-No es sólo por él, es por mí- Susurró Kim - Te contaré todo, pero primero quiero saber si cuento con tu ayuda. Quiero ayudarte con el reto, pero como ya te dije debemos trabajar juntos-

El Alfa lo pensó nuevamente teniendo un gran debate mental.

No quería la marca de otro Alfa en su cuello, a no ser que sea la marca de JungKook. Por el pelinegro dejaría su estatus sin pensarlo y sin importarle lo que los demás piensen.

Si llegaba a obtener su marca seguramente abandonaría al Omega mudo ¿verdad?

¿O estaba divagando?

Suspiró pesado y refregó sus ojos -Te escucho- Respondió y observó la enorme sonrisa del mayor quién también comenzó a contarle su plan paso a paso.

[....]

-No me faltes el respeto- Pidió Jin serio sin verle la gracia a las palabras del Alfa - Y el "suegrito" puedes metértelo donde no te da el sol- Terminó casi en un gruñido.

Tae le tomó la mano a su papi para calmarlo. No le agradaba que le hablara así a su pareja, los dos debían respetarse mutuamente.

El progenitor se sintió un poco mejor por el tacto que le otorgaba su hijo y esbozó una pequeñísima sonrisa.

Acto seguido se sentó en el medio obligándolos a que se separen.

Escuchó un gruñido por parte del Alfa Jeon y se sintió satisfecho de haberlo molestado.

-¿Por qué no hay otros mayores aquí?¿Dónde están tus padres? - Preguntó curioso. Una mansión tan enorme no podían manejarla dos adolescentes. Necesitaba saber todo.

Tae sabía la respuesta porqué en una de sus tantas "charlas" JungKook le había contado todo.

Pero no fue el Alfa quién respondió esa pregunta, sino el Omega dominante.

-A nuestros padres les importamos una mierda- Ya había quitado sus manitos de los oídos,  pues la clase sexual acabó, por suerte para todos - A veces pasan meses y no vienen. Sólo nos comunicamos por videollamadas, una vez a la semana o cuando tienen tiempo. Ahora se encuentran en su mansión en Suiza-

Nam sintió una leve incomodidad. Sus alumnos estaban, literalmente, cuidándose por si solos y no pudo evitar parecerle demasiado maduro de su parte. Pues JiMin tenía dieciséis años y JungKook diecisiete.

Seok estaba anonadado.

¿Qué clase de padres dejan a sus cachorros solos?

-¿Desde cuándo sucede esto?- Habló bajito sin saber muy bien hasta donde debía averiguar, pues era un tema bastante complicado y sensible.

-Desde que nací- Respondió esta vez JungKook-Por supuesto, antes teníamos niñeras que cuidaban de nosotros pero cuando llegó mi primer celo yo me hice cargo de mi hogar y de mi hermano- El pelinegro tenía un semblante demasiado serio y miraba fijamente a SeokJin. Le dolía que sus padres no los quisieran pero había logrado vivir de esa manera, sin saber lo que era un abrazo paternal o unas palabras de aliento -Ambos tenemos cuentas bancarias donde nuestros progenitores depositan dinero todos los meses. JiMin suele hacer las compras y una vez cada dos semanas viene un servicio de limpieza -

TaeHyung, sintiendo a través del lazo que JungKook se estaba poniendo un poco triste, se levantó del lado de su papi y fue a sentarse sobre los muslos de su Alfa quién le envolvió sus manos en la cintura y llevó su nariz al cuello del menor para calmarse y sentirse acompañado. Por supuesto el aroma del rubio actuó rápidamente.

Seok miraba la escena con mucha atención. No sintió molestia porque claramente lo que transmitían los menores era un claro ejemplo de amor y cariño.

Nunca había visto a su pequeño entregarse de esa forma, de cierta manera le alegraba.

Pero aún se le hacía muy difícil confiar y no pudo evitar llevar su mirada ahora al Alfa NamJoon, quién a su vez lo miraba también.

Entonces...¿Las parejas destinadas si existen?

Bueno, todavía no iba a aceptar eso, necesitaba más pruebas.

Suspiró pesado, se levantó del sillón y caminó de un lado a otro mientras pensaba.

Debía llegar a un acuerdo con ambos, como se lo había prometido minutos atrás e el cuarto.

La idea era conocer mejor al Alfa y luego de unas preguntas iba a decirle que tome su bolso con ropa y vaya a vivir con ellos.

Pero ahora no podía hacer eso.

El Omega pelinegro, hermano de JungKook, también dependía de cierta forma del Alfa. No podía alejarlo del hermano menor porque el chico quedaría solo en esa enorme mansión.

Pero estaba conciente de que cuando hay una marca en medio de una pareja, esta debe vivir junta ya que quieren estar constantemente juntos. Sobre todo los primeros años.

No pudo evitar que unas lagrimitas se juntaran en sus ojos, pues la única solución que veía era que TaeHyung debía vivir allí en la mansión, pero alejado de él.

Y no, no podía. Los adolescentes necesitaban un supervisor.

¿Qué debía hacer, entonces?

Su apartamento era muy pequeño para que JiMin también vaya con ellos.

Sintió el aroma del director y sin pensarlo mucho se dejó envolver por los fuertes brazos del mayor.

-¿En qué piensas?- le preguntó muy bajito para que los demás en la sala no escucharan.

Seok no podía creer lo que estaba haciendo. Justamente ahora estaba refregando su rostro y cuello en el pecho del Alfa, marcándolo con su propio aroma. No podía negar que le gustaba lo que hacía, quería que el Alfa tenga su olor para que ningún Omega se acerque.

¿Había enloquecido?

¿Justo ahora debía hacer eso?

-Tres adolescentes en mi pequeño apartamento...- Comenzó y casi jadea cuando NamJoon lo apretó de la cintura- No puedo, no hay lugar suficiente. No querrán cambiar su mansión por la pocilga donde vivo pero tampoco pueden vivir los tres solos aquí. No sé que hacer-

JungKook y TaeHyung habían comenzado a besarse, así que no prestaban atención a los mayores. Pero JiMin si escuchaba por más que hablaran despacito.

Él no podía irse de la mansión de ninguna manera ya que allí tenía el piano y con aquél instrumento tenía la excusa perfecta para ver al Alfa Min. Pero sus deseos no eran estar lejos de su tonto hermano. No tenían la mejor relación del mundo, pero siempre habían estado el uno para el otro, además el mayor estaba cambiando y ahora era alguien agradable.

"Maldito JungKook tuviste que marcar justo ahora a TaeHyung.."

Pensó el menor de los Jeon mientras miraba a la pareja besarse como si estuviesen solos.

Por suerte Seok estaba ocupado en otra cosa y no les prestaba atención.

-Bueno, mi casa es bastante grande- Informó el director con una sonrisa al notar lo cariñoso que se había puesto Seok de un momento a otro- No tanto como esta, pero con las habitaciones suficientes. Sólo deberíamos hablar con los padres de JiMin y JungKook-






























Para escribir el capítulo traté de enfocarme e imaginarme lo que haría un padre en esa situación. Por supuesto que sería perfecto en un fanfic dónde los protagonistas vivan solos y puedan tener sexo casi todos los días. Pero recuerden que Seok adora a TaeHyung y se le va a hacer difícil soltarlo por completo. También sabemos que tienen su instinto animal y que a veces pueden actuar de manera en que no se controlan. TaeHyung y JiMin tienen dieciséis, son chicos y trato de que Seok y Nam actúen como los adultos que son. Están buscándole una solución a todo.

Por supuesto que va a haber más escenas de sexo entre el KookV pero me pareció lo más lógico.

También va a haber mucho del YoonMin, no se preocupen ☺

YoonGi no va a quedar de lado y puedo hacer un pequeñito spoiler en que el YoonMin será inseparable más rápido de lo que creen.

Espero que les haya gustado el capítulo ☘️

INOCENTE [KOOKV]Onde as histórias ganham vida. Descobre agora