Obsesión||Calum Hood

41. Preparativos

Narra Bella:

Odiaba levantarme temprano.
Simplemente no me gustaba.

Pero hoy sin embargo lo tenía que hacer.
Tenía una cita en Les Trois Soeurs Bridal.
Mi futura suegra me llevaría y juntas escogeríamos un vestido de novia.

Estaba nerviosa y emocionada a la vez. Yo no sabía mucho de vestidos pero bueno, siempre hay una primera vez.

Mire a mi lado para levantar a Calum pero el no estaba. Eso era extraño ya que siempre nos levantábamos juntos. Donde se abra metido tan temprano?

Luego de darme un baño y prepararme baje para tomar el desayuno.

Lydia una de las sirvientas ya me lo había servido y junto con el había una nota.

La tome y empece a leerla. Era de Calum.

Hoy me llamaron de la empresa muy temprano y me tuve que ir. Lamento no estar contigo esta mañana pero para recompensártelo te tengo una sorpresa muy especial.

Espero que tengas un buen día.

Te amo

Una sorpresa?
El nunca me daba sorpresas ni nada por el estilo.
Que estará tramando?

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Mi futura suegra y yo llegamos aproximadamente a las 8 de la mañana al lugar.

A leguas se veía que el lugar era muy fino y costoso.
Los vestidos eran hermosos y delicados.

Rápido que llegamos nos llevaron a un cuarto donde habían unos asientos para los acompañantes de la novia.
Habían seis asientos y eran innecesarios ya que solo me acompañaba Joy.

:Bienvenidas -sonrío la ayudante- Tu debes ser Bella, verdad? -se dirigió hacia mi

:Si, ella es Bella -contestó por mi Joy- Pronto la Sra. Hood  -dijo emociónada

:Bueno pues lo primero es felicitarla por su compromiso y lo segundo es preguntarle qué estilo esta buscando para su boda?

:Pues yo quisiera un vestido sencillo pero muy bonito

:Pero como vas a escoger un vestido sencillo?   -dijo Joy-  El vestido tiene que ser muy especial y extravagante

:No lo sé Joy; Yo soy una chica sencilla y no me gusta llamar mucho la atención

:Pero es tu boda! -sonrió- Solo pasa una vez

:Bueno entonces me probare vestidos sencillos y otros extravagante

:Esa es una buena idea pero ahora ve y empieza a probarte algunos!

Le hice caso a Joy y me fui con Amelia mi ayudante a buscar los vestidos.

Pronto entramos al probador donde ella me busco varios vestidos.

Algunos eran blancos y otros eran color blush. Unos tenían lazos y otros pequeños diamantes.
Varios eran puffy al estilo de princesa y otros eran al estilo de sirena.

El primero que elegí era estilo de princesa con una falda grande y diamantes.
Era muy llamativo para mi pero creo que a Joy le gustara.

Amelia me ayudo y salí del cuarto para encontrarme con Joy pero me lleve una sorpresa.

Joy no estaba sola! Estaba con mi madre y con Natalia! Que esta pasando aquí?

Tan pronto todas ellas me vieron empezaron a sonreír.

:Mi niña -dijo mi madre para rápido abrazarme

Luego vino Natalia y se unió al abrazo.

:Que hacen aquí? -pregunte emocionada

:Pues Calum, tu prometido -remarcó la palabra Natalia- Nos llamo y nos contó sobre como ustedes se encontraron en Cancún y como después se volvieron a enamorar y ahora se van a casar! -se emociono

Calum les había mentido.
El les había dicho que nos habíamos encontrado en mis vacaciones cuando en realidad el me había llevado la fuerza.
Y que me volví a enamorar de él tan fácilmente cuando en realidad para mi todo al principio fue un infierno.

:Sí, Calum te preparo esta sorpresa -sonrió mi madre

Esta era la sorpresa que Calum me tenía y en verdad me gustaba. En realidad me encantaba.
Extrañaba mucho a mis padres y a Natalia.

Por lo menos ahora estaría con los seres que mas quería el día de mi boda.

:Nosotras tres te ayudaremos a escoger tu vestido de novia -sonrió Joy

:Sí! Y
por lo que veo ya vamos a empezar -dijo Naty

Las tres me miraban detenidamente. Inspeccionando el vestido desde su comienzo hasta su final.

:Yo pienso que no es el adecuado para ti -dijo Natalia-  Tu eres mas sencilla

A mi madre y a Joy no les gustó mucho también así que fui a probarme otro.

El segundo vestido era uno color blush con un lazo hermoso. Este se pegaba a mis curvas y tenía un ligero escote.

Cuando salí y lo mostré a ninguna de las tres le gusto ya que no era blanco y según mi madre y Joy una señorita pura y decente se debía casar de blanco.

Así seguí probándome vestidos hasta que llegue al número 9.
Este era blanco sin tirantes, con un poco de encaje y un cinturón bonito en mi cadera;
Y era solo un poco pegado a mis curvas con diamantes.

Cuando me mire al espejo sentí una sensación dentro de mi.
Como unas mariposas en mi estomago.

Salí y cuando les mostré el vestido ellas se asombraron. De verdad les había gustado el vestido.

La ayudante me puso un velo y me peino un poco. Cuando por fin vi el resultado final lo supe.
Este era el vestido indicado y también lo podía ver en la cara de mi madre, Joy y Naty.

Había encontrado el vestido perfecto y muy pronto me casaría con mi Calum.