Post-Bar.

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La tomé de la mano y nos dirigimos a mi habitación.
Cerré la puerta tras de mí y tire a Junko en la cama, me acomode encima de ella y nos besamos por un buen rato.
-Ti-tienes u-un lindo e-estudio-dijo entre suspiro y suspiro mientras besaba su cuello y después mordía su lóbulo.
Después de un rato de besarnos me empezó a desabrochar los botones de la camiseta y yo le sacaba la camiseta por encima de la cabeza. En un momento nos atoramos y nos reímos, después de liberarnos de las camisetas nos seguimos besando.
Yo acariciaba sus brazos, su estómago, su espalda. Ella temblaba.
-¿Es tu primera vez?-dije mientras me liberaba de las molestas botas.
-Ah... Si, algo así.-contestó ella cuando termino de sacarse las botas.
-¿estás segura de que quieres hacer esto?- dije mirándola a los ojos y acariciandole la espalda.
-Si.-reanudamos nuestra actividad y nos seguimos besando.
Ella estaba debajo mío, yo estaba a horcajadas sobre ella sosteniéndola de las muñecas.
La necesitaba más cerca, mucho más cerca. Después de quitarle los pantalones, me deshice de su ropa interior. Yo aún tenía una camisa blanca, debajo vendas, pantalón y ropa interior.
Comencé a mover mis manos por sus piernas. Pasaba mis dedos por sus muslos internos y podía sentir el calor que emanaba.
La besé y me detuve un momento.
Me quite la camisa blanca y empecé con las vendas.
-¿para qué son?-preguntó sin quitarme la vista de encima ni un segundo.
-Para lucir como un chico-dije y me quite el pantalón y la ropa interior de un jalón.
-¿Es tu primera vez?- dijo mientras me acomodaba otra vez encima de ella.
-No, pero siento como si lo fuera.-dije dándole un pequeño beso- Me aterras.
Proseguí con mi actividad de encontrar sus zonas erógenas.
Las rodillas internas, la espalda y los muslos internos eran sus puntos débiles.
-¿estás segura?- dije deteniéndome por un momento.
-Si, lo estoy...
Comencé a besarla detenidamente desde el cuello hasta sus pechos. Estaban duros, les daba pequeñas lamidas haciendo que se pusieran aún más duros. Ella comenzaba a gemir.
Baje hasta su estómago y lo besé, cada centímetro, no había piel que mis labios no hubieran tocado.
Después volví a subir y seguí moviendo mis manos por sus muslos internos y ella cada vez gemía más...
-De-deja d-de torturar-torturame...-dijo gimiendo.
Yo solo solté una pequeña risa.
Me acomode a horcajadas encima de ella, tenía los ojos cerrados.
-Quiero que me mires...-dije-Quiero que me mires cuando te corras...
No quería abrir los ojos así que la anime con un beso.
Coloque mi mano entre sus piernas y me di cuenta de que estaba muy, muy mojada. Ya la había hecho esperar bastante.
Primero metí un dedo a lo que ella respondió con un gemido.
-¿Estás bien?- dije viéndola a los ojos.
-Mejor que nunca.
Metí otro dedo, otro gemido.
Ella se movía inquieta en mis dedos, ya no quería esperar.
Comencé a mover mis dedos lentamente, tocando su perla hinchada...
Ella gemía.
-No cierres los ojos.
Cada gemido era como música para mis oídos.
-Oh, sí, eso... Eso... M-me es-estoy viniendo-dijo tratando de cerrar los ojos.
-Entonces hazlo.
Comencé a mover mis dedos mucho más rápido y alterne mis dedos y mi lengua. Ella se corrió, tuvo un orgasmo largo y después de gritar y gemir mi nombre, se tumbó sin aliento en la cama.
-¿Te ha gustado?- dije acariciandole el cabello.
-Si...-dijo dándome un beso-Ahora es mi turno.
Ella sabía perfectamente dónde tocar. ¿Cómo?
Empezó a acariciar mis pechos lentamente y luego pasó su lengua por cada uno de ellos.
-Uff, si... Eso está excelente-dije suspirando y gimiendo.
Pude sentirla sonreír. Se colocó hasta abajo mío y comenzó a lamer mis muslos internos. Yo la necesitaba dentro mío...
Después de lo que me pareció una eternidad se colocó entre mis piernas y las levanto.
Comenzó pasando delicadamente su lengua por mi clitorís. Después entró bruscamente, yo no pude evitarlo, solo te un gemido un poco ruidoso.
Entraba y salía, entraba y salía. Como el aleteo de una mariposa.
Yo me agarraba de su pelo, invitándola cada vez más. Después hizo algo inesperado. Rápidamente se puso sobre mí y me besó apasionadamente. Comenzó a meter sus dedos rápidamente. Me corrí más rápido de lo que nunca lo había hecho.
-Junko! Oh, sí...-estaba extasiada.
Me tumbe a su lado y le aparte un mechón sudado de la frente.
Le di un pequeño beso y la abracé.
-¿cómo es que sabes hacerlo tan bien?-pregunté escondiendo la cara entre sus omóplatos.
-Bueno, yo siempre he sido la que hace todo en mis anteriores relaciones, nunca recibí nada a cambio, prácticamente eres la primera-dijo volteándose y dándome un pequeño beso en la nariz.
-Ahora me toca a mí preguntar-dijo tomándome de la barbilla y levantando mi rostro de tal manera que nos miráramos a los ojos.
-Dispara.
-¿Por qué quieres lucir como chico?-dijo poniendo las manos alrededor de mi cuello mientras yo ponía las mías en su cintura.
-No quiero lucir como chico enteramente, al estilo operarme o algo así-Dije mientras escondía su cara en mi cuello- Solo que no me gustan mis pechos, eso es todo.
-Son lindos.-dijo con una pequeña risita.
-No me voy a enredar en ese tipo de charlas, no después del buen momento que pase- dije soltando una risa.
Después de eso Junko se quedo dormida en mis brazos y luego también lo hice yo.
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Alguien ordenó un capítulo erótico alias porno literaria?
Todos sabíamos que en algún momento iba a pasar eso. Espero que haya sido de su agrado (ω) (you know what I mean?)  los aprecio un montón shabos por tomar su tiempo para leer mi coso este. Recuerden votar y favoritear o como se diga eso.
Con todo mi Love:
-TG

Las cosas que pasan.Where stories live. Discover now