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-¿Qué demonios te ocurre Kim?- Ni-ki intentó quitárselo de encima, pero era obvio que Jiwoong le ganaba mil veces en fuerza.

Todos los paciente miraban con miedo la escena, ninguno se metió, cada uno de los presentes conocía a la perfección las personalidades de Jiwoong y más cuando alguien lo hacía enojar.

-¡Mío! No vuelvas a dejar tu asqueroso olor en él, das asco-Lo golpeó en el rostro una y otra vez.

Sintió a su lobo susurrarle que no parara, que golpeara la puta cara del medicucho ese, que no se detuviera por nada del mundo, ése no se trataba de sus dos personalidades experimentadas, sintió a un lobo desconocido susurrarle que acabará con el doctor, que le mordiera el cuello, sentía esa enorme necesidad de desmontar todo el cuerpo del doctor pedazo a pedazo, hacerlo sufrir hasta que rogara porque lo matara.

-¡Jiwoong! ¡Detente por favor!- El voz de su omega se escuchaba lejana, su lobo no le permitió prestarle atención por el momento, si quería estar con su omega debía deshacerse de todos los inconvenientes que lo rodeaban.

Empezando por ese doctor que intentó aprovecharse de la inocencia del omega.

Miró el cuerpo ensangrentado del doctor Nishimura, bajo su cuerpo.

-¿Acaso no te han enseñado a no tocar a omegas ajenos?- Le susurró mostrando sus colmillos, demasiado cerca de su cuello-Eres un asqueroso, maldito ladrón de omegas.

-¿De qué demonios hablas? ¿Estás demente?- Ni-ki le escupió sangre en la cara, enojando más a Jiwoong.

-Hijo de puta-Jiwoong sacó sus filosos colmillos, a punto de dejar marcado de por vida al otro alfa.

-¡Detente Kim Jiwoong!- Muchos guardias lo rodearon con armas cargadas en sedantes en las manos.

-No creas que te salvaste, iré detrás de ti, te cazaré lentamente, enloquecerás tanto que me pedirás que acabe con tu sucia y miserable vida - Le susurró al doctor con una sonrisa en los labios, miró a su omega y levantó las manos en señal de rendición.

-No aprendes nunca Kim- Uno de los guardias más grandes le tomó los brazos con brusquedad y lo esposo-Te llevaremos al mismo lugar de donde nunca debiste salir.

-Que bueno, así no tendré que ver la asquerosa cara de ese infeliz-Susurró sin quitar su típica sonrisa de cabrón.

-Ya lo veremos- El guardia lo retó con la mirada.

-Quiero que lo dejen dos semanas completamente aislado, sólo abrirán su puerta para dejar comida y sus pastillas- Ordenó con voz de alfa Ni-ki a los guardias.

-Me temo que eso es imposible doctor Nishimura, eso usted lo debe saber perfectamente, si lo aislamos será aún peor, al privarlo del contacto con todos en especial con su psiquiatra puede estresar a su lobo y ya conoce las consecuencias para ello, doctor –Kim Gyuvin habló seriamente, llamando la atención de todos los guardias presentes y hasta la del mismo Jiwoong - Necesitamos

que los pacientes se sientan seguros aquí, no que tengan miedo y sean castigados con crueldad, eso genera más traumas en ellos.

Ni-ki se le quedó mirando enojado, pero no podía contradecir a el enfermero Gyuvin esta encargado de la administración del hospital, el era superior en puesto a él.

-Llévenlo al pozo, lo quiero con el doble de tranquilizante del normal, pobre del que le ponga una mano encima- Ordenó el beta a los guardias, los cuales asistieron y obedecieron-¿Estás bien?

Ricky asintió y se lanzó a los brazos de el beta que lo recibieron con cariño.

-Tranquilo, cachorro, todo está bien- Lo abrazó de manera parternal-¿Hay algo que pueda hacer por ti, Ricky-yah? -preocupado al pelirrubio.

-No le digas nada de esto a Gunwook, por favor-Rogó Ricky.

-No te preocupes por ello, Ricky-yah, no le diré nada y me encargaré de que esto no quede registrado- Gyuvin le acarició la espalda, escuchando un ronroneo por parte del omega-¿Alguna otra cosa que desees?

Ricky asintió completamente seguro de la loca idea que había pasado por su mente.

-¿Estás seguro de ello? - Preguntó el beta mirándolo a los ojos al oír dicha petición, pelirrubio asintió decidido- No soy nadie para negar algo, de acuerdo.

Y así fue como el omega pudo tranquilizarse un poco.

Ricky acarició el rostro doblemente golpeado del alfa.

Y es que, luego del ataque de Jiwoong al doctor Nishimura, los guardias de Ni-ki lo detuvieron, el doctor estaba demasiado golpeado debido a la brutalidad del alfa, los guardias llevaron a Jiwoong al pozo, donde lo golpearon innumerables veces por cometer una falta a pesar de que Gyuvin les prohibió dicha acción, Ni-ki logró chantajear a los hombres para que le dieran una lección a Jiwoong, ni siquiera intentó defenderse, tenía la mirada fija en Ricky, quien lloraba al ver la crueldad con la que lo hacían. El omega sintió cada golpe del alfa como si se los estuvieran dando a él. Luego de aquello le rogó a Gyuvin que lo dejaran ver el estado del alfa, al principio el beta se negó porque lo creyó peligroso, pero no pudo con la mirada del omega y le accedió entrar al pozo en secreto.

-Ibas demasiado bien ¿Por qué lo hiciste?- Pasó su mano por la mejilla hinchada- Mira como quedaste, lograste golpear al doctor Nishimura, pero los guardias te golpearon el doble ¿Por qué, alfa? Ahora estarás una semana en este feo lugar de nuevo.

No supo por qué rayos tenía la enorme necesidad de quedarse a cuidar al alfa en esa habitación en pésimas condiciones, su lobo estaba demasiado triste y lo sentía aullar de dolor al ver el rostro amoratado del alfa. Eso no era para nada normal.

Jiwoong tenía una expresión para nada relajada en el rostro a pesar de estar sedado con el doble de droga de normal.

-¿Quién eres realmente Kim Jiwoong? ¿Por qué actuaste de esa manera si no somos nada? Y lo más importante ¿Por qué tengo la necesidad de seguir junto a ti luego de todo esto?... - Ricky se acomodó a como pudo a su lado en la cama, pegándose a su pecho, el olor del alfa no era muy potente, pero aún lo sentía y eso evitó que se preocupara más de lo que ya estaba.

-¿Por qué el olor de Gunwook ya no me relaja más, pero el tuyo si? Demonios, estoy demasiado confundido por ello... - Ricky frotó su nariz en el cuello del alfa, intentando lograr calmar sus nervios-Heriste a un doctor y no sé qué harán contigo... , tengo mucho miedo de que algo te pase.

Ricky se quitó los zapatos junto a la incómoda bata blanca la cual colocó en la baranda de la cama, se volvió a recostar casi encima del alfa y tapó ambos cuerpos con una manta blanca.

Las lágrimas bañaban su angelical rostro, luciendo más vulnerable de lo normal.

-No sabes lo feo que sentí al no poder hacer nada cuando te golpearon, una sensación espantosa recorrió mi ser por cada uno de los golpes en tu cuerpo, quise enfurecerme contigo, pero simplemente no pude- Ricky acercó sus labios a los del alfa y los besó.

Lo más impresionante es que el alfa le correspondió el beso, atrayéndolo a su cuerpo.

-Con que estés aquí me basta... - Susurró contra sus labios- Gracias por no dejarme, mi hermoso omega. 

✓Manifold | RiwoongWhere stories live. Discover now