OO6.

728 98 12
                                    

JungKook y Sebin entran al consultorio que el muchacho ocupa seis días consecutivos. Ella puede sentir el aroma agradable que este desprende, pues es la dulce colonia de él y ello le hace sentirse en su zona de confort.

Dando una mirada rápida, puede notar como algunas cosas han cambiado, aunque otras no tanto. Pero aún sigue conservando el aura del mismísimo Jeon JungKook.

— Por favor, toma asiento. — La dulce voz de JungKook atrae su atención. Por lo que ella asiente y sin de ir una palabra, camina con lentitud hasta el asiento frente al escritorio y cuando se sienta, se cruza de piernas y espera a que vuelva a hablar.

Por otra parte, él se apoya sobre el escritorio quedando frente a Sebin, segundos después cruza sus pies como sus brazos de igual forma. Ella le da una mirada entera a su cuerpo y JungKook nota como sus ojos frenan en su parte baja, por lo que el pelinegro sonríe con picardía.

— Lo haces a propósito, ¿Verdad?— Inquiere manteniendo su compostura.

—¿Disculpe?— Haciéndose la total confundida, pregunta frunciendo su ceño.

— Eso, lo haces a propósito. — Vuelve a repetir. JungKook despeina un poco sus, ahora, largos y ondulados cabellos para luego volver a mirarle con intensidad. — Provocarme, me provocas.

—¿Yo lo provoco, Doctor Jeon?— Auto señalándose, finge sorpresa.

— Sí, claramente que sí. — Asiente convencido. —¿O acaso tu mano ha ido a parar en mi muslo por obra del Señor?— Sebin suelta una risa y niega cuando él lo dice tan serio. — Admítelo, me provocas.

Con una valentía increíble, Sebin se levanta de su asiento y solo hace falta unos pocos centímetros para que su cuerpo se encuentre casi pegado al de JungKook. Haciendo contacto visual, puede percibir su aliento caliente chocar contra su rostro, él la mira tan profundamente que se siente desfallecer.

—¿Quiere saber si lo provoco, Doctor Jeon?— Susurra acercándose hasta el punto de pegar sus pechos con el de JungKook. Él solo asiente embobado. — Sí, lo provoco y me encanta hacerlo. — Admite.

Las masculinas manos de JungKook van a la cintura de Sebin y sin dejarle un mínimo espacio al aire, acerca un poco más su rostro a tal cosa de caso rozar sus labios con los de ella.

— Estás jugando con fuego, Sebin. — Murmura con su voz increíblemente ronca y extasiada. —¿Sabes que puedes quemarte, verdad?

— Creo que no seré la primera en quemarme, Doctor. — Colocando sus manos en el cuello de JungKook, acaricia éste ocasionándole escalofríos. —¿Ve? Con solo tocarle usted cede a mí.

La tensión podía cortarse con un soplido, la atmósfera de tornó de repente, muy densa y las ganas de ambos se podían palpar. JungKook mira con deseos los labios de Sebin, los nota húmedos, sus instintos piden con ansías probarlos una vez más.

¡Joder!

— Porque me vuelves loco, Sebin. — Susurra acercándose cada vez más.

Ella entiende lo que él está buscando y... Sí, puede obtener un poco de lo que también ansío por mucho tiempo.

— Si me va a besar, hágalo ahora.

Eso es el incentivo que JungKook necesita para cortar la distancia entre ambos y crear una catarsis de emociones y sensaciones entre ambos.

Uniendo sus labios, JungKook y Sebin no demoran en volverse a reconocer. Su beso no es tierno, su beso es de pasión, deseo, añoranza y excitación pura.

Buscando más contacto, JungKook la aprisiona aún más contra su cuerpo y en pocos segundos, ella se encuentra ahora sentada sobre el escritorio del pelinegro y él dando la espalda al resto del consultorio.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Mar 19 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Hey, Doctor Jeon!Where stories live. Discover now