El idiota es mi vecino.

«Capítulo 10: ¿¡Qué!?

Está bien, Ali respira, tu puedes. No es como si el sol no fuera a volver a salir nunca más. O como si se hubiera acabado el helado. O como si no existieran las vacaciones. O el fin del mundo.

No, claro que no, es mucho peor.

Os preguntaréis qué me pasa, pues bien, os lo explicaré como la buena persona que soy.

"Tampoco te flipes.."

Tu te callas.

"Ves."

***FLASHBACK***
-¿Qué?.- espeté molesta, no sabía que quería y la verdad, no me daba muy buena espina. ¿La razón? Su estúpida y sexy sonrisa.

Ok, olviden lo último.

-Wow, que humor. ¿No puedes ser más amable?.- Agrandó su sonrisa al ver que eso me había molestado aún más.

"Puedo, pero no quiero." pensé, y me hubiera gustado decirle. Pero recordé una de las charlas con mi madre en la que me pedía que fuera más amable con él. Pf, como si fuera posible.

-Oh si, mira.-Sonreí yo esta vez.- ¿Qué quieres, vecino idiota?.- eso no se lo esperaba.- ¿Así o más?

-No entiendo por qué me odias tanto querida vecina.

Oh, no lo entiende.

-Bueno, eso es algo normal si recordamos que no sueles pensar mucho.- Estaba de mal humor, en el fondo, tampoco lo odiaba tanto, pero él seria mi saco de boxeo, así lo quiso él.

-Sinceramente, no me hace falta pensar para ser sexy.- sonrió él esta vez.

-Idiota.- Murmuré, y para mi suerte, lo.escuchó.

-Hey, eso dolió ¿sabes?.- dijo mientras fingía un puchero que lo hacia parecer adorable y se colocó su mano en el pecho. ¡JÁ!

-Oh, que pena.- Dije mientras me limpiaba una lágrima inexistente.- ¿Me dirás que demonios quieres o...?

-Ah, sí, verdad. ¿Está tu madre? .- ¿Para qué quiere este idiota hablar con mi madre? ¿Se la querrá ligar?

-Mi madre está divorciada, no desesperada.- el hecho de imaginarme a mi madre y a él.. Dándole al tema me ponía enferma.

-¿¡Qué!? Iugh, no.- hizo una mueca de asco.- Creeme que no es para eso.

-Ah, ¿entonces?.-le pregunté.

-¿Esta o no?.-