: #07 :

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— Te vez tan hermosa, mi niña.— Alabó la Meredith Hofferson, la mamá de Astrid. Al ver a la chica bajar las escaleras de la casa con un hermoso vestido.

— Mamá, Astrid siempre esta linda. Solo que hoy le hecho un poco más de ganitas.— Bromeó Aroon y su hemana lo fulminó con la mirada.

— Mucha preparación para una cena de negocios dirá yo. Heather estaba muy emocionada.— Suspiró y se vió en el espejo.

Tenía un hermoso vestido negro, que no era tan largo, pero tan poco tan corto y tenía brillitos en la tela. Tenía una máquillaje bastante simple y ni tan cargado, de eso se encargó ella y su cabello rubio estaba recojido en una cola alta.

— Me hace acordar cuándo fue el baile de graduación.— Mencionó su madre y los hermanos fruncieron el ceño.

— Mamá, yo no fui al baile de graduación, fue Heather.— Corrigió y su madre abrió grande los ojos.

— Ay, la edad.— Es excuso.

— ¿Haddock vendrá por ti?— La voz de Ragnar, su padre, apareció en la sala.

— Sí, yo intenté convencerlo de que yo misma me iría, sola pero fue un caso perdido. No demora en llegar.

— De acuerdo, no quiero que estén en portadas de revistas mañana en la mañana.— Alertó.

— Nada de eso.— Negó segura.

— Astrid.— Su nana aparecio en la instancia— El señor Haddock ya está aquí.

— Gracias nana.— Se vio en el espejo y tomó sus cosas.

— Y no fue capaz de entrar.— Refuño Ragnar y su esposa le pegó en el brazo.

— Ni que fuera una cita.— Bufó y se dirigió a la puerta— No sé a que horas llegó, los llamó si pasa algo.

— ¡Ve a hacer plata!— Le gritó su hermano.

— ¡Suerte, mi niña!— Le siguió su madre.

Astrid salió de la casa y se colocó su sacó ya que la noche estaba algo fría, apesar de ser verano. Reconoció el auto de Hiccup y le tocó el vidrio apenas llegó a él.

— Ay ya llegaste.— Hiccup se bajó de su auto y la miró.

Se había quedado totalmente hipnotizado por los bellos ojos azules profundos que de noche se veían aún más perfectos. Y ni hablar de su vestuario, se veía espectacular.

— Te vez… Magnífica.— Soltó sin aliento.

— Y tú… un poco más arreglado.— Lo señaló. Ella también no había pasado desapercibido lo bien que se veía, ese traje le quedaba bastante bien, se notaba bastante que no lo usaba con regularidad.

Hiccup sonrió y se movió para abrirle la puerta de copiloto y volvió a su puesto.

Ambos emprendieron camino sin decir algo más, la noche estaba bastante bonita y cada se perdía en sus propios pensamientos, nisiquiera había música para decir.

Llegaron al fin al lugar donde se realizaría la gran cena, que era en uno de los restaurantes más lujosos posibles del país.

— Menos mal no hay periodistas.— Murmuró Hiccup al parquear.

— ¿Periodistas? Por estar razón no quería que llegaramos juntos.— Refuño. Hiccup no dijo nada y salió del auto dispuesto a abrirle la puerta, pero ella fue más rápida y salió— Yo no voy a esperar que me abras la puerta.— Le respondió al ver la expresión del chico.

— Auch, justo en mi caballerosidad.— Fingió dolor y empezaron a caminar hacía el lugar.

— Te recuperarás. ¿Dónde nos toca estar? Recordé que nos falta preparar para nuestra presentación.

: PARADISE :Where stories live. Discover now