✓Manifold | Riwoong

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-¿Qué mierda dijiste?- La sangre de Gunwook ardió en celos, a pesar de estar todo golpeado se abalanzó sobre el otro alfa-¿Enamorado? No me hagas reír, sólo eres un loquito con más problemas mentales que todos aquí, tú ni siquiera podrías darle a mi omega la vida que se merece.

-Yo no le hago daño, yo si lo amo realmente y aunque te duela, ambos sabemos que hay una probabilidad que él también esté enamorado de mi- Jiwoong le escupió sangre en la cara- Admítelo, no te sigas engañando, lo de ustedes dos es costumbre.

-¿Quieres saber por que estoy tan seguro que Ricky no siente nada por ti?- Susurró Gunwook con burla, sabiendo que todo era mentira- Por que cuando estuve en celo "olvidé" tomar las malditas píldoras y me lo cogí un sin fín de veces en todas partes de mi casa, puede que mi omega esté esperando un cachorrito mío, mi heredero se ha de estar formando en su barriguita en éste momento, ni modo Park, las cosas no son como tú quieres.

Jiwoong se abalanzó contra Gunwook, lo obligó a mostrar su cuello y comenzó a hacer el pasatiempo favorito de su última personalidad: dejar a su víctima sin la piel del cuello para luego degollarlo y comerse la carne en señal de victoria.

Gunwook intentó detenerlo, pero el coraje cegó a Jiwoong, ese imbécil no se podía quedar con Ricky, él era su omega, solo suyo y se encargaría de quitar cada una de las piedras que intervenían en su camino.

Gunwook se desesperó al sentir su pellejo ser levantado por los enormes colmillos del otro alfa, intentó arañarlo, pero Jiwoong lo tenía presionado bajo su dotado cuerpo.

-Kim, no cometas una locura, puedes pudrirte aquí, Ricky te va a odiar de por vida, es mentira lo del cachorro, yo no las tomé, pero él si- Tanto era el desespero de Gunwook que buscó como convencerlo al sentir el insoportable ardor de ser despellejado vivo.

Jiwoong seguía sin reaccionar, estaba completamente cegado por el odio, rencor, los celos y sobretodo por una palabra clave que caracterizaba a su tercera personalidad: el miedo.

La lógica de todo esto se trata del dichoso miedo.

Algo que sólo Jiwoong sabía realmente y era la respuesta a todos sus problemas mentales.

Quizás.

-Kim, duele como la mierda- Susurró Gunwook con dificultad debido a la sangre perdida- Déjate de tonterias, ambos sabemos que aunque me mates nunca podrás estar con Ricky.

-Mío...-Susurró Jiwoong arrancando un pedazo de piel de su cuello- Ricky, mío, mi omega, es sólo mío.

-¡Jiwoong!- Escuchó la voz de su omega fuera de la habitación-¡No lo hagas! Por favor te lo pido, no lo hagas.

-Hazle caso a mi omega, sabes que él te odiara si me matas, quieras o no, lo he marcado temporalmente y lo sentirá- Gunwook habló despacio.

-Quédate ahí, muñeco, no quiero que veas esto-Dijo mirando los ojitos Ilorosos de Ricky-Lo hago por nosotros.

-¿Y así quieres que te ame?- Susurró el otro alfa- Adelante, acaba con mi vida y que ricky te odie para siempre.

-No te pedi tu opinión, lo hago por protegerlo a él-Jiwoong hizo caso omiso a los llamados del llorón omega- Ricky, quédate ahí, mi amor.

-Estas demente —Gunwook intento desesperadamente de quitar sus filosos dientes de su carne-Ricky nunca te amará, es mi omega.

-Mío, mío, mío, mío, él es solo MÍO, carajo, mío, mío, Ricky es mio...- Jiwoong mordisqueo cerca de la yugular del otro alfa.

Gyuvin y Ricky veían la escena con temor, los guardias venían aún en camino y Jiwoong estaba a punto de matar a Gunwook a mordidas.

-Lo va a matar, tengo que hacer algo- Ricky se armó de valor y avanzó hasta la puerta de la habitación-Deja que yo me encargue.