La Princesa De The Vamps ©

4.- Peores Amigas. Mejores Enemigas

Narra Alicia:

Elenna había salido enojada de la habitación.
¿Qué había hecho yo ahora? Nada según yo.
Maldita bipolar, quien la entiende. Ah Claro, yo.

La seguí y la tomé del brazo para que me mirara- ¿Qué quieres?- me dijo

-Hey, ¿Qué te pasa? ¿Te encuentras bien?

-Sí, de maravilla. Ahora suéltame. -dijo con un tono muy frío

-Oh, vamos. Te conozco de toda la vida. Sé que no estás bien. Dime.

Se soltó de mi agarre bruscamente- ¿Sabes que me pasa? ¡Pues te diré que me pasa! Estoy harta de que todos se fijen en ti y en mi no. Siempre termino siendo tu sombra. ¿Qué acaso no lo notaste? ¡Brad solo te preguntó a ti si querías acompañarlo, ni siquiera me miró! Solo soy una simple fan para ellos. ¡Pero tú en menos de tres días te ganaste su confianza!- empezaba a sonar histérica. Le estaba afectando demasiado

-A ver, a ver. Primero te me calmas. ¿Ok? Primero, es imposible que seas mi sombra si ni siquiera tenemos más amigos. Admítelo. Segundo, nadie se fija en mí. ¿Te acuerdas esa ves que "se fijaron en mi"? recuerda que fue una farsa. Tercero, es obvio que no te preguntaría a ti. ¡Si te acaba de conocer! Además no me he ganado la confianza de nadie. Ellos son así, deberías saberlo.

-Ash, cállate. ¡Me aburro con cada palabra de dices!

-¡Entonces ¿Por qué me escuchas?!

-¡Nunca quise escucharte! ¿¡Y sabes algo!?

-¿¡Qué!?

-¡ME LARGO!

-¡Pues vete! - Se dio la vuelta y salió por la entrada principal. Yo me tiré al piso. Eso había sido agotador.

Me quedé mirando la entrada. Solo había silencio y yo seguía dándole vueltas al asunto. ¿Qué pasaba con ella?

Escuché unos pasos aproximarse y luego alguien puso su mano en mi hombro.

-Duro día. ¿Verdad?-Era Connor, apareciendo en el momento justo. Como siempre.

-Ni te imaginas- Él se sentó a mi lado en el suelo

-No entendí que trató de decirte

-¿Nos escuchaste?

-Solo un poco. Ella parecía muy afectada con todo. ¿No te pareció?

Asentí

-¿Quieres un abrazo?- dijo extendiendo sus brazos. Solo asentí y me aferré a él lo más fuerte que pude. -Si quieres llorar... hazlo. Eres libre de hacerlo.

-No me gusta llorar frente alguien

-¿Ni siquiera frente a Connor Ball? ¿Tu nuevo amigo?

-Ni siquiera ante Connor Ball, mi nuevo amigo.

-¿Quieres agua? ¿Un café? ¿Jugo?

-Te acepto un café

-¿Quieres ir a un Starbucks?

-¿Que? No. Me gusta el café, pero no soy de esas que se lo beben con nombres extraños. Café es café. Punto.

-Me agrada tu forma de pensar

-¿Eso es un cumplido?

-No lo sé. Solo que tu analogía me pareció interesante.

-Bueno- me separé de él

-Vamos quiero ver esos ojitos verdes de nuevo. No los marrones.- dijo poniendo un mechón de pelo tras mi oreja

-No creo que sonría por un rato. Connor, he peleado con mi mejor amiga. Mi única amiga, no estoy de ánimo para sonreír.