Capítulo 8

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Avery lloró hasta quedarse sin lágrimas, descargando al fin todo lo que la venía atormentando desde hace un tiempo y había sabido ocultar muy bien. Pero allí, en medio de aquel salón y con la dignidad mancillada y pisoteada, no se sentía tan fuerte como pensaba que era.

Se limpió con brusquedad el rostro, soltando respiraciones lentas y profundas para tranquilizarse. Llorar no le servía de nada y tampoco haría que sus problemas se solucionaran. Lamentarse no hacía más que hundirla en el infierno que ya la había consumido.

Fue necesario permitirse quebrarse por breves instantes para sacar las frustraciones de su pecho, pero no se quedaría allí sentada llorando de por vida. Haría amena su estadía en esa casa tan lujosa y en manos de ese hombre tan bipolar, pese a que desearía tener poderes sobrenaturales para desaparecer de ese lugar.

Una vez se calmó, se fijó en la carpeta que estaba tirada en el suelo junto a un bolígrafo negro. Su corazón se aceleró de anticipación, suponiendo que ese era el contrato que debía leer y firmar sin objetar.

Soltó un largo suspiro y se acercó para tomarlo entre sus manos. Se levantó del suelo y caminó lejos de la cocina para no recordar lo que acababa de suceder, pero el recuerdo estaba fresco en su memoria y latía dolorosamente entre sus piernas con cada paso que daba sin rumbo alguno.

La casa estaba silenciosa y parecía estar vacía, pero sus pasos y su respiración hacían eco en el lugar. No sabía a dónde ir ya que no conocía la estructura, por eso se dirigió a la habitación donde había despertado y se sentó en el sofá individual que había allí.

Un suspiro más escapó de sus labios a la vez que abría la carpeta y fijaba los ojos en cada letra que estaba escrita en las hojas:

El siguiente acuerdo se celebra a los doce días del mes de marzo, dando constancia que, Avery Marshall, bajo su responsabilidad da su total consentimiento a mantener acciones de índole sexual por el tiempo determinado de seis meses con Jeray Le Bon. (El tiempo establecido puede variar dependiendo el comportamiento y las aptitudes con el paso de los días; es decir, podría extenderse o acortarse según la decisión que tome el Sr. Le Bon).

Puntos importantes que debe tener en cuenta para que la relación entre las dos partes sea favorable y funcione sin mayor contratiempo.

•Estar de acuerdo explícitamente en todas las actividades, ya sea diciendo "Sí" o con otra declaración afirmativa como: "Estoy dispuesta".

•Empleando señales físicas para hacerle saber a la otra persona que  se siente cómoda llevando las cosas al siguiente nivel, así como también habrá una señal en específico para dar entender la incomodidad y/o dolor.

•No puede negarse a ninguna de las peticiones del Sr. Le Bon, tomando en cuenta que ha cedido toda su voluntad a él.

•Está prohibido tomar la iniciativa por su cuenta y recuerde que cada encuentro será en el salón destinado a las actividades sexuales, o a donde el Sr. Le Bon lo establece.

•Cabe resaltar que no está en derecho de negarse y debe cumplir sin objetar todas las órdenes del Sr. Le Bon.

•Tiene prohibido salir de la casa sin previa autorización o guardia de seguridad, mas no quiere decir que deba permanecer encerrada. Siempre que quiera ir a casa, pasar tiempo con su familia, realizar alguna compra o alguna otra actividad que no involucre su relación con el Sr. Le Bon, tiene permitido salir y lo hará bajo supervisión y vigilancia.

•Vivirá en la mansión por el tiempo que dure el contrato, así que tenga en cuenta que puede disponer de todos los espacios sin problema alguno.

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