6 •Beso•

228 55 4
                                    

PDV:Jaiden:
Mis ojos se abren lentamente, parpadeo un par de veces ya que la luz del sol golpeaba mi habitación, me siento en la cama y suspiro pesadamente, miro a mis alrededores y al rincón estaba el portugués observándome, me sobresalto y exhalo frustrada.

—¿Qué haces en mi habitación?, ¿acaso no te enseñan a tocar?.

—Es mi casa y puedo entrar a donde se me pegue la maldita gana.

—¿Acaso no sabes lo que es el espacio ajeno o tus padres no te dieron educación? .—Aquello lo enfureció aún más y se acercó de manera peligrosa, hasta llegar a mi cama. Este gatea hasta a mi y me empuja quedando encima de mí, me agarra de ambas muñecas y las oprime—. ¡Sueltame!.

—¿Olvidaste acaso la palabra mágica?.

—¿Por qué debería de hacerlo?, tú eres el que entró a mi habitación como un psicópata, ¿y ahora me exiges que te pida por favor por todo?, conmigo te estás equivocando Ronaldo.

—¿Cómo es que te sabes mi otro nombre? .—Pregunta desconcertado.

—Los chicos a veces te llaman así y tú ni siquiera te das cuenta, si serás idiota, imbécil.

—¿Cómo me llamaste?.

—¿También eres sordo o qué?.

—Mucho cuidado Jaiden, no sabes que soy capaz de hacerte.

—¡Patrañas! .—Exclamé con fuerza—. Siempre amenazas y nunca me haces nada, solamente escucho y escucho tus patéticas amenazas que nunca cumples, si quisieras hacerme algo, ya lo habrías hecho hace cualquier rato, así que mejor guard... .—De pronto sus labios se estrellan con los míos, mis ojos se abren de golpe, traté de quitarme del beso y este forcejeaba más sus manos para impedir zafarme.

Mis labios se mueven al compás como si estuvieran hechizados, ¿por qué no puedo reaccionar?. Al separarnos por la falta de aire me queda mirando estupefacto, como si estuviera sorprendido de lo que hizo y se aleja de golpe retirándose de mi habitación. Me limpio mis labios quitando todo rastro de él y mi respiración se agita.

—¡Te odio! .—Lanzo la lampara que se encontraba a mi lado en dirección a la puerta y esta se hace añicos al tener impacto con la madera. Sin embargo, James no tarda en entrar a los segundos, este se me acerca con cuidado.

—¿Jaiden estás bien? .—Niego. James se me acerca y me abraza y yo no dudo en corresponderle. Su abrazo se siente cálido y eso me hace sentir más tranquila, Dios, este chico es tan bueno que no entiendo como puede ser amigo de ese gorila que tiene como jefe.

—Con tu abrazo, ya me encuentro mucho más tranquila y mejor .—Sonreí. Este acaricia mis mejillas y vuelve a abrazarme.

—Vamos, vístete y bajas a desayunar, te prepararé unos huevos revueltos con tostadas y jugo de naranja.

—Esta bien .—Asentí con una sonrisa, James se retira y me dirijo al baño, hago mi rutina diaria, y me coloco unos shorts de mezclilla de tono azul marino, una blusa holgada blanca y mis vans negras. Bajo de las escaleras y puedo notar que esta el idiota de Cristiano ahí, este me observa de reojo de pies a cabeza y sigue en lo suyo. Me siento al lado de Isco y noto que James me termina de preparar el desayuno y deja en la mesa todo lo que me prometió. Agarro una tostada y la voy a meter a mi boca.

—¿Te lavaste las manos? .—Frunzo mi ceño al notar que el idiota me estaba hablando. Los demás me miran divertidos esperando algún tipo de respuesta, pero solo lo ignoro y le doy un mordisco.

—Wow James, esto está demasiado exquisito .—Al final, él ha sido el único al que le puedo confiar mis cosas o algo así por el estilo, pero me alegro que sea él. Sin embargo Cristiano me arrebata la tostada de mi mano y le da un mordisco, este me mira y luego mira a James.

—Esta desabrido.

—Que manera de fastidiar, ¿acaso no puedes largarte y dejarme desayunar tranquilamente? .—Doy un golpe a la mesa y me levanto de mala gana para irme de vuelta a mi habitación. Dios, que fastidio es este chico, ¿hasta cuando dejara de hacerme la vida imposible?.

Me lanzo a mi cama y estiro mi cuerpo, agarro una almohada y me dispongo a descansar, me he quedado con las ganas de disfrutar un desayuno que pudo ser tranquilo. Si tan solo me hubiera traído el vaso con jugo.

En eso tocan la puerta y entra Marcelo con una bandeja. Era el desayuno que me había preparado James. Este se sienta en la cama y me sonríe. Me entrega la bandeja y yo no dudo en tomarla.

—Gracias Marcelo.

—De nada, de todos modos, él no debió comportarse de esa manera.

—Es un idiota, pero a veces no hay solución para tipos como él .—Reí mientras tomaba el vaso con jugo y lo bebía.

-¿Te puedo hacer una pregunta? .—Asentí—. ¿No tienes idea de por qué Iker tomaría ese dinero prestado? .—Niego.

—Créeme que ni yo sabía que había pedido esa cantidad, mi rutina era universidad, trabajo y casa, llegaba muy tarde en la noche y nunca estaba, de hecho siempre me sentí sola en casa, desde que mis padres se fueron, siempre fuimos él y yo hasta que cumplí la mayoría de edad y bueno, el resto de la historia ya lo sabes.

—¿Cuántos años tienes?.

—Cumpliré veinticuatro la próxima semana .—Contestó—. No pensaba pasar mi cumpleaños o el resto de mi vida así.

—¿Así cómo? .—Ladea su cabeza a un lado.

—Secuestrada .—Hago una mueca.

—Si te digo esto, ¿no te enfadaras?.

—¿A qué te refieres?.

—Bueno...realmente no estás secuestrada...

—Ni se te ocurra abrir la boca Marcelo .—En eso entra el portugués a la habitación.

—Debo irme, hablamos luego .—Ambos se van dejándome sola, Cristiano me da una mirada rápida y cierra la puerta de golpe. Y como la curiosidad me mató, me acerco silenciosamente hacia la puerta y apoyo mi oreja para escuchar.

Ella no tiene porqué saberlo Marcelo.

Pero Cristiano, ella merece saberlo, es una buena chica, su hermano realmente nunca la quiso, él es el idiota infeliz, Dios, si hubieras escuchado todo lo que ella me acaba de decir...

Ya está dicho, niuna palabra más.

¿Qué es eso tan importante que quería decirme Marcelo?. Mierda, ¿qué es eso tan importante que tú e Iker esconden, Cristiano?.

Way Down We Go - Cristiano RonaldoUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum