Un darks encantador //editando//

Día 76

"Era Lunes, pero no era cualquiera, aquel lunes significaba el último día de clases del semestre, lo que a la vez significaba, verano.

Toda la escuela entera estaba emocionada por ello, tanto alumnos como profesores, las vacaciones estaban por iniciar, tres meses lejos de la escuela, todo el esfuerzo estaba por ser recompensado.

Pero aun así, Cassandra no recordaba que aquel día significaba tanto, aún seguía pensando en lo que había ocurrido el día anterior, Rose y James se habían convertido en una pareja oficialmente. La castaña no pudo evitar mencionarlo todo el viaje de regreso.

Cuando llegaron de la playa el reloj ya marcaba más de la media noche. Rose, al ser la que vivía primero por el camino que habían tomado había sido la primera que dejaron. La rojiza se despidió y fue hacia su cuarto, estaba tan conmocionada y emocionada que aquella noche se le hizo imposible conciliar el sueño, sólo se quedó acostada viendo aquel universo en su techo imaginando las posibilidades que el verano significaba.

Sin darse cuenta la alarma sonó, tenía que ir a la escuela, ella lo sabía muy bien pero se dio su tiempo para abandonar su cama. Sus ojos estaban sobre unas enormes ojeras. Se dio un baño con agua helada y bajó para desayunar los huevos revueltos que su madre había preparado.

Los minutos pasaron mientras comía el desayuno con lentitud ya que le costaba evitar quedarse dormida en ese momento, el no dormir comenzaba a pesarle. La escuela estaba por comenzar y no llegaría caminando, para su suerte, su madre se ofreció a llevarla.

Durante todo el viaje la chica hizo lo posible por no dormir, no pudo evitar los pequeños periodos en los que perdía el conocimiento pero al instante lo recuperaba, su madre hablaba de algo con cierta emoción en su voz pero la rojiza no logró captar atención a ninguna palabra.

—Nos vemos querida — Se despidió su madre cuando Rose abrió la puerta — Por cierto, no me has dicho nada, pero vi que Cassie publicó en twitter que tú y James están en una relación ahora, hablaremos de ello en casa.

Rose estaba tan dormida que no le tomó mucha importancia a ese hecho, no sintió ni un poco de curiosidad por saber si su madre apoyaba o no su relación con James, aunque le daba igual, nadie podría separarlos.

—Okay, nos vemos — Contestó Rose bajando del auto y después cerró la puerta.

Rose esperó que su madre acelerara para poder cruzar la calle y entrar a la escuela. No recordó que era el último día de clases hasta que observó los rostros de sus compañeros, la mayoría de los rostros de los alumnos eran de felicidad por las vacaciones que comenzarían, las personas que no festejaban era porque habían reprobado y tendrían que hacer recursamiento durante el verano.

El timbre sonó lo que daba inicio a la primera hora, la rojiza apresuró el paso en ese momento. Sería la segunda vez que llegaría tarde, pero no se sentía afectada en ningún sentido, se sentía alegre y nadie podía quitarle eso.

—Señorita Collins, le vuelvo a dejar pasar que llegara tarde, pero porque es el último día —Le dijo la profesora Martínez a Rose después de abrirle la puerta para que entrara.

La chica se sentó en su pupitre he intento mantenerse despierta, era tan tentativo recargarse y quedarse dormida sin pensar en las consecuencias, pero no podía hacer eso. Volteó hacía atrás y notó que James aun no llegaba, no podía mensajearle, las probabilidades de que la profesora le dejara pasar otra acción así eran nulas.

—Otro año escolar esta por acabarse, sé que los regañe y me desespere con ustedes algunas veces, quiero que sepan que apreció a cada uno de ustedes, hasta a ti Cassandra, —Dijo la profesora y Cassandra se rio un poco.