34. Gwendolyn*

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Atención! Este es un capitulo para mentes pervertidas xD y las que no tienen mentes pervertidas pues unan se al club.

Gwendolyn

A las seis de la tarde me levante de la cama y me dirigí a mi armario.

Finalmente había ido de compras y amaba mi nueva ropa,y si Tobías se acerca a ella de nuevo,esta ves si lo matare.

Elegí un pantalón de cuero apretado,una blusa sin mangas blanca y unos tacones negros.

Me deje el cabello suelto y me puse poco maquillaje,recordando que a Keith le gustaba que no usara maquillaje.

El timbre sonó y sonreí,baje las escaleras corriendo,pero ya era muy tarde,papa ya había abierto la puerta y miraba mal a Keith.

-que haces aquí?-pregunto papa.

-papa-dije y el se giró-Keith y yo saldremos hoy,esta bien?

El me miro y luego a Keith.

-de cuerdo-dijo entre dientes-tienes suerte de que me agrades-dijo papa a Keith y sonreí.

Mama camino hacia nosotros y Pulgoso la siguió.

Papa recogió a pulgoso del suelo y lo acaricio.

Sabia que amarían a Pulgoso en cuanto lo vieran,mama no estaba de acuerdo al principio pero luego acepto a quedárselo.

-la quiero aquí a las nueve-dijo papa.

-Díez esta bien-dijo mama.

-en realidad...me podría quedar a dormir en casa de Liv?

-si-dijo mama sonriendo-diviértanse.

Keith condujo hasta Coney Island,donde estaba la playa y había mucha gente ya que la mayoría de las personas venía de noche al parque de diversiones.

Esta no era mi idea de una noche solos...pero al menos vinimos solos.

Cuando entramos al parque lo primero que hicimos fue comprar una algodón de azúcar.

-a que juego quieres montar primero?

-carritos chocones!-dije emocionada.

-de acuerdo,pero debes saber...que recibirás muchos de mis choques-dijo arrogante.

-te pateare el trasero por estar de arrogante-dije sonriendo y lo bese.

****
Reí al ver la cara de Keith cuando un niño le lanzó su manzana acaramelada.

-no es gracioso,ese niño estaba loco,lo único que le dije es que el no podía montarse a la montaña rusa por si solo.

Reí de nuevo hasta quedarme sin aire y el sonrió un poco,me atrajo hacia el y me beso.

-me encanta cuando te ríes,aunque te estés burlando de mi.

-me gusta reírme de las personas-dije riendo mientras caminábamos para irnos del parque.

Me detuve al ver un peluche de pingüino.

-lo quieres?-pregunto Keith.

-no,hay que irnos-dije pero me detuvo.

-lo conseguiré-dijo y camino hacia el puesto donde estaba el peluche-quiero ese pingüino.

-tienes que derribar esos dos vasos-dijo el hombre señalando a dos vasos pegados mientras sonreía.

-fácil-dijo Keith sonriendo.

-con una pelota-dijo el hombre.

-que? Eso no es justo-dijo Keith.

Un Cambio Inesperado © (Sin Editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora