Naruto - El Viaje Oscuro

10 - Esparcir ideas erróneas

Descargo de responsabilidad: No soy dueño de Naruto

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Capítulo 10

La casa de Shimura-san era sombría. Parecía nueva, como si la hubieran comprado recientemente. Las paredes grises de piedra y el tejado inclinado de color marrón oscuro le daban un aire terrenal sin brillo que la hacía entonar perfectamente con la charla habitual del sensei de Naruto. El jardín estaba recortado y cuidado, y un camino empedrado allanaba el camino desde la valla hasta la puerta. La puerta de madera tenía un círculo de latón como aldaba, mientras que las ventanas eran todas del tipo asegurado, es decir, que no se podían abrir del todo.

Lo único interesante era una estatua en el patio trasero, que representaba una especie de mezcla entre un oso hormiguero y un jabalí sin colmillos, si Naruto tenía que adivinar. No quería entrometerse en lo que la criatura pretendía representar, y puesto que ya estaba entrometiéndose en la casa de otro shinobi, no quería ser una molestia.

Aun así, el hecho de que el viejo shinobi lo entrenara literalmente en Kenjutsu en casa ya estaba dando algunos resultados, si se podía decir así. Ahora era capaz de desenvainar su espada "lo bastante rápido como para merecer el rango de Genin" o algo así. Era un gran elogio, al menos por sus conocimientos sobre el manejo de los cumplidos por parte de Shimura.

Aquella mañana, sus ojos se posaron en el rostro arrugado del Hokage mientras el anciano mordía su pipa, mientras se apresuraba a cumplir las misiones asignadas. La ventana de la habitación estaba abierta, y una brisa fresca se instalaba en ella, mostrando el comienzo del mes de septiembre.

"¿Hokage-sama?" empezó Aoba-sensei, "mi equipo está listo para un rango C".

Los tres parpadearon, sus ojos se movieron un segundo hacia su sensei, antes de volverse hacia la Hokage, que se limitó a resoplar y asentir.

"¿Iruka?", se volvió hacia el Chuunin-sensei, que asintió y se escabulló entre el montón.

"Tenemos dos, Hokage-sama. ¿Misión de escolta a Onda o vigilar una caravana de mercaderes a la ciudad de Tanzaku?".

"La misión de escolta sería preferible", comentó Aoba con calma. "Tanzaku está más lejos y es temporada de bandidos, con la llegada de los meses fríos se están preparando para almacenar suministros. Mis genin necesitan experiencia, pero hay una diferencia entre desafiarlos e intentar asesinarlos. ¿Quién puso esa misión en una lista de rango C en esta época del año?".

"Creo que fue Mizuki", murmuró Iruka, abriendo mucho los ojos ante las palabras del Jounin. Los tres genin se limitaron a esperar en silencio, y Sakura apenas contuvo su entusiasmo por ir a una misión de rango C.

"Adviértele que la próxima vez vuelva a comprobar sus pergaminos enviados para el registro de rangos", señaló la Hokage, antes de reconocer al Equipo Trece para la misión de escolta.

"Vuestro cliente será avisado y os esperará frente a las puertas de Konoha dentro de dos horas. La misión apenas debería tener más que algún encuentro ocasional, si es que lo tiene. El cliente transporta mediante pergaminos sellados madera y material de construcción comprado en los almacenes de Konoha, por lo que le ayudarás a desembalar una vez llegado a destino. La misión no está clasificada como urgente: como tal, puede anularse en caso de que haya shinobi heridos, mutilados o muertos dentro de tu equipo. Si tal cosa ocurriera, por supuesto no se te pagará. Si te encuentras con un ninja enemigo desaparecido, no debes enfrentarte a él a menos que te provoque: eres un genin, no un anbu especializado. Si os encontráis con shinobi extranjeros, Aoba Yamashiro está autorizado a informar siguiendo el procedimiento y nada más. Si alguno de vosotros va en contra de las palabras antes mencionadas, se os pondrá a prueba y os enfrentaréis a una investigación para determinar las razones de vuestras acciones. Mantendréis una fachada fría pero respetable con el cliente en todo momento. No hablarás de las técnicas de Konoha, no entrenarás en estilos exclusivos de Konoha ni mencionarás las defensas de Konoha mientras estés fuera de la aldea y al alcance del oído del cliente o de personas extranjeras, a menos que tu oficial al mando te conceda permiso."