Heaven Is A Place On Earth || El corredor del laberinto ||

Capítulo 18

P.O.V. Minho:

Había pasado ya cuatro días desde que Will se rindió en la cabaña de Harriet y Sonya, nos habíamos reunido justo al día siguiente en la asamblea para acordar lo que sucedería con él.

Después de mucho discutir llegamos a una conclusión: Will permanecería 36 meses encerrado por intento de violación, violencia y intento de asesinato y cuando saliera tendría que hacer 200 horas comunitarias ayudando en todo lo que le pidieran, incluido los peores trabajos que nadie quería. Lo mantendrían vigilado los primeros meses cuando saliera de la cárcel y tenía prohibido acercarse a Sonya si ella no le diera permiso.

Todos parecían contentos con aquel castigo, menos yo. Harriet no acepto mi propuesta de patearle el culo a Will dos horas por día y que yo mismo me haría cargo de ello, algunas personas son demasiado blandas y no están hechas para este mundo...pero en fin tendría que aguantarme mis ganas de partirle la crisma durante un tiempo más hasta que la volviera a cagar, porque aunque pasaran los meses, cuando él saliera de ahí, lo vigilaría yo mismo las 24 horas del día.

En cuanto a mi relación con Thomas, las cosas poco a poco iban mejorando, aunque prácticamente no habíamos hablado desde que le perdone ya era un avance que yo no hubiera intentado propinarle un puñetazo otra vez. No se lo merecía, ya no más. Él era mi amigo y tena que conseguir volver a confiar en él aunque eso me costara trabajo.

**

Camine en dirección a las celdas, que se disponían unos metros más allá de la parte sur del ayuntamiento, después de tanto insistir, Harriet me había proporcionado 10 minutos para hablar con Will.

Yo aun no estaba tranquilo, había una duda que no salía de mi mente y no podía vivir en paz hasta saciar mi necesidad de saberlo todo hasta él mínimo detalle.

Llegue delante de la gran puerta de hierro donde dos guardaespaldas vestidos con el mismo uniforme (Camiseta gris de manga corta y pantalón negro) me miraron preguntándome con los ojos que quería.

Sin mediar palabra les enseñe el papel que Harriet me había dado donde daba permiso para que yo entrara a ver a Will. Después de dos minutos, él guardaespaldas de la derecha que tenia pelo castaño oscuro y unos ojos pequeños como aceitunas me miro y asintió con la cabeza.

Saco sus llaves del bolsillo y abrió el gran portón de la estancia. Solo había cinco celdas ya que no veíamos la necesidad de más por ahora y había más cosas importantes que aun estaban por construir.

El guardaespaldas comenzó a caminar por el largo pasillo dejando a su compañero en la puerta y me izo un gesto para que lo siguiera. Recorrimos el pasillo estrecho de paredes blancas hasta dar con una puerta marrón girando a la izquierda. El guardaespaldas esta vez no saco ninguna llave si no que tecleo unos números en un aparato en la parte inferior de la derecha de la puerta y esta se abrió.

Vaya, poco a poco la tecnología iba avanzando en el Elyseum.

El hombre me indico que pasara primero y así ice, cuando me gire a ver si me seguía él seguía en la puerta sujetando el pomo.

-Es la celda del fondo, la única que está ocupada, tienes 10 minutos, cualquier cosa estaré al otro lado de la puerta.-Me dijo con voz ronca.

Asentí y él cerró la puerta. Mire hacia delante y comencé a caminar hacia la celda que me había indicado el hombre sin apartar la mirada del frente.

Me posicione delante de los barrotes de la última celda ya que no me habían dado las llaves para entrar dentro, ni quería.

Mire hacia dentro descubriendo una pequeña cama, un lavamanos y una única silla. En ella estaba una figura curvada hacia abajo con la cabeza entre las rodillas y los brazos abrazándose las piernas.