-No usaré lentes-digo nuevamente.

-Lo harás-mamá me señala.

-Arruinará mi vida-digo soltando un suspiro.

-No me importa-dice mamá negando con la cabeza.

-Seré una nerd y todos se burlarán de mi-digo entre dientes.

-No serás una nerd, deja de ser tan dramática-dice mamá rodando los ojos.

-No usaré lentes, puedo usar lentes de contacto-alzo ambas cejas.

-Cariño, creo que deberías usar lentes, son más seguros y es mas higiénico-dice la doctora-Pero claro, si puedes usar lentes de contacto si es lo que tú decides.

-Usaré lentes de contacto-digo asintiendo.

-Usaras lentes-dice mamá y la veo mal. Nunca. En. La. Vida. Cuando estoy por decirle nuevamente que no, ella me interrumpe-Usarás lentes y punto-me guardo mi comentario al ver su rostro. Cuando mamá pone esa cara, es mejor nunca llevarle la contraria, lo he aprendido de papá.

-¿Puedo negociarlo?-pregunto desesperada.

-No Gwendolyn, usarás lentes y punto-hago una mueca con ganas de llorar. Siempre arruinando mi vida.
Pareceré una nerd. Una nerd con alergias. Será mi pérdida, moriré.

Cuando salimos de la habitación, veo a mí alrededor haciendo una mueca.

-Puedes elegir los que quieras, luego solo tendrás que esperar un rato a que yo ponga el vidrio en ellas-dice la doctora y asiento lentamente. Veo sin ganas todos los lentes y suspiro.

De acuerdo, si voy a usar lentes, usaré de los que están de moda. Me acerco a unos negros y de tamaño mediano. Me lo pruebo y me veo al espejo. Al menos me veo bonita, claro, si quitas los ojos y la nariz roja. Maldita sea la miopía y las alergias.

Cuando nos dicen que los lentes estarán en unas horas, mama decide ir de compramos para "hacerme sentir mejor" pero ir de compras con mamá es horrible. Solo elige ropa cómoda sin pensar en la marca. Claro, yo finjo que me gusta la ropa que compra y la guardo en mi armario hasta que se olvida de ella.

Cuando terminamos las compras, vamos por los lentes y mamá me lleva de regreso a casa. Subo las escaleras rápido y me alisto lo más rápido que puedo. Cuando me pongo el uniforme y me maquillo, bajo las escaleras corriendo pero mamá me detiene ¿Ahora qué?

-¿Tus lentes?-ella alza una ceja.

-Están en la habitación-digo rodando los ojos y ella me detiene de nuevo.

-¿A dónde vas?-pregunta y suelto un bufido.

-¡Al partido mamá!-le digo irritada.

-No iras si no te pones los lentes-abro la boca ofendida ¿Que no iré al partido? ¡Sobre mi cadáver!

-Los usaré mañana, lo prometo-le digo casi rogando.

-Wen...-me dice ella poniendo su rostro serio.

-¡Mamá, las usaré mañana!-le grito molesta.

-No uses ese tono conmigo Gwendolyn, ponte los lentes ahora, o no vas al partido-me señala seria.

-¡Qué importan los malditos lentes! No es como si los usare mientras esté haciendo la coreografía-digo estampando el pie en el piso.

-Gwendolyn, es por tu bien-dice mamá poniendo sus manos en su cintura.

-¡Solo arruinarán mi vida!-niego con la cabeza.

-Bien, al menos no tendrás peor tú vista-me espeta.

-Por favor, mamá. Necesito apoyar a Jake ¡Además, soy la capitana del equipo!-alzo ambas manos.

-¿Qué está pasando aquí?-pregunta papá, él nos ve confundido mientras come unas patatas fritas en pijama.

-¡Mamá me esta prohibiendo a ir al partido!-le digo indignada con la intención de que él se ponga de mi lado.

-Scar...-comienza a decir papá pero mamá lo ve molesta.

-¡No quiere usar sus gafas!-dice mamá. Al ver que mamá está enojada, papá me observa y luego a ella. Genial, ahora él está de su lado solo porque está enojada.

-Ponte tus lentes cerezita, solo son lentes-dice cansado.

-¡Agh! Sabia que estarías con ella ¡Siempre te pones de su lado!-grito soltando un bufido.

-¡Sólo son lentes! ¡Póntelos y ve a tu maldito partido!-grita Toby desde la sala-¡Ahora déjame jugar en paz!

-Cómo ustedes dicen, solo son lentes, no me harán daño una sola noche sin ellas, mamá...-suspiro rogando.

-No hay lentes, no hay partido-dice mamá cruzándose de brazos.

-¡Papá!-lo veo triste y él me ve como si quisiera pedirme perdón.

-Wen...-comienza a decir él y suelto un suspiro.

-¡Por supuesto!-grito alzando las manos-¿Saben qué? ¡No iré!-subo las escaleras furiosa mientras escucho a mamá y a papá discutir en la sala. Siempre es lo mismo. Mamá se enoja, papá le pide perdón de una manera hermosa, y ambos terminan felices. Ruedo los ojos azotando la puerta.

¿Qué mierda importan los lentes? Me acuesto en la cama, agarrando mi celular para enviarle un mensaje a Blair.

~Wen~
Tendrás que liderar el partido, no podré ir.

~Blair~
¡Seguro! ;) :D

Ruedo los ojos lanzando mi celular al suelo. Si, seguro está más que feliz de que yo no logre ir. Levanto mi rostro viéndome en el espejo y frunzo el ceño al verme completamente borrosa.

Okay, de acuerdo, tal vez si necesito los lentes. Me los pongo lentamente y mis ojos se llenan de lágrimas. Odio parecer una chica caprichosa y mimada pero realmente no quiero usarlas.

Presiento que si comienzo a usarlas, algo malo sucederá, siento que todo lo que hice durante estos cuatro años para ser la chica más popular y amada de la escuela, será un desperdicio.

Me quito los lentes viéndolos en mis manos. O tal vez si solo finjo usarlos... Gwendolyn, eres una genio.

Un Cambio Inesperado © (Sin Editar)Where stories live. Discover now