Tan solo una mirada

Capítulo 18: Alejarse

-Habla tú -dice.

-No, tú.

-No, habla tú -la miro con una cara diciéndole «vamos, habla tú». -ok... Felices 16 -se me abalanza al milisegundo de terminar de hablar y me abraza. Me quedo quieto inmóvil. Reacciono, y rodeo con mis brazos su espalda y entierro mi nariz en su cuello sintiendo su perfume. -Derek... -se separa y la miro. -mira, se que me distancié, no te hablé, nada de nada porque todo lo que pasó, no va a cambiar nada, ni el beso ni nuestras juntadas, nada. Y tal vez ya no sea la misma de antes.

-Tal vez nos alejaremos, pero siempre hubo algo -hablo rápido sin tomar ni una bocanada de aire. Me frena.

-No Derek, no entiendes, solo creo que seamos amigos. Madison es tu novia y con James estoy empezando algo -eso me mató. ¿Que esta en algo con James? No lo podía creer. -Solo quiero que si quieres sigamos siendo amigos. Te quiero pero lo nuestro no. -Genial, fantástico me mando a la FRIENDZONE. Besa mi mejilla y se marcha.

* * *

-Hola mamá -cierro la puerta con un puertazo. Tiro la mochila en el sillón. Y me siento

-Hola hijo -su saludo fue un tanto extraño, no estaba lleno de alegría o emoción.

-Mmmm, ¿paso algo? -me doy vuelta apoyando mi brazo arriba del sillón mientras frunzo levemente el entrecejo.

-Si, si, si -habla apresurada. -solo que... que... Olvidalo -rie nerviosa.

-Okey -alargo y dudo al hablar. Vuelvo a ponerme frente del televisor.

No estaba con esa alegría, es más tendría que estar emocionada de haber ya cumplido 16 y decir «ya esta grande mi pichoncito» mientras me agarra de las mejillas. Y creanme no es nada agradable eso.
Supongo que no estará Melanie emocionada, viniendo acá a mi casa y abalanzándose encima mío cada año cuando cumplía años, saltaba por toda la casa, emocionada y feliz.
Igual que todas las navidades y año nuevos, la pasábamos juntos con Mabel, Melanie y nosotros dos. Cada año nos prometíamos estar siempre juntos (como amigos) pero parece que este año esa meta se rompió.

Me levanto del sillón y voy hacia mi habitación para poder sacarme el uniforme y ponerme otra ropa.
Me coloco una camiseta azul, con una bermuda negra. Bajo las escaleras y salgo al garage.

Con Peter vamos a sacar el auto de mi padre que estuvo guardado por años desde su muerte. Espere esto hace mucho tiempo desde que él murió. Él me había dicho que cuando cumpliera 16 me enseñaría a conducir para sorprender a muchas chicas, hasta el día de hoy sigo sonriendo por ese comentario. Es un auto perfecto, blanco por fuera y por dentro negro. Me acuerdo cuando era fanático de su auto, soñaba con que llegara a los 16 y poder conducirlo.
En realidad papá, murió con otro auto, supuestamente que se lo "presto" un amigo solo por esa noche para volver a casa. Él nunca llego.

Entro a la habitación de mamá en completo sigilo para que no me escuche abajo. Abro el gigante armario, y saco desde la parte mas alta del armario una pequeña cajita de madera cerrada con un pequeño candado.

-Mierda -murmuro. Miro para mis costados buscando algo para abrir el candado. Escucho a mamá subiendo las escaleras. Actúo de manera rápida, cierro la puerta del armario salgo y corro a mi habitación y me encierro.

Observo a mi alrededor pensando en que usar para abrir el candado.

"A ver Derek... Usa tu pequeña cabeza"

Chasqueo los dedos. Se me había ocurrido, buscar esa pinza que he usado para cuando queríamos hacer esa pequeña experiencia de subir al techo del instituto. Allí arriba le iba a decir a Melanie que la amaba y que seamos algo más que amigos (lo sé, soy un romántico), pero no se pudo y la cobardía me ganó.
Saco abajo de mi cama la mochila que lleve ese día y encuentro la pinza. Me siento en mi cama y coloco la pinza en el candado y ejerzo fuerza con mis manos. El candado se parte y abro la cajita.
Veo las llaves del auto acompañadas de la llaves de casa y la llave del garage, saco las llaves y las coloco al lado mio y encuentro el anillo de papá de su casamiento. Supongo que se lo dieron a mamá.