Capítulo 3

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***

Baekhyun no se había percatado en qué momento aquel mugroso túnel de tierra se había convertido en un pasillo de metal forjado. No hasta que el pasillo se abrió ante ellos llegando a una enorme habitación, la cual parecía ser un centro de control debido a la gran cantidad de computadoras y tecnología de punta que habitaban en cada esquina y que, al mismo tiempo, eran manejados por otro tanto de personas. El Omega se quedó estupefacto ante aquella escena, todo lo que podía haber deducido sobre el escape repentino del Sanyang se acababa de ir al carajo.

Chanyeol sonrió de lado, soberbio, cuando se percató de la expresión en el rostro de Baekhyun mientras seguía caminando delante de él con aire de superioridad. Se acercaron a la computadora central, que era manejada por una mujer de tez ligeramente morena y con facciones muy similares a las de Chanyeol. Baekhyun la observó cuidadosamente, siguiendo cada centímetro de su rostro sin evitar el sentimiento de haber conocido a esa mujer con anterioridad. Grandes y profundos ojos, párpado doble, pobladas cejas que no dejaban de ser femeninas y gruesos labios. El contorno de su rostro era perfecto con forma de "v", acompañado de una pequeña nariz que era decorada con una bandita sobre ella y se notaba que estaba ligeramente hinchada.

La mujer, quien bien podía ser una Beta o una Omega, observó a Baekhyun cuando hubo terminado de hablar quién-sabe-qué con el Alfa líder. Ella le sonrió ampliamente provocando que sus mejillas se tiñeran ligeramente de escarlata.

—Bienvenido, Byun Baekhyun. —dijo ensanchando la sonrisa.

Baekhyun tragó grueso al escuchar la melodiosa y serena voz de la susodicha. Abrió sus ojos como platos gigantes porque, joder, acababa de confirmar que se trataba de la doctora del centro de operaciones del Sanyang, aquella a la que le dio un puñetazo en la nariz por tratar de tranquilizarle justo después de inyectarle esa mierda misteriosa color celeste.

—Es bueno volver a verte —rió —aún duele un poco. —comentó divertida mientras le guiñaba un ojo.

—Lo siento... —cabizbajo debido a la gran vergüenza que sentía en ese instante pues, estaba consciente de la fuerza con la cual le había dejado ir el puño. En ese momento deseaba profundamente que la tierra se lo tragara, literalmente.

—No te preocupes, entiendo perfectamente que estabas asustado. —trató de animarlo. Joder, Baekhyun no terminaba de entender cómo esa mujer podía llegar a ser tan comprensiva con la persona que le había desangrado la nariz sin piedad. —Veo que el idiota de Chanyeol pudo traerte en buenos términos. —expresó mientras regresaba su mirada al monitor de comandos mientras empezaba a teclear.

Llamó la atención de Baehyun el hecho que en todo ese lapso, no había escuchado a nadie referirse a Chanyeol con cierta clase de irrespeto o tratando de ponerse a la misma altura que el Alfa. A nadie que no fuera el mismo Baekhyun, por lo que sus sospechas sobre la relación entre ellos aumentaba cada vez más sin poder deducir aún que clase de vínculo tenían. Todos los demás parecían tenerle cierta clase de respeto y admiración al Alfa, siempre acataban sus indicaciones sin protestar por más temerarias que pudiesen llegar a ser.

Ella recogió un par de carpetas que yacían sobre su escritorio y emprendió camino a través de uno de los pasillos laterales a la estancia. Chanyeol la siguió y Baekhyun se fue detrás de éste por inercia.

—¿Entonces, tú eres el responsable de que el rostro de YooRa luzca así? —preguntó de repente el Alfa sin voltear a verlo realmente, sabía que el Omega iba detrás de él.

—Tuvimos un pequeño mal entendido. —se limitó a decir, no pensaba profundizar más. No cuando la mujer resultaba estar de su mismo "bando" y resultaba ser tan jodidamente agradable. Chanyeol rió divertido.

Indómito [ChanBaek / Baekyeol]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora