—preguntó, levantándole la barbilla para que lo viese a los ojos.

—No pasa nada...

—Vamos, dímelo.

Naruto suspiro. No dijo nada, pero sólo bastó para que mirara la fotografía y entonces Sasuke comprendió.

—No es mi novia.—se apresuró a explicar, dejado la fotografía encima del escritorio.—es mi prima.

—Oh.—se sonrojó al haber pensado mal.—¿De verdad?.—preguntó, con un tono de esperanza en su voz que no pudo ocultar.

—Si, yo no tengo novia ni novio. El único que me interesa eres tú.—murmuró y lo besó ligeramente en los labios.—eres tú, Naruto. El único hombre que se adueña de mis pensamientos, día y noche. Y eres mío, ¿Entiendes?

—¿Soy tuyo?.—arqueó una ceja.

—Claro que sí. ¿No lo ves? Todo tu cuerpo tiene marcado mi nombre.—su voz era suave, aunque seductora. Él tragó saliva.—supe que eras mío desde el primer momento en que llegaste a la escuela y te vi con tus tiernos diecisiete años, caminado apresurado por el pasillo del colegio y con la mirada en el piso, tratando de pasar desapercibido por los demás. Pero yo si te noté, Naruto. Te vi y no pude quietarte de mi mente jamás...hasta él día de hoy.

—Yo igual te veía.—admitió, sonrojándose por enésima vez en el día.—en los recreos, o cuando te pillaba por los pasillos...siempre te veía. Y joder, no había ningún momento en que no me imaginara...

—¿No te imaginaras que, cariño?.—le cogió de la barbilla, besándolo y sonriendo cuando él se ruborizó, otra vez.

—Cosas...

—¿Qué tipo de cosas? Explícate.

—Ya sabes...lo mismo que tu te imaginabas cuñado me veías.

—Cuando te veía, Naruto. Cuando te veo.—le corrigió, sorprendiéndolo cuando lo tiro hacia él y lo abrazó.—¿Tienes idea de lo mucho que te deseo? Pareciera que jamás me sentiré satisfecho de ti y es lo que mas me fascina.

—Me encantaría volver a repetir lo de hoy. Uhmm...me gustó mucho ese polvo encima del escritorio.—dijo tímidamente.

—A mí también me gusto.—sonrió y enredó los dedos en el cabello de su nuca, hechandole la cabeza hacia atrás para mirarlo a la cara. Lo besó por breves segundos, suficiente tiempo para enloquecerlo y hacerlo suspirar encantado.—me gustaría llevarte a mi casa para tenerte en mi cama, pero esta vez para hacerte el amor.

—¿Hacer el amor?.—preguntó sorprendido.

—Si, realmente tengo muchas ganas de hacer el amor contigo. ¿Que dices?.—le dijo inclinándose para besarlo juguetona mente en el cuello. Clavó los dientes suavemente y repartió pequeños besos, haciéndole cosquillas en la piel. Naruto río.—¿Te gustaría probar hacer el amor conmigo?

—Sabes que sí. Contigo estoy dispuesto ha hacer lo que sea, si ya me has follado encima del escritorio en tu propio despacho...

—Ahora cada vez que entre, no podré concentrarme en trabajar porque estaré distraído recordando lo maravilloso que fue estar dentro de ti, negó con la cabeza, sonriendo.—si hago mal mi trabajo a partir desde mañana es por tu culpa.

—Oh, y si yo comienzo a sacarme malas calificaciones, o a no prestar atención en clase será por tu culpa.

—¿Y porqué por mi culpa?.—preguntó inocente.

—Por estar entrometiéndote en mis pensamientos cuando no debes. Los profesores ya no me verán como el alumno correcto y se enojarán. Enviándome a detención después de clases.

Los ojos del Uchiha adquirierón un brillo especial.ñ

—Pero podrías sacar un provecho de eso.

—¿Cuál?

—Si te envían a detención, el que estará a cargó seré yo

—¿No es la misma inspectora o algún profesor que estará a cargó de eso?.—preguntó alzando las cejas.

Él sonrió, luego ladeó la cabeza y le lanzó un mirada caliente que le aceleró el corazón.

—Por ti puedo hacer una excepción.