Bajo su espectro

Capítulo XX

¡Hola a todas! ¿Vieron a Tom en la SDCC? Sin comentarios... Ese día me sentí tan inspirada que me puse a escribir un capítulo que leerán mucho después, espero que les guste mucho el de hoy y no sé si vaya muy lenta la historia pero creo que es así, ya veremos cómo lo soluciono para que no les aburra. Como sea gracias por su apoyo <3 besos

Capítulo XX

-¡¿Contarme qué?! Usted no sabe nada

-Sé mucho más que tú. A lo que Gael ha hecho alrededor de todos estos años no se le puede llamar de otra forma que maldad, presume de amar lo que hace cuando simplemente lo hizo porque sabía que eso solo le sumaría más a la herencia millonaria de dos generaciones atrás, se ha metido con personas inocentes... Dime, ¿alguna vez oíste el escándalo de la Whitechapel? ¿De los incendios y desalojos de esas avenidas? Gael es el encargado de la pista de carreras que construirá ahí cerca, Gael fue quien incendió todos esos comercios ambulantes porque no encontró otra forma de desalojar el lugar, otra forma -legal- quiero decir –Me miró fijamente, su mirada tenía fuego –Aunque claro, eso nunca se comprobó –Se encogió de hombros -Gael Legendre y tu padre trabajaron juntos y felices durante muchos años, tu padre maquillaba presupuestos para él y llegaron a ser cómplices hasta que...

-¡Cállese! –Lo señalé con rabia –No quiero oírlo hablar de eso

-Fueron cómplices hasta que tu padre intentó estafarlo –Ignoró mi amenaza –sí, Sigyn así fue pero la culpa no solo fue suya, no es que Gael no lo mereciera. ¿Sabes de todas las mujeres que Gael corrió de su empresa solo porque se involucraron con él? ¿Tienes idea de cómo trataba a las mujeres con las que salía? Creo que no. Tampoco creo que sepas sobre los miles de terrenos y propiedades que le ha quitado a las personas que le deben o que simplemente aplazan sus deudas con él, no tienes idea. Y sobre todo la razón por la que estoy aquí, es porque la última de sus hazañas fue hacia mí, contrató a una prostituta para que creara toda una aventura conmigo y después lo hizo tan verídico que mi esposa lo creyó todo, ¡se metió con mi familia entera! –Sus ojos descansaron en el suelo por primera vez y de nuevo los alzó hacia mí –Pero bueno, ¿qué podemos esperar? Si después de haber sido heredado dejó a su familia en Manchester y regresó a Londres para no volver a verlos. La maldad de Gael no descansa, así como no descansó hasta enterrar mi campaña con sus mentiras y no se cansó hasta que me vio perder y de la forma más patética que puede existir. Te dejo todas estas notas y estas revistas de años pasados –Me hizo tomar los papeles casi a la fuerza, yo estaba perpleja –Echa un vistazo, todas ellas tienen notas sobre él y sobre lo que te he contado. Creo que Gael no merece a una mujer tan bonita y decente como tú, su nombre está sucio y eso todo el mundo lo sabe pero por supuesto que es un Legendre y nadie va a poder contra él.

-Usted miente –apenas pude pronunciar pero solo fue porque no tenía más que decir

-Si crees que es así, entonces deberías hablar con él y decirle quién estuvo aquí –Sonrió –Ya sé el camino –Caminó hacia la puerta y salió.

Me senté en el sofá con todos los recortes y revistas en las manos, empecé a hojearlos uno a uno y en todos había una nota de Gael como ese hombre había dicho, hablaban de trágicos incendios y desalojos, de demoliciones de edificios de valor histórico entre otras cosas pero lo que más me conmovió fue a toda la gente a la que supuestamente le había robado y abandonado a su suerte. Además de involucrar a Gael en todos esos sucesos, había entrevistas con él en las que negaba tener algo que ver y lo peor es que había gente importante que había presentado cargos en su contra pero tal parecía que él sabía cómo salirse de todos esos problemas.

Se suponía que si lo amaba creería en él y eso no interferiría entre nosotros y por supuesto que lo hacía, no había un día en que no lo amara y en que no pensara en lo fácil que sería dar todo por él pero algo dentro de mí me decía que era cierto, poco a poco me daba cuenta de que no era un buen hombre y mucho menos un buen ser humano.