Capítulo 10 parte 6

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Me decidí; no fue fácil, pero ya me cansé de resistirlo siempre, me quité toda mi ropa y me puse un conjunto blanco, mi favorito, me peiné el cabello y me puse un poco de brillo labial, por último lo único me hacía falta, la cadena con el dije de luna que me había regalado Nicola, me la puse y me miré en el espejo por última vez. Salí de mi habitación y me dirigí a la de Nicola; entré y vi que estaba obscuro, el cuarto sólo estaba iluminado por la luz que salía del baño; escuché como él se seguía bañando, yo cerré la puerta y me quedé recostada sobre ella pensando, aún puedo regresar, pero ¿para qué?... para que siga provocándome cada vez que puede?... no, estoy más que decidida... él ganó su juego... pero... pero al menos fui una buena competidora.

Oí como cerró la regadera, me puse algo nerviosa pero seguí esperándolo.

Me quedé parada en frente de la puerta sólo con mi conjunto blanco y con la cadena que él me había regalado; vi como Nicola salió del baño; él sólo llevaba puesto su bóxer y tenía una toalla alrededor del cuello; dio un suspiro y luego sintió mi presencia, volteó a verme e hizo un gesto de asombro, pero después se le formó una gran sonrisa llena de deseo y satisfacción; quitó la toalla de su cuello y la dejó colgada; comenzó lentamente a acercarse a mí con ésa sonrisa; llegó dónde mí, me miró de pies a cabeza y se humedeció los labios:

Me sonrió- te ves tan hermosa... -me tomó de la cintura y me pegó a él-

-Gra... gracias -dije nerviosa-

Miró mi cuello- estás usando la cadena que te di - rió levemente- entonces... ¿estás segura?-asentí con mi cabeza-

-Bien -sonrió y se acercó a mi oído- gracias... -retrocedió para mirarme-

Una sonrisa se dibujó en su rostro mientras me veía, comenzó a caminar poco a poco conmigo a su cama; al llegar me acostó delicadamente en ella y se acomodó encima de mí:

-¿Quieres decirlo? -Me sonrió pícaramente-

Lo miré y por alguna razón se formó una leve sonrisa en mi cara- Nicola... -lo vi fijamente- hazme tuya...

Él al oírlo tenía una bella sonrisa y sus ojos se iluminaron. Acarició mi mejilla y comenzó a besar mi cuello; tocaba mi cadera con sus manos mientras iba lamiendo mi cuello y parte de mi hombro; él comenzó a subir su mano izquierda rozando todo mi abdomen hasta llegar a mi espalda, yo me pegué a él y comencé a acariciar su pecho, ese hermoso torso que había resistido tantas veces, Nicola me sintió y sonrió; me hizo sentarme y darme la vuelta; bajo lentamente el cierre de mi vestido y besaba cada parte que quedaba al descubierto, fue bajando las tiras de mi vestido, besándome los hombros, retiro lentamente el vestido hasta que solo quede en brassier y bragas, me hizo voltearme, me desabrocho el brassier mirándome directo a los ojos, embargándome de un gran cariño, me despojo de él y su mirada paso de mis ojos hasta mi pecho, lo acaricio lentamente, asiento que miles de escalofríos pasaran por mi cuerpo, presiono mi pezón con sus dedos y lance un gemido, me arquee hacia el, al parecer entendió que quería alivio y de a pocos fue acercando su boca a mi pezón, cubriéndolo, lamiendo con si hábil lengua y asiéndome gemir, mucho, paso de un pecho al otro repitiendo la misma acción; sentí como sus besos iban bajando, recorriendo mi cuerpo, asiéndome estremecer; le dio una lamida a mi ombligo, haciendo que lanzara un gemido de placer, luego hizo que separara mis piernas y de a pocos fue quitándome la panty, sentí como me sonroje e intente cubrirme.

-No tengas miedo - dijo Nicola y levanto su vista y nuestras miradas se conectaron, sentí una gran confianza en él, así que aparte mi mano.

Nicola me sonrió y comenzó a besar la cara interna de mi muslo, pasando la lengua, hasta que se encontró con mi entrada, paso su dedo por ahí, asiéndome gemir alto a lo que él respondió sonriendo, separo los labios de mi sexo y presiono un dedo sobre mi clítoris, otro gemido más alto, de a pocos fue acercando su boca y cuando me beso ahí solté un sollozo, era un placer inmenso el que me estaba dando Nicola, ya no podía ni pensar con claridad, luego su lengua comenzó a juguetear con mi clítoris, haciendo que yo gritara, sentí como iba introduciendo un dedo y moviéndolo poco a poco, su lengua hacia círculos alrededor de mi clítoris y luego lo presionara, sus caricias eran letales, otro dedo comenzó a invadirme y en eso Nicola hace mas presión en mi clítoris haciendo que explote, era una sensación maravillosa, sentía que podía tocar las estrellas con mis manos, un placer tan grande y que quisiera a que nunca terminara.

Cuando termine ese gran viaje de placer, ahí estaba Nicola enfrente de mí con una mirada llena de lujuria, pero también cariño, un cariño tan grande...

De a poco Nicola me fue levantando y me sentó sobre él, rodee mis piernas en su cintura; en esta posición podía sentir el... miembro de Nicola... erecto.

-Ves cómo me pones linda - dijo Nicola y cogió una de mis manos y la puso sobre su bóxer justo en sima de su miembro comenzó a moverlo; quería darle el mismo placer que él había provocado en mí, así que comencé a meter mi mano en el bóxer de Nicola hasta que di con su miembro; era grande; lo acaricie suavemente, explorándolo

-Segura... que no eres experta en esto- dijo Nicola con la voz entrecortada y con una sonrisa, yo también sonreí.

Nicola me tomo de la cintura y me recorto nuevamente en la cama, puede ver como se iba sacando el bóxer y aprecie su miembro, como me iba a caber eso, de seguro me iba a doler; al parecer Nicola comprendió lo que pensaba así que me dijo

-Tranquila, yo te cuidare - con esa palabras me sentí completamente confiada, es cierto Nicola no me haría daño, comenzó a besar mi cuello y mis pechos.

Sentí como poco a poco iba separando mis piernas y acomodándose.

-Angie, Mírame - dijo Nicola con voz cariñosa, abrí lentamente mis ojos y me conecte con su mirada; comenzó a penetrarme poco a poco, sentí un gran dolor, por más que lo intente no pude reprimir una lagrima, Nicola me beso la mejilla haciendo que la lagrima desaparezca

-Discúlpame amor, el dolor ya pasara - dijo tiernamente y sus palabras hicieron que mi corazón diera un salto de felicidad.

Comenzó a lamerme el cuello, intentando que el dolor terminara, luego paso a mis pechos; el dolor desaparecía poco a poco y era remplazado por una gran placer.

Las embestidas de Nicola fueron aumentando, asiéndome gritar de placer, me movía, gritaba, gemía; escuchar como Nicola gemía y lanzaba gruñidos, me hizo sentirme poderosa, así que me decidí, y levante mis cadera un poco, para que la penetración sea mas profunda.

-Me vas a volver loco - dijo Nicola en forma de gruñido y comenzó a penetrarme mas rápido, pero si dejar que nuestras miradas se separaran; sus ojos ahora con una gran brillo de lujuria en ellos, eran hermosos.

Una de sus manos comenzó a jugar con mi pezón, mientras su hábil boca chupaba el otro, sentía que estaba cerca, podía sentir como se acercaba el tan apreciado orgasmo y al parecer Nicola estaba también cerca del suyo; junto su mano con la mía y me beso con un enorme cariño; sentí mi cuerpo explotar y también el de él; así los dos llegamos al tan esperado orgasmo.

Se separó lentamente de mí, y me acuno entre sus brazos

-Angie- dijo suavemente

-¿Si?

-Gracias por dejarme ser el primero - sus ojos brillaban de felicidad.

-Gracias por ser tan lindo conmigo - y con eso cerré mis ojos, feliz y lista para dormir

...

-Cómo te quiero, mi inocente Angie- dije, pero ella ya estaba dormida


El placer de Tu InocenciaWhere stories live. Discover now